Capítulo 5.1: El Aro del Tiempo

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Solamente faltaba una cosa más que hacer para terminar el ciclo escolar, una decisión que es importante y puede alterar el futuro ahora que Belem es mi pareja. Estando ya a pocas cuadras de llegar a su casa, me comento lo que tenía previsto. Y le tuve que dar mi respuesta:
–Belem, debes pensar muy bien en lo que deseas elegir.
–Ya lo sé Matt, pero...
– ¿Pero qué?
–No me gusta esta carrera como para ejercerla de profesión, pero si me voy a otra, ya casi no nos podremos ver, tal vez deba continuar, y así poder estar contigo.
Esto es malo, si ella se queda, no tendrá la misma oportunidad de ser presidenta, así que debo convencerla de cambiar pero sin hacerme notar que realmente deseo que se cambie.
–Es una dura elección, pero no debes decidir con sentimientos, debes tomar lo que sea mejor para ti y para tu futuro.
–Lo sé, pero, ¿Qué pasara con nosotros?
–Aunque te vea menos tiempo, mis sentimientos no cambiaran, y prometo ir a visitarte a tu casa cada que se pueda, no te descuidare Belem.
–Me calma escuchar eso, lo pensare bien el resto del día, por la noche te envió un mensaje para confirmar mi elección.
–Me parece bien.
Nos despedimos con un beso, ya solo faltaba esperar al final de día para tener la respuesta.

Amaneció, comenzó el primer viernes de diciembre. El fresco del invierno estaba ya a la vuelta de la esquina. Siendo ya este nuestro último día escolar no se hizo nada, solo aclarar calificaciones y ya éramos libres. Ayer no había recibido el mensaje de Belem por la noche con su respuesta, ni he sabido de ella hasta ahora, algo me comenzaba a preocupar hasta que la vi entrar, llego un poco retrasada el día de hoy, muy apurada, se notaba por sus jadeos y la forma en que hablaba.
– ¿Qué tanto me perdí Matt?
–Es el ultimo día, ¿Qué te podrías perder?
–Bueno, no lo sé... Algo.
–Tranquila, ¿Qué paso ayer?, Estuve esperando tu mensaje pero nada.
–Se me acabo la pila, así que lo tuve que dejar cargando.
–Y cómo te conozco bien, por la prisa se te olvido en casa.
Belem se me quedo viendo y comenzó a revisar sus bolsillos, seguido de su mochila, luego me volteo a ver con una sonrisa un poco sarcástica.
–Lo sabía, Belem, no lo llevas contigo– soltó una ligera risita, tal vez de pánico o por reconocer lo torpe que a veces es. –No importa, ¿Cuál fue tu elección entonces?
–Voy a decidir cambiarme, pero solo si me prometes visitarme y que seguiremos juntos.
–Claro que lo prometo, y estoy seguro de que esa elección tuya te llevara a un gran futuro.
–Realmente no estoy segura, pero eso espero.
–Tú solo confía en mí– El chico que sabe el futuro y puede volver en el tiempo para que no metas la pata.

Y así termino semestre escolar, paso el tiempo y con ello las fiestas de Navidad, y después la de Año Nuevo. No contare que paso exactamente por esas fechas, solo grandes cenas y convivencia familiar, obviamente también pasaba el tiempo con Belem, todo era bueno. A mediados de Enero comenzó el nuevo ciclo escolar, llegue temprano a clase, esta vez no me tocaba a la primera psicología, sino hasta la tercera hora, así que esperaba pacientemente la noticia de que mi profesor ya no podrá dar clase, y que nos otorgaran a un nuevo docente. Lástima que no pasaran las cosas como yo me lo esperaba...
–Buenos días jóvenes, me alegra ver cara conocidas como la tuya Matthew.
Mi maestro Myers entro al salón muy alegre como siempre, no debería estar aquí, no se supone que debía haber hecho un saludo así, debería de haber llegado alguna secretaria anunciando quien nos iba a impartir la clase de ahora en adelante, pero ahí está él, mirándome a los ojos con una gran sonrisa y yo sin poder asimilar lo que estaba pasando.

¿Qué pude haber hecho mal?, ¿Qué error cometí? Si estoy seguro de que hice todo tal cual la primera vez que lo viví. No entiendo que pudo haber salido mal, no creo que haya sido por lo de Belem, pero bueno, esto, ¿Realmente será malo? Es decir, cuando paso eso pues nos volvimos muy buenos amigos. También me dio consejos de vida que ya no necesita volverme a dar, además de entregarme el brazalete, por lo tanto sería algo... ¿Inútil? El que haya pasado todo como la primera vez. Tengo que revelarle la verdad, él confiara en mí, yo lo sé.

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