| Capitulo Extra |

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«Como te conocí»
| Parte I |

Cuando por fin pensé que habia logrado escapar de mi encierro, me capturan otra vez... De nuevo estoy siendo sellado dentro de un estupido humano.

Maldita sea mi bastarda suerte...

Hmp, de seguro es otro imbécil hambriento de poder— me acomode en la jaula mental en la que me encontraba, ya vería después como lidiar con la masa de carne en la que me metieron. Cerré los ojos y me dormí.

Después de unas horas unos molestos gimoteos me despertaron. Solté un gruñido.

¡Aagh! ¡Que alguien apague a ese bebé!— Se quejó. Espera un momento... Abrio sus ojos y frente a él ¡lo vio!, a unos metros, al otro lado de la reja habia un pequeño bulto que se removía inquieto. ¡Un bebé!—Debes estar bromeando...— lo observó por un momento, el bebé no dejaba de llorar y era incomodo. —Si lo ignoró ya aparecerá alguien para calmarlo...— y cerro sus ojos, aunque no pudo seguir con su siesta.

¿¡Por que no se calla!?— habían pasado varios minutos y la paciencia del Kyūbi estaba llegando a su fin asi que decidió investigar que era lo que sucedía fuera del cuerpo de su actual contenedor. —Ven aqui bolita de carne...— su chakra salio de la jaula y rodeo al pequeño bebé.

Fuera del espacio mental; Naruto abria sus ojos, ahora rojos por la posesión, y observaba antentamente su alrededor. Al parecer el pequeño se encontraba en brazos de un shinobi desconocido en medio de una habitación llena de gente, a Kyūbi le parecio que estaban teniendo una reunión bastante importante asi que decidió escuchar un poco...

—Yo me haré cargo de la criatura— escuchó decir a un hombre cubierto de vendas.

—¿Que planeas hacer, Danzō? Es solo un bebé, deberíamos buscarle una familia.

—Hiruzen...Hiruzen— vio como movia su cabeza —Ese bebé tiene encerrado dentro a una criatura que podría matarnos a todos, tenemos que mantenerla controlada.

Kyūbi se sorprendio al escuchar eso ¿estaban hablando de su contenedor?

—¡Pero solo es un bebé!— exclamó el otro anciano

La discusión se iba alargando cada vez mas y mas y al zorro no le agradaba para nada como estaba avanzando. Danzō Shimura, ese hombre le daba un mal presentimiento y cuando escucho que aquel sujeto era quien se haria cargo del mocoso en cual le sellaron supo que tendría que ser cuidadoso y permanecer alerta.

Deshizo la posesión, haciendo que Naru recuperara el azul de sus ojos, y volvio a su espacio mental.

Cuando volvió a la jaula se quedó mirando al bebé que todavia seguía gimoteando inquieto. Soltó un suspiro.

Supongo que... Tendre que... Ah, cuidar a la bolita de carne— con su chakra volvio a rodear al pequeñin que estaba a fuera de la jaula pero en vez de poseerlo, esta vez lo atrajo  hacia él y lo dejó dentro de la jaula entre sus enormes patas, con su nariz olfateó al pequeño y removió un poco sus mantas para verlo mejor. —Ya no llores mocoso, yo te voy a cuidar asi que no me des problemas— le dijo y el pequeño se detuvo y abrio sus ojos. Naruto parpadeo mirando fijamente al enorme zorro que estaba frente a él, una sonrisa adorno su regordeta carita.

—Brrrr!— balbuceó, estirando sus manitas para tocar la gran nariz del zorro ya que estaba lo bastante cerca.

Kurama simplemente interpreto aquella acción como un si.

Vaya vaya... ¿quien lo diria?

La bestia más grande...

Cayó rendida...

Bajo el encanto de un pequeño...

Al que todos temian...

Aquella bolita de grasa...

Como él le decia.

El trato era mutuo...

Si él moría...

Los dos caerían...

Eso el zorro...

Bien lo sabia...

Tendría que cuidar al mocoso...

Por el resto de sus días..

Pero.. Shh shh!

¿quien pensaria?

Que aquellos dos se convertirían...

En una familia.

¡Oh gran zorrito!

¡Te has ganado...Un cachorrito!

Disfrutalo mientras puedas...

Y cuidalo del malito...

{KattaMc}

{KattaMc}

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