UN AMOR IMPOSIBLE

CAPITULO 10

DULCE:

El trato de Anahí había cambiado por completo. No se como, ni cuándo, o por que sucedió de tal manera. Ahora no me miraba de manera intimidante, o como si quisiera ver mas allá de lo que ve, me mira como una chica enamorada, podía notar en sus hermosos ojos un brillo tan especial que no había notado antes y el que me mire fijamente ahora en vez de intimidarme, me transmite tranquilidad y paz.

Esta semana nos habíamos visto mucho más tiempo de lo normal. Nos juntamos en mi casa y en su casa para hacer mi trabajo de literatura ya lo habíamos acabado, si no hubiera sido porque ella me ayudo, no la hubiera podido ver más que en el instituto. Debo decir que me ayudó en ciertas cosas no es que me hizo el trabajo.

Su celular no dejaba de sonar en ningún momento, y era realmente molesto. Y siempre se trataba de una chica diferente. Mi molestia era tanta que le escondía el celular y ella lo que hacía era reírse y decir que no tengo porque estar celosa porque ella me ama a mi. Pero seré realista, me da rabia saber que para las personas ella es un delirio de mujer, no me gusta que la vean con deseo, no lo soporto pero supongo que tendré que aprender a llevarlo sin ponerme celosa, o como una cabra loca.

Tenía muchos días de no estar con mis amigos, sólo nos juntábamos en los recesos del colegio. El tiempo que les dedicaba a ellos ahora es de Anahí, cosa que les molesta realmente y más con el trabajo que tenía que por fin termine. Así que les prometí estar con ellos hoy, habíamos acordado en salir solo los tres.

-Entonces... ¿cómo va todo con la profe?- me pregunta Hannah mientras caminábamos por el centro comercial junto a Max.

-Todo marcha bien- sonrío- Realmente todo marcha bien, y me siento feliz por ello. Al menos entre nosotras dos, las cosas están bien. En cuánto a mi padre, todo está mal por no decir otra cosa.

-¿Bien o bien?- pregunta Max, y al utilizar la segunda vez "bien" pone un tono de voz diferente, y elevó ambas cejas como si estuviera diciendo algo atrevido.

-¿Bien?- respondo dudando de los gestos de su rostro. Hannah y Max se ríen y me siento sapo de otro pozo- ¿Qué es tan gracioso?.

-¿La profe despertó tu mariposa?- pregunta Hannah y Max vuelve a reírse, yo les frunzo el ceño claramente no entendiendo a que se refiere.

-¿Mi maripo...- y de repente, los entiendo. Siento mi rostro caliente, y se que me encuentro más roja que mi cabello- Yo... no, no se... eh... ¿vamos por un helado?.

Nuevamente ambos se ríen a carcajadas, y yo solo quiero desaparecer.

-¡La despertó!- grita Max como si hubiera anotado un punto. Muchas personas se giraron a ver, y más me hundo yo en mi vergüenza.

-¡Basta!- les digo molesta.

-No tiene nada de malo- agrega Hannah- Es normal, es tú novia- se encoge de hombros- Es normal, amiga.

-Además, es bueno saber que la profe te va a esperar y no apurar- dice Max.

-Sí, pero... ¿qué sigue ahora?.

Ambos me sonríen. Ellos ya habían pasado por esta situación, y ya lo habían superado. Max con una chica que conoció hace un tiempo, y Hannah con su ex novio.

HANNAH: No sigue nada, sólo te vas a sentir diferente cuándo estés con ella, eso es todo. Y tal vez ella lo note- mis ojos se agrandan y empiezo a sentirme nerviosa.

DULCE: ¿Eso es bueno o malo?.

HANNAH: No lo se, depende como la profe lo tome. Pero no es malo. Te va notar diferente, y va a ir despacio, te va tratar diferente. Y tú... sabrás cuándo es el momento-me mira a los ojos- Solo no te sientas presionada, Dulce. Esto tiene que ser importante ¿sí? y no hagas nada hasta que estés realmente segura, porque quieras o no, la primera vez nos marca un antes y un después. Así como el primer beso, el primer día de clases. Tómalo con calma- asiento ante las palabras de Hannah.