Mi pequeña hermana Rosie salió del hospital a la hora acordada por su médico. Durante el camino, de regreso a casa, el silencio reino completamente ya que no estaba de humor de intercambiar palabra alguna con Joseph después de lo que sucedió. Rosie no estaba enterada ni quiero que se llegue a enterar ya que podría tener un ataque y no, no quiero que suceda eso, no me perdonaría si le llega a pasar algo malo.
Basto unos minutos para darme cuenta de que nos dirigíamos a la nueva casa que adquirió Joseph gracias al ascenso que le dieron en su trabajo. Al llegar comenzamos a bajar las cosas que estaban guardadas en la cajuela del auto. El resto de encontraba en un gran camión de mudanza que en unos minutos llegará.
-Bien, hijos-me caía muy mal que me llame de esa forma pero debía de dejar que pasara por un oído y saliera por el otro-Entren a la casa y elijan la habitación que les guste-comento mientras tomaba de la cintura a mi mamá la cual solo estaba callada con una sonrisa en su rostro
-Pues que estamos esperando-dijo emocionado mi pequeña hermana-¡Apúrate hermano porque si no te ganaré la mejor habitación de la casa!-grito para luego salir corriendo hacia el interior de la casa. Dejaría que ella eligiera la habitación que le gustase. A mí no me importaba tanto ese rollo de escoger mi habitación ya que es igual
-¿Por qué no vas a ver tu nueva habitación?-pregunto mi mamá-Tu hermana de ganara yo creo que deberías de ir-sugirió. Voltee a verla por un momento mientras veía de reojo a Joseph-Luego no te vayas a quejar que no te gusta tu habitación-
-De acuerdo, iré a ver mi habitación, ahora regreso-Después de despedirme comencé a caminar hacia el interior de lo que sería mi nueva casa. Ahora vivíamos en un fraccionamiento privado, por lo que veo, en donde veías carros lujosos o alguna cosa material que estaba popular entre los riquillos. No sé cómo va a pagar todo esto la pareja de mi mamá me pregunto cuál es su trabajo, más bien, cuánto le pagan por eso.
Subí por unas largas escaleras hasta llegar al segundo piso en donde se encontraban varias puertas. La primera puerta estaba entre abierta, por lo tanto deduje que esa habitación ya estaba ocupada por Rosie, decidí entrar para ver si eran ciertas mis sospechas. Y efectivamente mi hermana estaba observando hipnotizada su nueva habitación.
-¿Todo esto será mío?-pregunto mientras observaba por la ventana a las casas de nuestros nuevos vecinos-Me sentiré como si estuviese viviendo en el País De Nunca Jamas-solte una pequeña risa ante su comentario. A Rosie le encantaba leer y que le lean cuentos infantiles. Su favorito era Peter Pan y El País De Nunca Jamás ya que en él los niños nunca crecen por lo tanto viven para siempre-¿Ya viste tu nueva habitación?-pregunto
-No pero estaré en la habitación de aquí a lado por si necesitas mi ayuda-conteste-Se que al principio te sentirás rara viviendo aquí pero nos iremos acostumbrando, ya lo verás, te lo aseguro-acaricie lentamente su cabello. A pesar de las quimioterapias que recibía cada mes por la leucemia que padecía, se podía ver su lindo cabello, corto pero lindo-Sabes que te cambiaran de colegio, ¿cierto?-
-Sí-respondió con un tono triste-Pero no quiero cambiarme de colegio hermano, en mi colegio ya tengo amigas y no quiero separarme de ellas, con ellas me divirtió y me olvido de mi enfermedad-solté un pequeño suspiro-Por favor no permitas que me cambien, ¿sí?-junto sus manos suplicándome-Haré lo que tú quieras-
-No lo sé si podré-Rosie bajo su mirada-Pero por mi cuenta corre que no suceda eso. No sé cómo pero tu seguirás yendo a tu colegio aunque este a varios kilómetros de nuestra nueva casa-el rostro de mi hermana de ilumino inmediatamente-¿Te parece?-
-¡Sí!-Las siguientes horas nos vamos acomodando todas las cosas en su respectivo lugar. De seguro que mi mamá tendrá que contratar a alguien que le limpie la casa porque ella no podrá hacerlo, sola, necesita la ayuda de alguien y no creo que Joseph quiera ayudar alguna vez.
Horas más tarde escuche como me estaban llamando desde el primer piso. Deje de acomodar mis cosas en su lugar para poder ir para averiguar qué es lo querían. Al llegar me di cuenta que mi mamá y Joseph junto con Rosie me estaban esperando en la mesa del comedor. Camine hasta ahí para sentarme en uno de los lugares restantes.
-¿Por qué tanta urgencia mi presencia?-pregunte
-Quiero que veas esto-dijo mi mamá mientras me pasaba una carpeta de color marrón-¿Qué es esto, mamá?-pregunte al mismo tiempo que la tomaba entre mis manos hasta que la abrí. Mis ojos se abrieron como dos platos ya que, en el interior de la carpeta, había unos folletos de una escuela-¿Qué es todo esto?-
-Es la información de la que será tu escuela en el próximo curso-
-¿Qué?-
-¿Te gusta?-cerré la carpeta para poder respirar profundamente. Me di cuenta que la mirada de Rosie estaba completamente apagada-Tu hermanita ya vio donde va a estudiar el próximo año. Rosie irá a una escuela privada-
-Yo no me voy a cambiar de escuela-aseguré antes de que esto siga de largo-Se que el curso esta comenzando, no por eso me voy a cambiar, además de que esta difícil que encuentre otra pronto con la misma carrera que estoy estudiante, ¿no crees?-me puse de pie para irme a mi habitación-Con permiso-
-¿A dónde vas, Niall?-
-A mi habitación. Tengo cosas que hacer-Sé que no debí de irme de esa forma porque es de mala educación y más en la presencia de mi hermana. Al llegar a mi habitación continúe haciendo lo que deje pendiente. La puerta de mi habitación se abrió después de unos cinco y diez minutos. Era mi mamá.
-¿Podemos hablar?-pregunto delicadamente. Afirme con un leve movimiento. Mi mamá cerró la puerta con delicadeza-¿Por qué te fuiste de la forma del comedor?-
-Porque no tenía nada que hacer ahí-respondí. Mi mamá se fue a sentar en mi cama-Aunque estés aquí para platicar sobre esto yo no voy a cambiar de opinión respecto a la nueva Universidad. Solo te pido que me entiendas, ¿sí?-
-De acuerdo. Respeto tu opinión-
-Gracias-
-Por cierto-comento al llegar a la puerta-Hoy en la noche iremos a una cena organizada por la empresa donde trabaja Joseph. Niall, te pido por favor que te comportes y cuando estemos ahí estés tranquilo, sin problema alguno-me pidió-¿Sí?-
-No te preocupes por eso, mamá-conteste-¿A qué hora debo de estar listo?-
-A las 7pm. La cena es a las 9pm-
-Bueno, estaré listo a esa hora, tú no te preocupes que todo saldrá bien-le dedique una delicada sonrisa. Mi mamá se acerco una vez más a mí para darme un beso en la frente-¿Y ahora?-
-¿Acaso no puedo besar mi pequeño hijo?-dijo sonrientemente-Aunque crezcas tu siempre serás mi pequeño y tierno Niall-sus ojos se llenaron de lagrimas-Te amo hijo y mucho-me volvió a besar-Nunca lo olvides y pase lo que pase siempre contarás conmigo-
-Gracias y yo igual te amo, mamá-