IV: El descendiente del lobo

Capítulo 17

Contado por Alek

Abrí los ojos pesadamente y los froté.
Me senté en la cama y me encontré con la mirada de Harry al otro lado de la habitación, mientras su hermano tenía la mirada puesta en un libro.

-¿Qué haces aquí? -pregunté al recordar que estaba enojado con él.

-Te estaba observando dormir -respondió Davis, ganándose una mirada reprobatoria de parte de su hermano. No sabía que pensar al respecto. No me agradaba que alguien me observara dormir-. Y también imaginaba algunas escenas un tanto privadas.

-Davis. Por qué no mejor te vas a leer tu libro a otro lado.

-No. Aquí estoy bien.

-Insisto -le dio una mirada amenazante y con una sonrisa burlona en su rostro Davis se levantó y se marchó. Dejándome solo con Harry.

Él se levantó del lugar en el que estaba y se acercó hacia mi, sentándose a mi lado.

-Se que estás molesto por todas las tonterías que dije.

-Que gran descubrimiento -dije con amargura

-Nunca debí haber dicho esas cosas horribles.

-Si. Pero lo hiciste.

-En verdad lo siento. Lo último que quiero es lástimarte como lo hice. Pero soy un idiota, me preocupas y quiero protegerte, pero no se como hacerlo.

-Si eres un idiota -comenté y Harry bajó la mirada. Suspiré y tomé su mano-. Pero aun así, te agradezco que intentes protegerme. Es un buen gesto de tu parte. Pero quiero saber algo.

-¿Qué cosa?

-¿Por qué te preocupas tanto de mi?

Se encogió de hombros.

-Creo que es porque eres un humano y por eso siento que debo protegerte.

-Ah.

Sentí una gran decepción ante su respuesta. ¿Qué esperaba que me respondiera? ¿Qué ne dijera que es porque le gusto?
¿Será que en verdad siento algo por este chico? O será como otras veces que llegué a pensar que alguien podía gustarme, pero me llevaba una desilusión al darme cuenta que no era así.

Pero aunque fuera así, no se si existe la posibilidad de que yo le guste. No se si es gay, y el hecho de que yo soy un hechicero y él un vampiro parece que podría ser un obstáculo.

-Entonces... ¿Estamos bien? -me preguntó después de un momento. Me di cuenta que aun estaba tomando su mano.

-Si. Estamos bien -respondí. Y me jaló hacía él para darme un fuerte abrazo. Se suponía que los vampiros no tienen calor, pero este abrazo me hacía sentir una calida sensación.

En ese instante la puerta se abrió con fuerza y Eros entró bruscamente. Miró hacía donde nos encontrabamos. Y solté a Harry rápidamente.

-Lo siento. No sabía que interrumpía algo.

-No te preocupes. No interrumpes nada. Solo hablabamos.

Miré de reojo a Harry pero su expresión era indescifrable.

-¿Por qué vienes así? -pregunté volviendo a dirigirme a Eros.

-Tenía que venir corriendo porque Leo escapó. Pude haberme ahorrado este escándalo si hubiera sabido que estabas con Harry. En fin. Creo que los dejó- se dirigió de nuevo hacia la puerta.

-¿Cómo está eso de que Leo escapó? ¿Y por qué estás tan despreocupado? -pregunté alterándome un poco.

-Pues estaba encadenado y logró soltarse. Pero no te preocupes. Harry lo atrapará ¿No es cierto?