Capítulo 17: Un juego muy divertido.

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-Liam- Sentí una mano en mi brazo- Sabes muy bien que fue un error pero es Zayn es…Zayn.
-Lo sé y por eso me enoja tanto.
-¿A dónde vas?
-No sé- Seguí caminando.
-Tranquilízate.
-No puedo amor ¿Qué pasa si le hubiese pasado algo a Amanda?- Me detuve en medio del corredor- No sé qué hacer sin ella.
-Ven- Me empujó dentro de una habitación.
-¿Qué haces?- Dije viendo como le ponía seguro a la puerta.
-Súbete- Indicó la camilla.
-¿Qué?
-Arriba- Ordenó.
-De acuerdo- Me senté.
-Zayn no lo hizo con querer- Se puso frente a mí.
-Claro que se eso pero fue muy estúpi’do de su parte haber hecho una fiesta.
-Reunión social…
-Es lo mismo.
-Nada malo paso- Tomó mis manos- Lo que importa es que Mandy y todos estamos bien.
-¿Qué pasa si algo así vuelve a suceder?
-No pienses en el futuro.
-Tengo dieciocho años, necesito pensar como adulto.
-No- Soltó mis manos- Puedes ser niño el tiempo que tú quieras.
-No puedo ser niño, tengo responsabilidades que cumplir.
-Bueno en esos momentos puedes pensar como adulto pero… ¿Por qué no ser niño todo el otro resto del tiempo?
-Ya no recuerdo como es ser niño- La atraje por la cintura.
-Todo se trata de jugar, la vida es un juego nuevo que cambia cada día- Caminó hacia un perchero.
-¿Qué haces?- Dije viendo cómo se ponía un delantal blanco.
-Vamos a jugar- Se abotonó hasta el último botón.
-¿Qué?- Reí.

Se acercó y me extendió la mano para que me bajara de la camilla. Posó sus manos en mi pecho y comenzó a bajar el cierre de mi polerón.

-¿Quieres jugar a la doctora?- La apegué bruscamente a mi cuerpo.
-¿Le molestaría no tocarme de esa forma?- Se alejó y caminó al escritorio- Se puede quitar la ropa- Dijo sin siquiera mirarme en cuanto anotaba algo en un papel.
-¿Toda la ropa?- Di una carcajada.
-No, solo la polera y los pantalones- Siguió con la mirada esquiva.
-Cómo quiera doctora…

Me mordí el labio al ver como sentaba sobre la mesa con una pierna cruzada sobre la otra. Cumplí su petición y me desvestí hasta quedar tan solo en bóxers.

-¿Y ahora qué?- Me senté en aquella camilla.
-Recuéstese- Sacó un estetoscopio de un cajón.
-No creo que debas sacar eso- Me tumbé con la vista en el techo.
-Es mi trabajó- Dijo enfocada en su papel.
-¿Me va a revisar o no?- Reí.
-En seguida- Se subió sobre mí y dejó caer sus rodillas a ambos lados de mis caderas- Respire hondo- Puso el aparato en sus oídos y el otro extremo en mi pecho.
-¿Cómo está mi corazón?- Agarré su trasero.
-¿Qué demonios está haciendo?- Se bajó raudamente.
-¿Me dirá como está mi corazón?- Me enderecé.
-Late fuerte- Se encogió de hombros- Ahí- Apuntó la pesa.
-¿De verdad?- Reí.
-Sí- Me miró seria.
-De acuerdo doctora.

Me subí a la pesa y me quedé viendo la pared, al momento de apoyar mis manos contra la pared sentí algo tras de mí. ________ se subió conmigo en la pesa y comenzó a besar mi espalda mientras pasaba sus dedos pulgares por dentro de la tira de mis bóxers.

-¿Por qué mejor no metes toda la mano?
-¿Perdón?- Me soltó.
-¿Qué?- Me di vuelta- Eso es lo que quieres- Le guiñe un ojo.
-No puedo- Se cruzó de brazos- ¿Le importaría retirarse?
-¿Por qué?- Me puse al frente de ella.
-Porque su comportamiento no es para nada apropiado- Se sentó delicadamente sobre el escritorio.
-Me iré en cuanto solucione mi problema.
-¿Qué problema?
-Creo que algo anda mal allá abajo- Bajé la vista a mi incipiente erección.
-Está bien- Estiró mis bóxers hacia ella y vio por dos segundos ahí dentro- No hay nada malo- Se mordió disimuladamente el labio- Está muy bien.
-No aguanto más.

La tomé por la cintura y la alcé, ella me rodeo con sus piernas en cuanto yo de un manotazo botaba todo lo que estaba sobre el escritorio, dejando el paso libre para recostar delicadamente su espalda.

-Desde que entramos aquí quiero verte gozar sobre esta mesa- Besé su cuello.
-No tengo permitido tener ningún tipo de vínculo con mis pacientes- Intentó zafarse de mi agarre.
-Necesito comprobar si soy eyaculador precoz- Seguí besando su cuello.
-En ese caso…

Mordió mi cuello y dio un giro para dejarme bajo ella. Sus besos bajaron desde mi cuello hasta mi ombligo y siguieron en descenso hasta llegar a la tira de mis bóxers. Alzó la cabeza y me sonrió para después bajar con paciencia aquella prenda que estorbaba. Lo miró por unos segundos y sin vacilación lo tomó entre sus manos, de dos pasó a una sola mano con la cual comenzó a hacer rudos movimientos de arriba abajo.

-¿Te gusta, no?
-Sí- Entreabrí los ojos para verla.

Ella rió dulcemente y luego sus movimientos aumentaron aún más hasta que de un momento a otro se detuvieron en seco al igual que el contacto de su piel con la mía. Me decidí a abrir los ojos, más no pude, sentí algo húmedo en mi miembro que me obligó a mantenerlos cerrarlos. Su lengua daba movimientos circulares por la punta de mi erección… sin duda esto era el paraíso.

-Sin duda esto te gusta más- Adivinó.
-Sí- Gemí mientras sujetaba su pelo como si tuviese una coleta.

Se sentía increíble, por decir poco, le había hallado una nueva función a sus labios. Necesitaba penetrarla, por más que su boca fuese fantástica no se comparaba a la calidez de su feminidad. 

-Necesito hacerte mía- Me paré y la levanté hasta la camilla.

La dejé caer y me subí sobre ella en tanto desesperado desabrochaba el cierre de su pantalón. No podía sacarlo, las manos me fallaban.

-Te ayudo- Ella sola se deshizo de su pantalón.
-Amor necesito hacerlo ya- Dije con la respiración agitada.
-Calma- Alzó mi rostro para besarme. Aproveché para deshacerme de su ropa interior.
-¿Estás lista?- Abrí sus piernas y pase la punta de mi miembro por su entrada.
-Sí- Dio un jadeo.

Entré fuerte, jamás había tenido tantas ganas de follar en mi vida, quería hacerla sentir en el cielo y más allá de las estrellas. Sin parar de penetrarla duramente comencé a desabotonar el delantal blanco que todavía la cubría. Lo quité y saqué su polera para dejarla solo con el sujetador.

-¿Te duele?- Pregunté al ver las caras que ponía.
-Un poco- Se quejó con un gemido desgarrador.
-Iré más despacio- Ella asintió.

No fue nada fácil disminuir la potencia de las bestiales embestidas pero no puedo negarle el placer a ella también.

-Lo lamento- Murmuré sobre sus labios.
-No te preocu…- Enterró sus uñas en mi espalda.
-¡Ah!- Grité.
-Lo siento pero eso me dolió- Cerró los ojos.
-No sé qué me pasa, no puedo controlarme- Comencé a besarla.
-Creo que estoy algo ceñida.
-¿Algo?- Di una risa orgásmica- Hoy estás más estrecha de lo norma pero… ¿Sabes qué?- Susurré lo último en su oído- Eso me encanta.
-Bésame- Enredó sus manos en mi cabello.

No alcancé a besarla ya que sentí como todo aquel acto sexual comenzaba a dar frutos, salí rápido de ella y acabé por dejar mi semen esparcido por todo su vientre.

-Está tibio- Rió tiernamente.
-¿No te molesta que haya…
-No- Sonrió al ver mi expresión de vergüenza.
-Espera- Me estiré y saqué un poco de ese áspero papel típico de los médicos.
-No sé cómo puedes ser tan lindo- Dijo viendo como limpiaba aquel líquido espeso su estómago.
-No sé cómo tú puedes ser tan perfecta- Arrugué el papel y lo lancé lejos.
-¿Perfecta?-Rió- Claro y tú eres feo- Dijo con un tono sarcástico.
-¿De verdad soy feo?- Bromeé en cuanto me ponía a su lado y nos tapaba con el delantal blanco.
-Eres hermoso- Acarició mi rostro.
-Tú eres perfecta- La abracé- Eres perfecta para mí.

Sin más y con las respiraciones aun agitadas ________ se durmió en mi pecho mientras tanto yo jugaba plácidamente con su cabello, pero no tarde mucho en caer en el mismo estado que mi novia.

-Despierta- Sentí un pequeño besó en mi mejilla.
-________- Sonreí con los ojos sellados.
-Papi, soy Mandy- Abrí mis ojos de golpe.

Vi a Zayn y a Ale mirándonos al igual que la pequeña Amanda pero ¿Dónde está mi novia? Moví mi cabeza y ahí la hallé tras mirar hacia arriba… Dormía sentada en cuanto yo estaba acostado en los asientos con la cabeza en sus piernas.

-El doctor me dijo que te dijera que tenía que consumir más agua porque me había des… deshin… deshinchado por no beber mucha agua- Todos reímos.
-Es deshidratado elfa- Corrigió Zayn con una sonora risa.

Nada había pasado, tan solo había sido una mala jugada de mi mente pero… wow que sueño ese que tuve con _______, de hecho puedo decir que lo sentí en cuerpo y alma. Espero convencer a _______ de jugar más seguido…

DULCES SUEÑOS ϟ LIAM PAYNEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora