Capitulo 53

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La falta de oxigeno comenzaba a hacerse presente, mas Thomas no se separaba de mis labios y para ser sincera yo tampoco quería hacerlo. Pero si quería seguir disfrutando de MI NOVIO, tenía que hacerlo.

Apenas me separe de sus labios trate de recuperar el aire vital perdido, Thomas se entretenía en mi cuello mientras yo me reponía. Pero fue completamente inútil ya que el placer que Thomas me brindaba con sus caricias en mi cuerpo, unidas a los besos y mordidas impartía en mi cuello, solo me aceleraban más.

—Sabes... No es justo— susurro con su melodiosa voz en mi oído mientras que jugaba con los tirantes de mi sostén.

—P...Pues hazlo... hazlo más justo— trate de hablar lo más claro posible pero me desconcentraba de sobremanera.

Rodeo mi cintura con un brazo y giro haciéndome quedar sobre él, se divertía con el broche de mi sujetador. Hasta que finalmente decidió desabrocharlo mientras yo saboreaba esos labios ahora de doble grosor e intensidad de color. Me aparte de mi ahora 'vicio' para eliminar de la escena la penúltima prenda que cubría mi cuerpo y asi dejar mi torso completamente desnudo

Después de recorrer con la mirada, cada centímetro cuadrado de mi cuerpo, posicionó sus manos en mi cadera, estas se desviaban a mi abdomen subiendo por este hasta llegar a mis pechos, los cuales comenzó a masajear parsimoniosamente. Sus caricias, masajes, roces, todo. Simplemente todo lo que hacía me volvía completamente loca. A consecuencia del placer, me sujete de su pecho mientras que encorvaba la espalda y echaba mi cabeza hacia atrás. Beso la loma de mis pechos al mismo tiempo que me tomaba de la cintura y asi girar lentamente y recostarme con suma delicadeza sobre el acolchado, acoplo su perfecta anatomía a la mía, el sentir su tibia y tersa piel sobre la mía era completamente delirante. Sus manos seguían recorriéndome completa, mientras que nuestros labios estaban fundidos en una apasionado beso. No podía evitar que pequeños gemidos se colaran por mis labios sobre los de Thomas, sus mortales caricias eran las culpables. Sin embargo estos solo incitaban a Thomas a poner más esmero en su 'tarea'.

Bajo sus besos por mi mejilla hasta mi cuello, para depositar en este, cálidos y húmedos besos, de vez en cuando hincaba sus dientes para dar suaves mordidas, las cuales lejos de producirme dolor, solo aumentaban mi éxtasis. Pero lo que simplemente me hacia enloquecer, lo que provocaba una guerra de hormonas en mi interior, era cuando deslizaba su lengua por mi piel. La mescla de sensaciones que Thomas me producía con solo hablarme, darme un beso o una caricia era lo mejor que podía existir.

Ya no aguantaba más, agradecía de sobre manera que la casa estuviera completamente vacía, mi ansiedad aumentaba., Los labios de Thomas se mesclaban con los míos cuando comencé a jugar con el elástico de sus bóxer haciendo caricias sumamente delicadas, este se quedo estático, cerrando los ojos al mismo que mordía su labio inferior.

Decidida comencé a bajar esa última y azul prenda que cubría su cuerpo, Thomas rápidamente abrió los ojos y tomo mi mano.

—______ (tn) si tu...— comenzó a hablar entrecortadamente

—...Si estoy lista— lo interrumpí mientras que acariciaba su mejilla, me acerque para besar sus labios —Quiero que seas tú— susurre sobre sus labios para luego volver a mirarlo a los ojos. Me miraba entre tierno y pensativo pero después una sonrisa se dibujo en su rostro. Regreso a mis labios para darme un beso lleno de sentimiento, completamente alucínate.

—Sera un honor— susurro en mi oído mientras dejaba un camino de besos desde mi mejilla hasta mi cuello. Mientras que yo continuaba lo que me había interrumpido, Thomas me ayudo a deshacerme de la prenda restante sobre mi cuerpo y asi dejarla sobre el piso junto con toda nuestra ropa.

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