Un Amor No Planeado

29. Lo he perdido.

Días después, me di cuenta de que Sebas y yo apenas y hablábamos.

El se alejaba de mi todo el tiempo. Yo sabía que las cosas iban a arreglarse tarde o temprano. El estaba molesto o algo de seguro, pero yo no sabía exactamente por qué. Al principio, ni quería hablar con el de eso, creí que las cosas se resolverían solas. Hasta ese día.

Amigos de Alexa fueron a mi casa con sus hermanos que son de mi edad varios: Eliott, Scott, Dany, Drake y Chase. También fue mi prima Gina.

En la fiesta, estuvimos todos juntos. Nos divertimos mucho. Jugamos a las escondidas por todo el fraccionamiento, igual que la primera vez que fue Chase a mi casa.

Después de la piñata, Chase se fue sigilosamente.

—Oye Charlie, Chase tiene algo —me dijo Dany —¿por qué no vas con él? Seguro y tu lo alegras.

—Bien —dije, y fui en busca de Chase.

Le di la vuelta a la manzana esperando ver a Chase por ahí sólo o algo. Pero no lo vi.

Fui a las canchas donde hay juegos y me encontré a Chase sólo en un columpio que chirriaba, y eso que apenas se movía.

—¿Chase? ¿estás bien? —pregunté con voz baja.

—Si... sólo tenía ganas de venir aquí a tomar aire —dijo. Había evadido la pregunta igual que en la fiesta de Eliott. No podía dejarlo así.

—¿Seguro que no tienes nada? —le pregunté.

—Si seguro. Y tú ¿sigues mal por Sebas?

—Sebas no importa ahora, ¿que pasa? Te pasa algo.

—No, de verdad. Estoy bien. Creeme.

Lo miré fijamente a los ojos para ver si mentía.

—Bien... —dije, pero aún no estaba del todo convencida.

Jugamos a las escondidas pro todo el fraccionamiento, igual que la primera vez que Chase fue a mi casa. Recordé cuando me caía mal por haber arruinado mi vestido, ¡que cosa! ¿como es que llegamos hasta aquí tan rápido?

Después de jugar, nos fuimos a lo cuarto Mía, Maite (hermana de Sebas), Gina y yo.

Nos pusimos a ver mi caja de recuerdos. No tengo nada tan personal, lo más “profundo” que tenía eran cartas de despedida de mi escuela pasada y una carta de Scott de San Valentín.

Un rato más tarde, se fueron als niñas y entraron Chase, Scott, Eliott y Dany. Gina se quedó. Ahí nos quedamos un rato jugando y Eliott siempre le recordaba a todos que estaba aburrido.

Entonces, llegó la persona mas inesperada... Sebas.

—¡oigan todos! —chilló Alexa con todo y sus ocho años de vida —¡llegó Sebas!

Chase y Scott saltaron y fueron a saludarlo. No tuvieron que ir muy lejos, Sebas estaba afuera de mi cuarto.

Entró y se puso a jugar con los chicos (incluso con Dany). Gina y yo nos quedamos sentadas en mi cama y Eliott en el suelo. Una semana antes hubiera estado jugando también con ellos o riendome, pero ahora me sentía pequeña. E indefensa. Sin mi mejor amigo.

Entonces, llamaron a Sebas de que tenía que irse, así que eu Sebas se despidió de todos, menos de mi y de Gina.

Me quedé ahí y no pude soportarlo. Miré a Gina y la abracé para cubrir mi rostro que se llenaba de pesadas lágrimas de dolor y olvido.

Dany vio lo que pasaba.

—Haganse a un lado —dijo y corrió hacia mi. Me abrazó y dejó que yo apoyará la vara en su hombro para que no me vieran, pero todos ya se habían dado cuenta de que estaba llorando.

—Charlie, ¿esto es por Sebas? —me preguntó y asentí.

Entonces las niñas corrieron a asomarse pero Chase las echó de ahí.

Las niñas fueron abajo de chismosos diciendo que yo estaba llorando, así que segundos después, Sebas estaba arriba de nuevo.

—¿Por que llora ahora? —dijo Sebas pero con mala gana.

Fue y se despidió de mí, creyendo que lloraba porque no lo había hecho. En parte era cierto.

Cuando se fue, yo seguía llorando.

—Chase, ¿por que no vas por pastel? —le dijo Dany que quería que se fuera Chase.

—No gracias. Yo me quedo aquí.

—Chase...

—Esta bien Dany... dejalo —le dije.

Chase se acercó a mí y me rodeó con su brazo.

—Estamos contigo Charlie. Ya se le pasará a Sebas. Es un tonto por dejar ir a una amiga tan buena como tú... —Me dijo con ternura.

Acerqué mi cabeza a el y el a la mía.

—Gracias Chase.

Scott tuvo la idea de ir afuera para “olvidar” el problema. Tal vez funcionara, así que fui.

Dany, Chase y yo fuimos a los columpios. Nos quedamos ahí un rato. Honestamente no recuerdo que sucedió después. Puede que me haya bloqueado. Eso solo me pasa en momentos difíciles, como cuando muere alguien o tuvimos un accidente: momentos dolorosos. Este era uno. Sebas era tan importante para mí... tal vez y algún día llegaramos a ser amigos de nuevo.