Fuegos Artificiales

Feliz Navidad

En algún punto de su vida, las cosas perdieron el sentido; entonces se hallaba reproduciendo las alegres memorias como una vana ilusión a su realidad. Daba vueltas en la incómoda camilla, pensaba que se la pasaba más tiempo en lugares ajenos a su propio hogar ¿acaso su casa estaba en donde se encontrase Hoon? Aquella idea le mantuvo quieto por unos minutos, construyendo y deshaciendo escenarios que se basaban en recuerdos cálidos. Sin embargo no podía evitar distraerse por el molesto goteo de un pequeño lavabo en aquel espacio cuadrado en el que lo mantenían confinado "¿Por qué lo hice?" trataba de averiguar algo que lo escudara a una locura momentánea "Entonces es eso, que estoy dañado"

Escucha unos pasos, luego un golpeteo a las rejas por lo que se obligado a levantar la cabeza; su padre está al otro lado, con una mirada seria, indeciso a las palabras que se supone debe decir a su hijo en esta ocasión. Puede que las opciones se le hubiesen acabado debido a las veces en que terminaban aquí, en una cárcel, en un hospital y cuando la situación lo ameritara, con un guardia a la puerta de su recamara en alguna clínica. Jinwoo sabe que es una decepción, pero no le preocupa demasiado cambiarlo porque ellos le educaron de esa manera. Nunca tuvieron grandes expectativas cuando lo concibieron, así que el joven Jinwoo no tenía una verdadera obligación acerca de cumplir con una meta específica.

—Les comente acerca de tu problema. Vas a salir, aunque insisten en que tomes terapia — Jin no necesita de toda esa basura, siempre es liberado con la excusa de que se dejara tratar. Si las cosas fuesen enfocadas sólo a su persona, quizá lo hubiera logrado hace un tiempo atrás, pero implicaba a sus padres ¡Vaya ironía! — ¿No puedes sólo controlar tus impulsos? ¡No logro comprender porque lo haces!

— ¿Crees que sólo lo hago por gusto? — Se levanta de la camilla, encarando al hombre que le dio la vida —me encanta ir por ahí quemando todo lo que se encuentre a mi alrededor ¡Pero que increíble! ¡No es tan sencillo como tú lo crees! No tienes idea de cuánto me odio, de lo difícil que es vivir siendo alguien como yo. De lo difícil que es tener que soportar a un padre como el que yo tengo.

— ¡Yo me esfuerzo por darte lo mejor! Y tú sólo te encargas de hacerlo cenizas ¿Cómo osas referirte a mí de esa manera? — Golpea los barrotes con la palma de su mano —Estas hecho para destruirlo todo. Me cuestiono como puede crear a tal monstruo — lo señala con su dedo índice —Quemas las cosas que te desagradan, te mantienes como una víctima ¿Has intentado ponerte en mi lugar? — está furioso, las lágrimas recorriendo sus mejillas —Feliz Navidad, por cierto.