Capítulo 29

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Narra Camila


Esa misma tarde compramos los vestidos en una pequeña tienda del hotel. La fiesta era en la noche y todos los de la empresa estábamos muy entusiasmados. No parábamos de reír y disfrutar de nuestra estadía. Los grupos seguían algo divididos, los Jefes y los de alto cargos se sentaban lejos de los demás, así como también los escritores quienes tenían lugares a lado de sus editores, por suerte tenían la libertad de unirse con los demás y Lauren no se apartaba de mí.

La había perdonado por lo sucedido con las maletas, en parte, también porque era mi culpa por no haberme dado cuenta antes, solo estaba atenta al abrigo para que no olvidara el anillo del que no debía enterarme. Además, Lauren no merecía que la tratara así. Sé que ha hecho un gran esfuerzo por olvidarse de las fiestas y convertirse en una mujer adulta y ha hecho un gran avance. Estábamos aquí para pasarla bien y disfrutar nuestro momento, no cometeré el error de volver a pelear por nada. Por eso, estoy dispuesta a hacer que esta noche sea inolvidable para las dos.

Vestí un vestido azul marino pegado a la silueta hasta mis muslos y Lauren se puso un vestido negro con la espalda descubierta y hombreras que la hacía ver elegante, sofisticada y muy, pero muy sexy.

–Nada de shots–Dijo mientras caminábamos al lugar donde se llevaría a cabo la fiesta.

–Prometido –afirmé. Nunca lo volvería a hacer. Descubrí que eso de beber shots hasta desmayarse no era lo mío.

Me abracé a su brazo, se veía hermosa y quería que me miraran a su lado. Camino a la fiesta, miramos el cielo iluminado con la luna llena y las estrellas. El sonido de la música se hacía cada vez más fuerte y, al llegar, observamos a las personas bailando y tomando bajo las luces purpuras que se movían en todas direcciones y daba la sensación de estar en una discoteca abierta con la playa a pocos metros de distancia. Un hombre llevaba una bandeja con las bebidas. Tomé una de vino blanco y noté la mirada reprochadora de mi novia. Al parecer quedó con el miedo de que me vuelva a emborrachar y cometer una locura. Aunque puedo confesar que en ninguna fiesta a la que me han invitado me pasé de tragos como lo hacía cuando estaba con Lauren, cosa que es muy extraña dado mi historial de buena conducta.

–No tomaré más de la cuenta –le di un beso –lo prometo. Además, el problema no es conmigo.

–Qué bueno–afirmó y me dedicó una de esas hermosas sonrisas –Porque yo sí tomaré mucho...

Me preocupé al escucharla y luego de ver mi cara se echó a reír.

–Es broma. Este será mi único whisky de la noche. No quiero arruinarla, será una noche muy especial.

¿Especial? ¿Acaso ella va a lo que creo que es? ¡El anillo! Sonreí y me colgué de su cuello para darle un beso en los labios. Tenía que actuar como si no supiera nada, pero no podía ocultar mi emoción. ¿Dónde lo tendrá?

–Wow. –Exclamó con sorpresa luego de separarnos. –Eso fue intensó.

–Es porque te amo con todo mi corazón y ese vestido que llevas me provoca como no tienes idea. Eres hermosa.

–Amor, desde que te vi con ese vestido estoy toda mojada.

Solté una risita y me acerqué a su oído.

Entonces esto te pondrá más caliente porque no traigo ropa interior.

Tomé su mano e hice que deslizara sus dedos por mi vientre hasta abajo para demostrarle que hablaba en serio. Ella me miró con intensidad y luego se mordió el labio inferior.

Pasión y letras (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora