DULCES SUEÑOS ϟ LIAM PAYNE

Capítulo 13: La última.

-No- Me restregué los ojos.
-Espérame- Besó mi mejilla- Vuelvo en seguida- Se fue corriendo.

¡Demonios! Como es que puedo tener esos sueños y luego verla sin que se me caiga la cara de vergüenza, definitivamente algo maño debe haber conmigo… volviendo al tema, ese sueño ¡Ese sueño! Demasiado intenso para mi gusto, de solo pensar en ello algo en mis pantalones comienza a levantarse

-Solo fue un sueño- Mencioné con la vista adormecida.

A toda velocidad venia ella. Con una sonrisa que de poco se acercaba.

-Volví- Di un largo bostezo.
-¿Tienes sueño?
-No- Mintió.
-Vamos, es obvio- Hizo andar el motor.
-Tenemos que llegar lo antes posible a Bristol.
-Apenas puedes mantener los ojos abiertos- Le reproché.
-¿Qué quieres?
-Qué descansemos, tanto yo como tú lo necesitamos.
-Está bien- Resopló- En cuanto vea un hostal o algo paramos- Asentí.

¿Dónde es que se esconden las cosas cuando las necesitas? Más de diez minuto y nada… ni un solo lugar en el que nos podamos hospedar hasta que amanezca.

-Veo luces por allá.
-También las veo- Aumento la velocidad.
-Emm… ________- Mencione nervioso.
-¿Qué?
-Es un motel- Tragué saliva.
-¿Qué tiene?- Se cambió a la pista derecha.
-Nada, es que me resulta incómodo.
-¿Por qué?
-No sé.
-Créeme que no sentir ruidos raros mientras duermes… Si eso es lo que te preocupa.

Entre cabizbajo, la sola idea de entrar a un motel me causaba incomodidad pero lo peor estaba por venir… hablar con el recepcionista. A la incomodidad se le sumo la vergüenza, ni siquiera pude mirar al hombre sin que la sangre se me acumulara en las mejillas, así que finalmente _______ fue la que termino hablando.

-Es por aquí- Tomó mi mano- Esta- Paró frente a la habitación 22.
-Entra tú primero- Le abrí la puerta.

Para no ser una de las mejores de las mejores habitaciones del lugar estaba muy bien decorada y equipada. Una enorme televisión, jacuzzi y una gigantesca cama.

-¡La cama es enorme!- Como niña pequeña saltó en ella.
-No saltes- Dije al notar el ruido.
-Es un motel Liam, aquí todas las cama suenan así- Se bajó de ella- ¡Un jacuzzi!
-Pareces niña pequeña- La abracé por la espalda.
-¿No te molesta que me meta al jacuzzi?- Dio el agua.
-No, pero solo un rato, quiero que te duermas temprano- La apegué más a mí.
-¿Te importa que me meta desnuda?
-¿Qué?- La solté.
-No traje más ropa- Se giró e hizo una mueca.
-Está bien- Camine hacia la cama- Yo estaré dado vuelta- Ella rió.
-Okey- Volvió a reír.

La tentación me mataba pero un solo vistazo me bastaba para desatar el deseo contenido en mis pantalones…

-Ya puedes voltear.

Ropa en el piso y una hermosa chica sumergida en el agua, aunque no lo supuse tan solo eso fue suficiente para desligar la pasión.

-¿Cómo está el agua?- Acaricié su hombro descubierto.
-Tócala tu misma- Llevó mi mano al agua- Te deberías haber metido también.
-¿Qué tal si me meto ahora?- Me hinqué a un lado del jacuzzi.
-Me gustaría algo de compañía- Asintió.

Me deshice del polerón, luego la polera y los pantalones.

-Liam- Me detuvo- No quiero empezar algo que no vamos a terminar- Me miró apenada.
-No haré nada que tu no quieras- Bajé mis bóxers y me metí junto a ella- Lo prometo- Tomé su rostro en mis manos.
-El problema es que si quiero- Comenzó a jugar con la espuma.

¡Mi’erda! Esta es la segunda vez que me pasa esto, no sé si podré soportar un tercera…

-Sabes que a mí también me encantaría pero…
-Puedo tener sida, lo sé- Sus ojos brillaron.

