SCARLETT
No podía creer lo que mis ojos acababan de leer, estaba totalmente atónita. Yo sabía que Victoria Vale era de lo peor, pero no sabía que era capaz de hacer cosas tan viles como enviar a los del equipo de fútbol a golpear a Jake para "darle una lección" al pobre pelirrojo. Volví a leer los mensajes de texto que Christopher Lerman me había enviado y solo le respondí agradeciéndole por haberme contado todo aquello con lujos y detalles.
Se que Sofía y yo no nos hablamos, pero tengo que contarle esto. A pesar de todo era mi amiga y como buena confidente debo tomar cartas sobre el asunto. Además todo conllevaría a enfrentar de una vez por todas a la perra de Vale y eso es algo que yo no me podía perder por nada del mundo.
Pasé mis dedos por la pantalla, dando con el número de mi amiga, intente llamarle, pero solo me enviaba al buzón de voz. Obviamente sería así, si era la media noche de un veinticinco de diciembre, de seguro Sofía estaba reunida don sus seres queridos o algo así.
Suspiré y le escribí un mensaje que decía: Necesitamos hablar ¡urgente! Cuando presioné enviar, el timbre sonó, activando todos mis sentidos ¿Quién puede ser a esta hora? Posiblemente serían mis padres arrepintiéndose de dejarme sola en un día como este.
Bajé por las escaleras rápidamente y luego atravesé el salón principal sintiendo el frío suelo bajo mis pies descalzos, encendí la luz y abrí la puerta lentamente. Casi se me cae la quijada al suelo cuando vi quien estaba ahí, nada más y nada menos que Logan Gibson, con sus jeans negros y su chaqueta negra también. Su cabello parecía estar mojado bajo su gorro de invierno. Él se tambaleaba hacia delante y hacia atrás con sus manos en los bolsillos.
—¿Qué haces aquí? —pregunté abriendo la puerta del todo y colocando mis brazos cruzados bajo mi pecho.
Logan me miró de pies a cabeza con una sonrisa bastante seductora, yo quise golpearlo, pero no era su culpa, sino mía por estar vestida solo con unos shorts grises bastante cortos y una camiseta roja con renos de nariz roja.
—En realidad no lo se. —Dijo Logan cuando su mirada volvió a recaer sobre mi rostro. Su respuesta me exasperó y quise cerrar la puerta en su tonta y linda cara, pero él la detuvo con su pie. ¿Desde cuando tenía tanta fuerza?— ¿Puedo pasar? Será solo un momento.
En principio reconsideré cerrarle la puerta en la cara, sin embargo, si algo se me había pegado de Sofía, era la necesidad de saberlo todo y como buena curiosa me hice a un lado para que él pudiera pasar, Cerré la puerta detrás de mí y lo miré.
—Que sea rápido lo que me tienes que decir porque estoy muy ocupada.
Logan miró a todos lados de la casa como buscando la razón de mi entretenimiento y volvió a hablar con tono burlón.
—Claro, tienes tanto que hacer aquí sola.
Rodeé los ojos con algo de cansancio.
—¿A qué viniste Gibson? —pregunté tajante.
Logan cambió su sonrisa, por una mirada seria. No es que yo le tuviera miedo a alguien, pero Logan era de las personas que más me asustaba y no porque fuera intimidante, sino porque en realidad me importaba lo que el pensara de mí y todo por mis irracionales sentimientos hacia el chico.
—Acabo de terminar con Azul y quería conversar contigo.
Aquello más allá de asustarme me molestó, ¿acaso Logan estaba insinuando que podía usarme como plato de segunda mesa? Si esa es su pretensión pues que se vaya olvidando de cómo era su rostro.
—¿Y que pretendes? —pregunté a la defensiva alzando mi mano.
Logan en una acción cobarde retrocedió asustado, negando una y otra vez. No se porque, pero aunque quisiera golpearlo, no podría. Ese chico frente a mí en realidad hacia que las estúpidas mariposas en mi estómago revolotearan con una rapidez impresionante.
ESTÁS LEYENDO
Mi Querido Nerd #1 (EDITANDO)
Teen FictionLos chicos en la preparatoria podían llegar a ser muy crueles y la prueba viviente de eso era Jake Wilson, un chico maltratado, humillado y discriminado por la mayoría de los estudiantes de la preparatoria Johns. Todos se burlan de su cara de pánico...