Capítulo 7:

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Ha pasado una semana exactamente desde que llegamos a Los Ángeles, una semana desde la primera y última vez que vi a Jaehyun, Johnny y Mark. Estoy algo confundido, desde ese día Taeyong está raro y ansioso... cada vez que le digo que hablemos de lo que pasó aquel día cambia el tema, me está evadiendo...

FLASHBACK

Miraba afuera de la ventana del auto que el padre de Taeyong había mandado para nosotros. Cuando de pronto pude ver una cafetería, para mi sorpresa vi la silueta de Johnny y no pude evitar enfocar mi vista hacia esa dirección. VI un letrero en la entrada del establecimiento en el cual solicitaban un empleado; sonreí, había encontrado un lugar donde trabajar y volvería a ver a los chicos con los que jugué basquetbol. De pronto vi como Johnny se acercaba a otra persona y la abrazaba... era Jaehyun... no pude evitar fruncir el ceño mientras aquella escena pasaba de largo por el movimiento del auto.

Jaehyun... el sólo pensar su nombre me hacía sentir enojado, confundido y triste... algo pasaba entre él y Taeyong... traté de olvidarlo porque tenía miedo... miedo de preguntar y escuchar algo que no estaba dispuesto a aceptar.

Algunos minutos después el auto se detuvo y bajamos de él,  llegamos a una casa que no se veía tan grande, a mi parecer una familia de cuatro personas podía vivir a gusto en ese lugar. El chofer comenzó a bajar las maletas del auto, abrió la puerta y la casa era hermosa por dentro, una casa de  dos pisos; en la planta baja hay una cocina-comedor enorme, una sala muy acogedora, un baño y dos estudios, con un escritorio, una computadora y su propia minibiblioteca cada uno. En la planta alta hay una mini sala de estar y tres cuartos con un baño cada uno. Y afuera de la casa hay un gran jardín.

La casa era simplemente maravillosa, pero en ese momento lo único que pasó por mi mente fue una sola pregunta... ¿Por qué habían tres cuartos? Mis pensamientos fueron interrumpidos por el chofer:

-Bueno... la casa tiene 3 cuartos, uno de los cuartos es para ustedes, pueden escoger... menos el del fondo del pasillo ese es para el presidente Seo- terminó de hablar.

- ¿qué, viviremos con alguien más? - dije sorprendido.

- Órdenes del presidente Lee, tienen una semana para acomodarse en el lugar. El señor Seo pidió una semana libre antes de esta tortura - comenzó a reír el hombre.

- ¿tortura? - dijo Taeyong alzando una ceja.

- Sé que para ustedes no es emocionante vivir con alguien más, pero tampoco lo es para él. Además prepárense psicológicamente porque conociendo al señor Seo, y en vista de que hay un cuarto vació puede que traiga a alguien más con él - dijo James con un tono de burla.

- pero... ¿por qué? - dijo Taeyong con fastidio.

- Él se los explicará cuando llegué, mientras disfruten de la casa, adiós- dijo James saliendo por la puerta principal.

Me senté en la sala y suspire, las siguientes semanas serán agotadoras. Taeyong me siguió y por fin desde que habíamos subido al auto comenzó a hablarme:

- Perdón Ten... te estoy haciendo pasar por muchas dificultades - dijo Tae mientras tomaba mi mano.

- No te preocupes, tal vez sea divertido - le sonreí.

- Ten, gracias - sonrió dándome un pequeño beso en la mejilla - gracias por hacerme sonreír incluso en los malos momentos - Taeyong sonrió.

Tenía miles de preguntas para él, pero no quería saber nada, tenía miedo de sufrir por mi curiosidad.

- Yo me iré a dormir, fue un día largo - me levante del sofá, pero para mi sorpresa Taeyong se levantó y me abrazó por la espalda comenzando a llorar. Quedé en shock, él jamás había hecho algo así.

Amar es... estar locoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora