Todos quieren a Stiles

5. A la mierda Derek Hale

El castaño se encontraba acostado en su cama, mirando hacia la pared, sin ánimos de salir de ésta después de esa llamada que lo destrozo, tan contento estaba por escuchar la voz de su lobo amargado, hasta que escucho lo que menos quería oír.

Escucho como la puerta de su habitación se abría pero él no se molestó en mirar quién era, lo deducía.

-¿Stiles, estás bien?- preguntó el hispano preocupado.-No contestabas mis mensajes ni llamadas. Me preocupe.

-Le dije a mis padres que no dejará subir a ninguno de mis amigos- hablo con fastidio.

-Tu madre me abrió, insistí mucho y además viendo tu estado creo que ella pensó que necesitarías un amigo- se sentó en la cama del castaño.-¿Qué pasó? Dime para eso soy tu mejor amigo, puedes decirme todo.

-No quiero hablar de eso- dijo intentando ahogar su llanto en la almohada.

-Esto tiene que ver con el pendejo de Derek ¿verdad?- dijo Scott molesto pero no con su amigo sino con susodicho antes.

-Sí- comentó sin despegar aún su rostro de la almohada.

-Vamos, cuéntame qué pasó- le animó a hablar.

-Si vas a seguir así de pesado, bien- despego su rostro de la almohada para mirar a su amigo. Los ojos de Stiles estaban rojos por tanto llorar, Scott pudo ver como una última lágrima se deslizaba por la mejilla derecha de su amigo.

Maldito Derek Hale.

-Así que simplemente esperaremos un poco antes de que decidamos que estamos saliendo en serio- le contó el hiperactivo a sus padres.

-Me parece genial que salieras con Malia, ella es muy linda- dijo John para después comer un poco de su lasaña.-Ojalá lo hagan oficial pronto.

-Ay Jonh, todavía son muy jóvenes, tienen trece años, además Stiles sigue siendo mi bebé- hablo Claudia con algo de nostalgia mientras miraba a su hijo.

-¡Mamá, ya no soy un bebé!- se quejó el castaño.

-Tu siempre serás mi bebé.

Stiles sólo mascullo por lo bajo que ya no era un bebé y siguió comiendo su lasaña. Unos minutos después suena su teléfono. El castaño saca su teléfono del bolsillo delantero de su pantalón, pensando que era Malia o Scott. Se sorprendió de ver el nombre del contacto, pero su sorpresa dio lugar a una felicidad enorme. El sheriff al ver la mirada y sonrisa rebosante de alegría que le dedicaba al aparato decidió preguntar.

-¿Es Malia?- le preguntó sonriéndole.

-No, es Derek- dijo todo emocionado sin dejar de ver el teléfono.-¡Al fin me llama, como lo he echado de menos! Si me disculpan voy a contestarle- se levanto de su asiento para después salir del comedor e irse a sentar a la sala.

Ya sentado en el sofá decide contestarle.

-Hola Stiles- lo saludó el moreno con voz animada.

-¡Derek, hola, no sabes cómo te he echado de menos! ¡Eres un lobo amargado malo, apenas que te dignas a llamar!

-Lo sé, lo sé y lo lamento. Pero la universidad es muy difícil, con tanta tarea y todo eso, y apenas he tenido tiempo de dormir. Sólo he tenido tiempo ahora para llamarte. No sabes cuánto te echado de menos, extraño nuestras quedadas a dormir en mi casa o en la tuya.