Los sábados le fascinaban al moreno, era extraordinario levantarse por las mañana y percibir esa deliciosa explosión en su nariz.
―Mmmmh.― Inhalo profundamente, por el puro olor podía deducir que Kyungsoo estaba haciendo tocino, wuaffles y huevos revueltos.
Después de todo tenía sus ventajas, que el chico del que se había enamorado fuera chef.
Aun desnudo, si señor, porque a Kim Jong In le gustaba dormir desnudo, Salio de la habitación y camino parsimoniosamente por el corredor, aun sin ser percibido por el más bajo, Jongin acomodo su mentón sobre el hombro de este, sus manos sobre las caderas y lo pillo por detrás. ―hola mi amor.
en menos de un segundo Kyungsoo aspiro todo el aire que pudo y al mismo tiempo su pequeño cuerpo se estremeció. ―KIM JONGIN! No vuelvas a hacerme eso.
Ahora Kyungsoo golpea a a Jongin con su espátula.
―Te habían dicho que eres muy asustable? ―Jongin se acercaba envolviendo sus brazos al rededor, acorralándolo y con la intención de besar el lindo puchero sobre esos apetitosos labios, el moreno sonrió presumido antes de volver a tomar la palabra. ―Dime quién se asusto más, tu o mi bebe?.― Ahora acariciaba la pequeña panza redondeada de Kyungsoo.
―Kim Jongin estas desnudo?― El calor hervía apoderándose de las mejillas del pequeño.
Al más alto le encantaba el echo de que el pequeño seguía avergonzándose, a pesar de haberlo visto así repetidas veces. ―Eso mismo no te importo anoche.―Dijo Jongin mientras apretaba el redondo trasero del chico embarazado.
Kyungsoo volvió a estremecerse ―Kim Jongin, quieres provocarme antes del almuerzo?
Ahora Kyungsoo se unía al juego, mordiendo sus labios y provocándolo, sus alientos se tocaban, creando una especie de rose demasiado sutil y adictivo, justo como Kyungsoo lo deseaba, Jongin creyó que este último iba a besarlo, pero en vez de eso, se separó repentinamente dejándolo con las ganas.
Jongin sonrió petulante, a su chico le encantaban los juegos y a Jongin, bueno a Jongin le encantaba todo lo que viniera de el.
―Ve a ponerte ropa o vas a cojer un resfriado, mencionó Kyungsoo mientras inevitablemente esbozaba una pícara sonrisa y seguía cocinando.
Jongin solo guardó silencio y se posó detrás de el, con las manos detrás de la espalda, esperando cautelosamente.
Cuando Kyungsoo se giró, el moreno le robo un beso, dejándolo estoico.
Jongin se relamió los labios.
―mmmmm, jarabe de mapple?......me encanta!!!
Anunció dirigiéndose a la habitación...Minutos mas tarde Kyungsoo estaba feliz, este era el sábado del mes que su chico descansaba y solo quería complacerlo, se aseguró que todo estuviera en perfecto orden, escucho que la cafetera hacia ese característico sonido que anunciaba que el capuchino estaba listo.
―las tazas!― eso era lo que se le estaba olvidando, así que se apresuró a buscarlas.Maldiciendo en su mente por haberlas guardado en la gambeta más alta, subio a una silla, haciendo espacio y quitando los demás recipientes, Kyungsoo estaba a punto de alcanzarlas cuando resbaló.
Cerró los ojos esperando la llegada al suelo, pero esta nunca llegó.
Su respiración se había acelerado, tanto que podía escucharse y gracias a la adrenalina recién segregada, lo único que percibía era esa cálida respiración a su lado y de igual manera agitada.
No quería abrir los ojos, no hasta que se aseguraba de que todo estuviera bien.
―mi amor, estás bien?― La suave voz del moreno llego a sus oídos, dandole la señal que necesitaba, así que Kyungsoo decidió abrir los ojos.
Jongin lo sostenía en brazos firmemente, Kyungsoo lo abrazo aferrándose a su cuello. ―Lo siento, lo siento mucho.― Susurro el más bajo.
―Tranquilo mi amor, yo estoy aquí si?, estamos bien.― Ahora Jongin acariciaba desde su nuca a su espalda reconfortantemente.
―bebe..... mi bebe.
El moreno se tensó. ―Que tiene bebe?
Kyungsoo hablaba en pausas a causa del susto. ―Hablale, porfavor. el.... esta pateando muy fuerte.
Jongin lo depositó en la silla y se inclinó para llegar a su abdomen.―Calma bebe... ya pasó.―
Decia mientras acariciaba el vientre del más bajo, percibiendo las incesantes patadas.
―bebe, se que debes estar asustado, pero ya estás a salvo, papi y yo te amamos, no debes tener miedo porque, no vamos a permitir que te pase nada.―
Permaneció ahí durante algunos minutos más, hasta asegurarse de no sentir más patadas, se inclinó aún más y beso el vientre de su pequeño.
Se puso de pie, se acercó a Kyungsoo y acto seguido pego sus frentes con excesiva firmeza.―Kyungsoo... ―su tacto se aligeró ―No vuelvas a hacerme esto! Prométeme que ahora tendrás más cuidado, por favor, solo prométemelo.―Sin ser consciente de ello el moreno soltó el aire que había estado reprimiendo, Kyungsoo intentó hablar pero Jongin se adelantó.―No sabría qué hacer si algún día los pierdo.
―Lo prometo. ―Susurro Kyungsoo un tanto culpable antes de dejarse llevar en un beso, lleno de alivió y consuelo.
Al término de este Jongin le acariciaba la mejilla con el pulgar.― Bien, vamos a desayunar.
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A la inversa. A.U- [KAISOO] M-preg.
FanfictionQuien nos asegura que la vida tiene un orden especifico? Sin ser consciente de ello, Kyungsoo ansiaba salir de la rutina, dejo de pensar en las consecuencias por una sola noche, en la que accidentalmente termina por romper sus propias limitaciones y...