ⓦⓞⓞⓗⓔⓔ

490 33 9
                                    



Sus acercamientos me estaban volviendo loco, ya no soportaba que Hwanhee hiciera todo esto, en serio y no lo soporto por el hecho de que me gusta y demasiado.

Jamás olvidaré aquel extraño día en el que me pidió que me bañe con él, claro que me negué aunque las ganas de hacerlo no me faltaban, verlo desnudo bajo el agua podría ser realmente... excitante pero no podía aún no, le traigo ganas de hace tiempo y sé que es virgen, por eso no me atrevo, no todavía.

— Hyung... Bésame... — Cuando me percaté su rostro ya estaba demasiado cerca del mio. Me encontraba concentrado en el móvil viendo unas cosas en el Fancafe, el también lo hacía hace solo unos segundos, cómo puede ser tan rápido y hacer que yo no me de cuenta de que ya estaba al lado mio, creo que no estoy pensando claramente... ¿Acaba de pedirme que lo bese?

— ¿Qué dijiste...? — Se acercó aún más hasta que su labios rozaban ya los mios.

— Bésame. — Susurró. A la mierda todo, solté el móvil y con mi ahora mano libre enredé mis dedos en sus cabellos terminé con la diminuta distancia que nos separaba uniendo nuestros labios en un beso, no uno lento y tierno, uno salvaje, el no demoró en corresponderme de igual manera, su brazos se entrelazaron alrededor de mi cuello mientras que yo, con mi otra mano tomaba con firmeza de su cintura, lo levanté e hice que de inmediato se siente sobre mis piernas no me detuve en el beso en ningún momento solo lo subía de intensidad. Bajé mis manos y sin importarme ni en lo más mínimo apretujé sus glúteos haciendo que se pegara más a mi de modo que su torso ya estaba completamente junto con el mio.

El sofá se comenzó a volver incómodo y opté por levantarlo provocando que él me rodee la cintura con sus delgadas piernas. Caminé torpemente por los pasillos del departamento hasta llegar a donde yo suponía, era mi habitación, menos mal no le fallé, nos separamos del beso y fue Hwanhee quien abrió la puerta, entramos e igual de desesperados retomamos el beso anterior, al cerrar la puerta hice que Hwanhee apoyara su espalda en ésta aprovechando aquello para soltarle y deshacerme de mi camiseta, su mirada recorrió rápidamente mi torso mientras que la mía observó su perfecto rostro, su forma tan intensa de mirarme me provocaba aún más, besé de nuevo sus labios del mismo modo, ahora su manos recorrían mi espalda y jugaban con mis cabellos, otra vez lo tomé firmemente volviendo a caminar ahora hacia la cama.

Lo arrojé sin cuidado escuchando un pequeño gemido por su parte, me arrodillé separando sus piernas con ambas manos acomodándome entre éstas, intenté relajarme un poco y despacio fuí involucrando mis manos por debajo de su camiseta, la levanté de manera lenta sin despegar la vista de sus ojos, hasta finalmente deshacerme de la prenda, la tiré al piso. Comencé a recorrer su suave y delicada piel con las yemas de mis dedos sintiendo como se estremecía.

— H-hyung... — Suspiró y sus ojos se cerraron suavemente, subí mis manos hasta llegar a sus pezones los cuales comencé a estimular con mis pulgares, cosa que me dio una respuesta inmediata por su parte, no se veía tenso, más bien ansioso, otra vez fuí bajando, ahora por los costados de su cintura, elevó un poco las caderas cuando mi tacto tocó su vientre, seguí bajando hasta coincidir con su miembro, no pude evitar que una media sonrisa se asomase por la comisura de mis labios, su erección ya se había hecho presente, dí un leve apretón en la zona de su miembro. — Woo... Shin... — Sus ojos se abrieron mirándome directamente.

— ¿Qué pasa, bebé? — Mantuve mi sonrisa anterior dando otra caricia a su miembro aún por sobre la tela de sus pantalones. Levantó las caderas buscando más contacto con mi mano, cosa que no se la negué, acariciando más seguido su erección, los suspiros y pequeños gemidos comenzaron a salir de sus carnosos labios, podía sentir mi propio miembro despertar por debajo de mis pantalones.

 ❴ยק10ti๏ภ ⇒ ๏ภє รђ๏t'ร.❵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora