Capítulo 22

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-tu?, maldito infeliz, que es lo que quieres de mi!- dije casi gritando.

Toda mi rabia de años se acumuló lista para ser soltada.

-pero que lindas palabras me das querida-

- ya quisieras que te diga algo lindo josh- dije con asco su nombre.

Máx lloraba desconsoladamente y yo me ponía mal e histérica de no poder hacer nada para ayudar a mi bebé.

Josh se acercó a máx y le agarró la cara con fuerza.

-o te callas o te callo- le dijo a máx.

-ni se te ocurra- dije con rabia.

-quieres ver?-dijo Josh y le dio una cachetada no muy fuerte a máx.

-que te pasa!, deja a mi hijo!- grité

- querida te hago recuerdo que también es mi hijo-dijo desafiante

-lamentablemente-dije y se acercó a mi y me dio un golpe en la cara.

Luego otro en el estómago.

- volveré pronto- se acercó a máx, lo desencadenó y lo cargo- el también volver pronto-

-noo!!!- grité con todas mis fuerzas- devuelveme a mi bebé- dije entre sollozos.

Estaba sola en quien sabe donde y sin la razón por la que vivo.

No se cuanto tiempo paso, pero para mi parecían mil horas.

La puerta se abrió y entró Josh sin máx.

-donde esta mi bebé?- dije/grité.

Josh se acercó a mi, deslizó su asquerosa mano por mi mejilla.

Yo giré mi cara para que dejé de tocarme y lo siguiente que sentí fue su mano golpear mi mejilla.

La mejilla me ardía y dolía pero no lo demostre.

-querrás decir nuestro bebé querida-me miró a los ojos y pude ver que estaban dilatados y oscuros, había utilizado drogas lo más seguro- y por el no te preocupes, lo dejé donde los cuidaran muy bien-

-imbécil trae a mi hijo ahora- dije llena de rabia.

-¡a mi no me hablaras así!-gritó Josh y me dio otro golpe en mi otra mejilla sólo que este golpe fue más duro que el anterior.

-te habló como se me de la puñetera gana!-dije con asco y rabia.

-ahora aprenderás que no me debes hablar así-dijo acercándose a mi y tumbandome en la cama.

Se puso encima mío y comenzó a besar mi cuello y metió sus manos bajo mi blusa acariciando mi estómago.

Yo sólo gritaba y sollozaba.

No iba a permitir que me haga lo mismo.

No otra vez.

Agarre valor y le di un rodillazo en su amiguito.

Se quejó y se levantó de encima mío.

-porque me haces esto?-pregunté

-no te hagas a la inocente me denunciaste y me mandaron a la cárcel,por tu culpa perdí a mi mamá a mi padre y mi vida-

-yo nunca te denuncie!-

-quizás tu no pero tu madre lo hizo y tu la pagarás,te arrepentirás por lo que hiciste-me miró penetrantemente- la pagarás muy caro, y lo pagarás con lo que más amas, tu hijo.

Salió de la habitación y comencé a llorar a mares.

No permitiré que se meta con mi bebé.

La puerta se volvió a abrir y entró Josh nuevamente sólo que con máx en brazos.

La Razón Por La Que VivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora