Nueva vida

-Alianza-

-¿Qué quieres Malfoy?- pregunta Hermione molesta.

-¿No oíste? Solo quiero ayudar- responde con el mismo tono.

Ginny le toma la mano a Hermione para tranquilizarla un poco y se dirige a Draco -¿Sabes algo de Snape?-

-Sí-

-Bien, pues dinos- toda la situación comenzaba a hartarla un poco y si en unos segundos Malfoy no comenzaba a decirles algo, muy pronto se repetiría lo que pasó en tercer año.

-Está con mis padres, se lo llevaron a la mansión-

-Creí que el ministerio les quitó su mansión- contesta Ginny confundida.

-Por favor Weasley, ¿no creerás que solo teníamos una mansión o sí?-

-¿En dónde está?-

-Miren ya lo están revisando medimagos profesionales y muy reconocidos, no tienen ya porqué preocuparse-

-Sino hacemos algo pronto él podría morir-

-Lo sé y están haciendo lo que pueden para averiguar lo que ese presidiario le dio-

Harry hizo una mueca de molestia por el sobrenombre que le puso a su padrino, pero no es como si fuera la víctima en este momento como para defenderlo.

-Eso no servirá-

Y así Hermione se va. Dejando a todos confundidos por la frase, sobretodo al Slytherin.

Iba a sacarle la información a Sirius por las buenas o las malas; quiso darle un poco de tiempo para que analizara que era cierto que todos sus amigos apoyaban a Snape, pero tal vez ya fue suficiente amabilidad de todos y justo ahora no había tiempo para perder.

Al llegar al salón de Defensa abrió fuertemente la puerta y Remus no se sorprendió de verla ahí, tan enojada.

-No está aquí- asumiendo que vendría a buscar al animago -y no me dijo a dónde iba- contesta antes de que le preguntara.

-¡El mapa!-

-Eso solo funciona en Hogwarts ¿Por qué crees que sigue aquí?-

-Le pedí a la directora Mcgonagall que lo hechizara para que no pudiera salir del colegio-

Remus mira muy sorprendido a Hermione.

-¿Eso se puede?-

-Es la directora del colegio Remus- con eso se va a buscar a una cierta pelirroja.

Hermione al pasar por un pasillo escucha un poco de las conversaciones de algunos estudiantes, pero fue una en especial que le molestó aún más.

-¿Ustedes qué creen?-

-Pues la verdad yo no creo nada, él seguirá siendo un asesino, así lo diga el mismísimo ministro de magia- responde de manera despectiva una chica.

Se paró con ese comentario, ya no tenía la paciencia para decirles, de nuevo, que no es cierto, por lo que simplemente movió si varita y siguió su camino a la sala común, donde seguramente se encontraba la pequeña niña.

Antes de llegar al final del pasillo escuchó gritos y burlas detrás de ella, volteó levemente la cara y vio a la chica que había comentado eso de Severus, que ahora estaba calva, al igual que lo estuvo Lavander hace no mucho tiempo. Quiso hacerle otra cosa, pero eso era como un recordatorio divertido no solo para ella, sino también para que los demás entiendan que ya no deben comentar ese tipo de cosas o se las verán de verdad con ella, y eso era lo mínimo que les podía ocurrir.