Leo y Guang se sentían felices, ya no tenían que ocultar su "amor" ante sus amigos y eso les daba mucha seguridad.
Después de la práctica cada quien se dirigía a sus respectivas casas, pero Leo y Guang-Hong iban juntos, últimamente se habían acostumbrado a ello. Los dos chicos caminaban, uno al lado del otro observando desde la acera el tráfico de la ciudad a esa hora del día.-Leo...
-Qué sucede?
-Recuerdas los anillos que tienen Yuuri y Viktor?
-Eh?- Intentó hacer memoria imaginándolos.- oh ya recuerdo... Si, son unos anillos muy lindos y especiales para ellos. No es así?
-Pues yo quería darte esto...-buscó en sus bolsillos, pero no encontró lo que buscaba. -Dónde los habré dejado?
-Ah, lo había olvidado. Dejaste esto en la banca.- Leo sacó de su chaqueta una pequeña bolsa de organza color verde.- Ten, olvidé dártela antes de salir.
-Gracias, ahora sí.-Abrió la bolsita y sacó un collar que tenía una figura en forma de sol y se la entregó a Leo. - Este es un collar...eh.. Yo lo hice para ti, incluso en la parte de atrás dice tu nombre... Mira! Yo también tengo uno, solo que es una luna, hacen juego. No crees que son lindos?
-Eh? Esto es muy lindo de tu parte.- lo miró con ternura para después acercase a él y depositar un suave beso en su cuello.- Guang-Hong y yo tenemos collares de la amistad... Eso es tan cursi.
-Oye, los hice con mucho amor!
-Jajajaja, me encantó. Muchas gracias.- abrazo al chino y continuaron caminando. Llegaron entonces a donde se hospedaba Guang-Hong.
-Bueno, nos vemos mañana...
-Leo... Quisieras quedarte? Bueno... No.. Emmm...¡Quédate conmigo esta noche! Compré comida y renté una película para verla contigo...
-Eh? Quedarme hoy? Ummm... No lo sé, todavía tengo que llegar a casa a hacer el quehacer, mi horno esta hecho un cochinero y debo trapear el piso del baño y...-intentó continuar con su lista de deberes pero Guang-Hong lo miraba como un cachorrito con hambre y no pudo decirle que no.- Ahh, está bien. Sabes, últimamente hemos estado durmiendo juntos... No te gustaría que hablara con tu entrenador para que te permita quedarte en mi casas el tiempo que estés aquí?
-¿Puedo quedarme en tu casa la próxima vez?
-Las veces que quieras.
-Siiii!- el pequeño saltó a los brazos de Leo- a partir de mañana podré estar más cerca de ti.
-Si amor. Podrás estar más tiempo conmigo.
-¿Cómo me llamaste?
-Ah, nada...
-Bueno, pasemos la última noche en este lugar y comamos un poco. Compré pizza y leche de chocolate.
Entraron al pequeño departamento, era un edificio que pertenecía a un amigo del padre de Guang-Hong y él le había prestado un departamento durante algunos meses en lo que se preparaba para las competencias.
-¿Te gustan las comedias románticas?
-Si, me gustan bastante.
-Pues no se diga mas! Veamos esta hermosa película.
Se sentaron frente al televisor, apenas habían transcurridos los primeros quince minutos de la cinta, Leo comenzó a sentirse cansado y pronto se quedó dormido.
Guang-Hong fue por una manta y lo cubrió para después continuar viendo la película. Cuando terminó, levantó lo que había sobrado de comida (pues Leo no había comido nada) y apagó la tele.Se acercó a Leo y susurró.- Leo, ven a dormir en la cama, si te quedas aquí mañana te dolerá todo el cuerpo./ Leo se despertó y se estiró un poco.
-Muy buena película, muy buena. Me gustó la parte del beso.
-Eh, pero ni siquiera la viste.- sonrío el pequeño chino mientras se acercaba a Leo.
-No me refería a ese beso.
Se inclinó hacia Guang-Hong y clavó sus ojos en los del menor. A pesar de la oscuridad pudo notar en él un sonrojo, lo cual solo lo incitó a continuar con lo que tenía planeado. Tomó el rostro del chino entre sus manos y se acercó lentamente a él, juntando sus labios con los de su pareja en un suave roce con sabor a leche de chocolate. Se separó un poco para observar la reacción de Guang-Hong. Él continuaba con los ojos cerrados. Leo sabía que ese era su primer beso.
-Más ...- dijo casi suplicando.
No necesito repetirlo, pues Leo ya se había abalanzado sobre él. Recostado en el sillón sobre su amado acaricio su rostro y de nuevo posó sus labios sobre los de Guang-Hong en un beso que se sentía como una suave caricia. Por inercia Guang abrazó su cuello, lo que Leo tomo como una señal para continuar besándolo, mordió con suavidad y en un movimiento logró introducir su lengua en la boca de su amado. El placer de sentir un beso lleno de deseo los consumió. Cuando les costó respirar se separaron.
-No tengo mucha experiencia besando... Pero eso fue hermoso.-dijo Guang-Hong mientras miraba con amor a Leo.
-No sé que fue eso... Pero... Se sintió muy bien.
-Te gustaría continuar en la habitación?
-Suena muy bien.
Los chicos caminaron hacia la habitación y continuaron besándose se habían vuelto adictos a probar su saliva, se habían vuelto adictos a expresar sus emociones, se habían vuelto adictos a estar juntos.
Bueno, como querían continuación me inspiraron a escribir este hermoso capítulo :"3 así que... HOY FUE DÍA DE DOBLE CAPÍTULO DE NUEVO,!:v Jajajaj esoero les haya gustado, se viene mucho más y solo puedo asegurar que pronto esta historia se pondrá SÚPER INTENSA, beibas xD
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Café Latte & Chocolate (LeoJi)
RomanceTodo termina como comenzó, esta extraña historia tuvo su inicio en una pequeña cafetería de la ciudad. Leo se encontraba como todas las tardes, en su mesa favorita. Esperando a aquella persona con la que se encontraría para conversar. El mesero se a...