IV: El descendiente del lobo

Capítulo 3

Contado por Israel

Se abrió la puerta de la habitación y entraron a traves de ella las chicas.

Alek estaba desayunando café con galletas y los demás nos encontrabamos de la misma forma que el día anterior, Leo en el rincón, Justin en un sofá y yo en otro.

-¿Por qué tan serios? -preguntó Nicole a lo cual nadie le contestó- ¿Cuánto llevan así?

-Desde ayer han estado justo así  -respondió Alek tragando las galletas que tenía en la boca- Intenté hacer plática pero me ignoraron, así que decidí dormirme y cuando desperté seguían exactamente como se quedaron cuando me acosté.

-¿Dormiste ahí donde estás? -preguntó Rose y Alek asintió- ¿A tan solo unos metros de Leo? -volvió a asentir- ¿Acaso estás loco?

-¿Sigues con lo mismo? -se levantó del lugar donde estaba, se dirigió hacia Leo y se sentó al lado de él- No me hará nada, puedo abrazarlo, estrujarlo -hizo ambas cosas que mencionó- e incluso pudiera besarlo. -Leo se levantó y se apartó de él rápidamente- Descuida, solo es un ejemplo.

-Que valiente eres, o estúpido- dijo Nicole dirigiendose hacia la mesa con comida y sangre, y tomando una copa de esta.

-Chicas, recuerden a que veníamos -habló Kelly.

-Cierto, casi lo olvido. Ya tenemos donde quedarnos -volvió a hablar Nicole.

-¿En serio? -interrogué.

-No, solo venimos a bromear con eso -dijo con sarcasmo- Por supuesto que es en serio estúpido.

-Relajate, no es para tanto -intentó tranquilizarla su hermana.

-Lo ven, eso pasa cuando una mujer necesita un hombre en su vida -comentó Alek y Nicole solo lo fulminó con la mirada, pero él solo siguió comiendo sus galletas ignorándola.

-Iremos a México -comenzó a hablar Kelly en vista de que Nicole estaba ocupada pensando posiblemente en algunas formas de matar o hacer sufrir a Alek- Hablé con Davina, y podremos quedarnos ahí.

-¿Y sus padres? -preguntó Justin.

-Al parecer están de acuerdo.

-Pero su prima murió en el ataque a la escuela, si están dolidos pueden hacer muchas locuras.

Kelly negó con la cabeza.

-Los padres de la chica y los de Davina se distanciaron por completo, ellos culpaban a Davina por estar de tu lado, y sus padres apoyaban a nuestra amiga, así que es un hecho que no están en nuestra contra.

-¿No creen que el consejo espere que hagamos eso? -pregunté.

-Es México, nadie toma en cuenta a México. Ahí es fácil escapar de todo tipo de justicia -comentó Nicole.

-Bueno, está decidido. Iremos a México.

-Al parecer ya tienen un lugar a donde irse -comentó Christina entrando a la habitación- México es un lindo lugar.

-Si, gracias por la ayuda, pero ahora creo que es mejor que nos marchemos -comenté.

-Desde luego, pero antes quisiera hablar contigo un momento a solas. ¿Te parece? -asentí- Mientras los demás pueden irse encaminando a la sala del consejo para que ahí abran su portal, desaparezcan o hagan lo que sea.

-No es necesario ir allá, podemos hacer el hechizo aquí -comentó Esme.

-Si, estoy segura de que podrían hacerlo, pero en estos sitios usualmente falla la magia, excepto en esa sala y no queremos arriesgarnos a que algo salga mal y aparezcan en otro lado, o algo mucho peor ¿o si?