Notas Al Aire©

20

Después de nuestro inusual juego de notas en la fuente nos volvimos oficialmente enemigos. Estaba segura de lo acababa de hacer, si tú no me amabas mi única estrategia para olvidarte era haciendo que me odiaras.

Fue más fácil romper tu corazón que ganarlo.

Caminé silenciosamente por los pasillos de la universidad, el día no colaboraba con mi humor, parecía como si algo horrible hubiese pasado, como si le hubiesen quitado lo único bueno que tiene el mundo; su luminosidad.

No me di cuenta de cómo o por qué estaba en el edificio donde Frank estudiaba, lo encontré fumando con el ceño fruncido y moviendo con rapidez la pierna izquierda, no fue hasta que estuve a unos metros que me percaté de sus lágrimas.

-Frank...- ni bien terminó de escuchar su nombre ya estaba a mi lado.

Cuando me abrazó sentí su debilidad, estaba roto y esperaba que yo lo reconstruyera.

Tardó unos segundos antes de hablar, varias exhalaciones fueron necesarias para que escupiera el fin de mi vida.

-Dios... Mátame si quieres pero me alegro de que no fueras tú. - me moví un poco para poder verle la cara, ¿De qué estaba hablando? ¿Qué no fuese yo?

Su expresión cambió por completo al darse cuenta de mi confusión.

-No lo sabes...- mi corazón dio un vuelco.

Algo en el día me había dicho que todo se había ido a la mierda, me dieron señales, mismas que yo ignoré.

-¿Qué está pasado?- odiaba hacer preguntas temiendo la respuesta, mi boca se secó antes de escucharlo, instintivamente pensé en ti.

Oh, Dios. ¿Te había pasado algo? ¿Era mi culpa? No alcancé a oír la respuesta, mis pies me ayudaron en mi carrera hasta nuestra aula, todos estaban de pie con las manos en la boca, te busqué con la mirada y caí de rodillas cuando te vi. Llegaste hasta mí y me tomaste entre tus brazos, si nada te había pasado a ti...

Carly...

Busqué a mi amiga con desesperación, tomaste mi rostro y lo apretaste más a tu pecho, tus latidos sonaron en cámara lenta y mi mundo pareció detenerse. No necesitaba  escucharlo para saber qué había pasado. Ella ya no estaba. Jamás volvería.

Tenía razón. Le habían arrebatado la luminosidad al mundo, el único problema es que fue al mío.

Ese día Frank me llevó a casa, Carly no había muerto por gusto, sino  por un idiota que la había sacado del camino, dejando en una carretera sus sueños y también su vida.

Una vez en casa tomé lápiz y papel.
Sonreí al ver la pluma, ella me la había dado.

Escribí con lágrimas lo que necesitaba hacer.

"Ya me cansé de jugar".

Arrugué la nota entre mi mano y la tiré contra la pared, necesitaba golpear algo, romper algo justo como lo habían hecho con mi vida.

Especial 500 lecturas (ya son más), 100 votos (ya son más) y Navidad.
¡Hey! ¡Feliz Navidad y próspero año nuevo!
Me siento en un comercial de Coca-Cola xdxd.
Like si te gustó el vídeo... Ah no veah :'v
Les aviso que quedan... No sé cuántos capítulos pero... La novela está tipo:

Casi lo olvido, muchas gracias por leer mis novelas :3 mucho lof (así del bonito).
PD: io no quería matar a la Carly pero es necesario, sino su hermanita no tendría una historia bien loca.