Piénsalo, dos veces. (John Lennon & Paul McCartney)

Capítulo 2 - La discusión

-Eres muy callada- John rompió el silencio que llevábamos en buen tramo del camino. Me limité a sonreír. -¿Por qué?-

-No lo se-

-¿Acaso le temes a la vida?- Lo miré extrañada. -Nunca te veo en las fiestas y ni siquiera le hablas a los chicos-

-Bueno, simplemente así soy-

-Deberías dejar de ser amargada- Me estaba empezando a incomodar.

-Creo que debo de caminar más rápido, es tarde- traté de ganarle el paso pero ¡que va¡ sus pasos son mas largos.

-Creo que le gustas a Erick-

-¡Wow! No te guardas nada-

-Si lo hiciera, mi vida sería aburrida-

Llegué a mi casa, no me despedí de él, solo le di una sonrisa. Muy fingida por cierto.

-Alanna- me habló y volteé. -No estoy tan loco como parece-

Reí y entré a casa.
Le conté a mi madre lo que había sucedido y prometió acompañarme al día siguiente al colegio.
Al día siguiente llegué a la escuela sana y salva, bueno, al menos en el trayecto hacia ella.

-Miren, la chica del cabello raro- dijo William que estaba parado en la puerta del salón junto con los demás muchachos.
Todos rieron, yo solo los ignoré y entré.

-Hey- John venía atrás de mí

-Hola John- me senté en mi pupitre

-Ya hablé con la policía-
Lo miré sorprendida

-¿Qué? John…pensé que no lo harías-

-Se lo merece, Alanna- me guiñó el ojo y regresó con sus “amigos”. Dudo que en verdad sean sus amigos.

La clase comenzó y yo no pensaba en otra cosa mas que en el momento en que entrara la policía a llevarse a Erick. ¿Sería para tanto? ¿Llegarían haciendo un escándalo? ¿Tendré que explicar yo algo? ¿Tendré que hablar enfrente de todos?
De pronto alguien toca la puerta y el estómago se me revuelve.

-¿Está el joven Andrews?- se escucha desde la puerta.

-Erick- la profesora dijo extrañada -te mandan llamar-

Erick se mostró muy confundido. No me había dirigido la palabra en todo ese rato.
Cuando se fué Erick todos empezaron a murmurar, era obvio que todos vimos al policía en la puerta y pedían respuestas. Yo sólo miré a John y me hizo la seña de tranquilízate y me guiñó el ojo.
La maestra continuó la clase. Pasando aproximadamente 20 o 30 minutos vuelven a tocar la puerta. Es ahora el director.

-Disculpe profesora, pero necesito en mi oficina a la joven Wood y al joven Lennon-

Entré en pánico. Nadie veía raro que John vaya a la dirección, pero todos estaban sorprendidos por mi caso. El director se adelantó mientras John y yo nos dirigímos a su oficina.

-Tranquila- Murmuró John -Todo saldrá bien, sólo di lo que pasó-

Entramos, ahí estaban Erick, dos oficiales y el director.

-Tomen asiento muchachos- dijo el director. -Bien, supongo que saben por qué están aquí-

-¿¡Qué hay de nuevo director!?- bromeó John.

-Lennon, no es tiempo para bromas, el hecho de que ahora estés aquí por algo ajeno a un acto tuyo no significa que puedas empezar a ser “payaso”-

-El también tuvo la culpa, señor- interrumpió Erick.

-Alanna, dime tu testimonio-

Estaba muy nerviosa pero conté todo lo que había pasado. Creí que había hecho un buen trabajo hasta que comenzaron las preguntas incómodas por parte de los oficiales.

-Señorita, quiere decir que ¿de un momento a otro el joven simplemente se obsesionó por tener un trozo de su cabello?-

Miré a John. No sabía si hablar sobre las burlas dentro del salón, porque eso sería incluir a John, y aunque no era de mi agrado,  él había intercedido por mí.

-Creo-

-Mientes- Erick se molestó -¿Le hiciste algo, Lennon? Ella sabe que los ataques tienen mucho tiempo-

-¿Ataques?- deje de hacer preguntas oficial por favor.

-Sí, diles John-

-Tu fuiste el que la quiso atacar con tijeras, Erick- también John comenzaba a alterarse.

-Tu, William y yo somos los que le decíamos cosas en el salón-

-Era un juego, Erick-

-Señor Lennon- interrumpió el director -Eso es un acto que merece un castigo-

-Pero Erick es el que tiene que ir a la policía, el llevó las cosas demasiados lejos, si yo no hubiera aparecido en ese momento Alanna hubiera muerto-

Abrí mis ojos como platos ¿Era para tanto, John?
Comenzó una discusión en la oficina que inmediatamente terminó el director.

-Señor Andrews, usted y yo iremos a hablar con sus padres sobre esto. Lennon y su compañero tendrán que cumplir con un castigo. Señorita Wood, puede ir a clases, le pido que esto no salga de aquí, no queremos chismes. Muchos ya vieron a la policía dentro de la escuela.

Fui la última que se levantó de su asiento, vaya que me sentía culpable por el castigo de John aunque no hubiera dicho nada. Tal vez por eso mismo, si hubiera hablado antes sobre los acosos de ellos pudo quedarse en sólo castigos. Ahora tal vez me había metido en problemas también con John.