Todos quieren a Stiles

11. La verdad

Pasó unos segundos cuando el moreno se animó a hablar de nuevo.

-¿Stiles?

-Mmm...

-No es que no me alegre de verte, lo cual la verdad sí, sí estoy muy feliz de verte, pero ¿no crees que deberías quitarte de encima mío?- dijo, riéndose un poco.

-Tienes razón- comentó el castaño, sin hacer amago de quitarse de encima del lobo.

-Stiles- llamó al castaño.

-¿Qué?

-Quítate de encima- le ordenó divertido.

-Lo siento- acto seguido se levanto con rapidez, para después ofrecerle su mano a Derek, él cual agarro su mano y con ayuda del hiperactivo se levanto del suelo.

-En serio me da mucho gusto verte Stiles- dijo, dedicándole una sonrisa dulce.

-También a mi me da gusto verte Derek- le devolvió la sonrisa.

-Por cierto feliz cumpleaños lobo amargado- dijo, sonriéndole ampliamente.

-Gracias.

-¿Veintiún años, eh? Eso es estar viejo de verdad- se burló el castaño.

El lobo sólo puso los ojos en blanco, para luego sonreír divertido. Antes de hablar, le dedicó una mirada rápida al castaño de arriba hacia abajo.

-Wow. Mírate has cambiado tanto en estos años. Estás más alto, pero no más que yo, claro.

El humano se rió un poco.

-¿Y qué hay de ti? Estás más musculoso y tienes barba. Te sienta bien he de decir.

-Gracias. ¿Y si entramos? Tengo muchas ganas por ver a los demás- comentó, tomando sus maletas.

Al escuchar eso Stiles se alarmó un poco. Aún no recibía el mensaje de Cora.

-Sí claro, pero antes ¿recuerdas que nos quedamos en medio de una charla ayer? No te termine de contar- hablo algo nervioso.

-Ah claro. Lo de que les dijiste a tus padres de tu bisexualidad. ¿Qué dijeron?- inquirió interesado.

-A pues...- no terminó de hablar porque fue interrumpido por su teléfono, el cual vibro en el bolsillo trasero de su pantalón. Lo saco y miro el mensaje que le había llegado, mensaje que era de Cora diciendo que ya lo llevará dentro.-¿Sabes? Te cuento mientras entramos, al fin y al cabo es una historia corta, y además con un final feliz- hablo de carrerilla, mientras toma al lobo por el brazo.

-Ok, si te parece bien- dijo extrañado, por la repentina prisa por entrar.

Y con eso empezaron ambos a caminar rumbo a la casa.

-Se los dije mientras cenábamos una noche, simplemente les dije: soy bisexual, para lo cual mi padre dijo: ajá ¿y luego? ¿Te hago una fiesta? ¿Te regaló un pastel?, y mi madre dijo: cariño nos estás diciendo algo que ya sabíamos de sobra. Y se fue todo básicamente, pero después de decir todo eso, me dijeron lo típico, que no importa de quién me enamore, no importa cuál sea su sexo mientras sea feliz se dan por satisfechos- relató, arrastrando a Derek hacia la casa.

-Me alegro de que se lo tomaran bien. No todos los padres aceptan eso, agradezco que mi familia me haya aceptado- comentó el moreno, subiendo las escaleras junto con el humano.