Su rostro me conmovió por completo, sabía que esto no era mi culpa pero de alguna forma tenía la necesidad de solucionarlo pero ¿Qué es lo que puedo a hacer yo por ella?

-¿Necesitas algo?- Limpié una escurridiza lágrima.
-Estoy bien.
-No tienes que mentirme linda- Besé su frente- Conmigo jamás será necesario.
-¿Por qué tienes que darme tantas razones para amarte?- Apoyó su cabeza en mi hombro.
-Lo mismo debería preguntarte yo a ti…

¿Qué demonios estoy haciendo? Las cosas ya están claras, no es necesario darle más vueltas al asunto. Estoy seguro que ella será la última… y la única.

-Antes de cometer una estupi’dez necesito que me contestes una cosa.
-¿Qué locura y que cosa?- Levantó su cabeza.
-________- Suspire y me puse al frente de ella- ¿Tú me amas?
-Sí Liam, te amo- Sonreí.
-Yo también te amo- Tomé su cintura- Antes de lo que pueda pasar después necesito una última respuesta de tu parte…
-¿Cuál es la pregunta?- Acarició mi cabello.
-¿Me harías el honor de ser mi novia?- Crucé los dedos bajo el agua.
-No es necesario que cruces los dedos- Rió.
-¿Eso es un sí?- Levanté un poco el torso y me acerqué a ella.
-Sí- Atrapó mis labios con los suyos- Espera… ¿Cuál era la estupi’dez que ibas a cometer?- Sonreí malicioso.

Con fuerza tomé su mojado cuerpo y lo alcé. Con ella en mis brazos salí del jacuzzi y la tumbe sobre la cama.

-¿Qué vas a hacer?
-Hacerte ver estrellitas…

Me eché uno de sus pezones a la boca y lo lamí de forma circular sintiendo como de a poco se endurecía cada vez más. Bajé mis manos por su estómago hasta rozar con un dedo su parte más húmeda. Ella soltó un jadeo y cerró los ojos.

-Así es hermosa, tan solo dedícate a disfrutar.

De acariciar su feminidad pase a meter un dedo y de uno pase finalmente a dos. Ella estaba bastante estrecha, cosa a su favor ya que siempre me ha encantado aquello en una mujer.

-Di mi nombre- Susurré en su oído dandole más velocidad de mis dedos.
-Liam…- Murmuró en largo gemido.

Mis dedos se deslizaban como la mantequilla entre sus pliegues ya que aunque sus paredes estuvieran contraídas su lubricación estaba a tope lo que en definitivamente era una excelente combinación.

-¿Te gusta?- Moví lentamente mis dedos en ella.
-Me encanta- Se aferró a mi espalda- No pares Liam, por favor no pares.
-No lo haré- Enterró sus uñas en mi espalda tras yo retomar velocidad con los dedos.

No me gusta romper promesas pero esta es casi una misión imposible, no puedo evitar darle placer sin qué el objeto de todos mis deseos me supliqué tener algo de este también.

-No puedo seguir haciéndolo- Saqué empapados mi dedos de su cavidad.
-No te preocupes- Bajó su vista y abrió sus ojos grandes- ¡Oh mi dios!
-Esta es la razón porque no puedo seguir haciéndolo- Miré mi aumentado miembro- Estoy que exploto- Saqué el sudor de mi frente.
-Te dije que no quería que empezar algo que no podríamos terminar.
-No- Negué con la cabeza- Esto lo vamos a terminar.

Tomé mi miembro con una mano y lo acerqué a su entrada.

-¡Liam!- Detuvo mi mano- No hagas algo de lo que te puedes arrepentir.
-Te amo- La besé- Y porque te amo no quiero que pases por esto sola- Entré dificultosamente en ella.
-Liam…- Se mordió el labio en un exasperado gemido.
-¿Estas bien?- Paré.
-Ahora así- Dejó de lado su expresión de dolor.

Me tomó por el cuello y me acercó a sus labios en tanto las embestidas de mi parte aumentaban.

-______- Suspendí todo- Quiero que seas mi última novia…