Capítulo 20.
“Estúpida”.
Soy tan estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida, estúpida. Saqué el brazo de Harry que rodeaba mi desnudo cuerpo. ¿Qué tan borracha estuve? Habíamos cogido, follado, ¡Me desvirgó! Joder, dios, esto era tan… tan… inesperado, yo pensaba que mi primera vez sería especial, digo, toda chica espera algo especial, es lo que uno se propone, pero bueno, uno propone y dios dispone. Miré al ruloso que dormía pacíficamente, esto era tan extraño, aparte no sabía dónde mierda estaba. Me detuve a admirar sus tatuajes en el brazo… eran tantos, cuanto dolor, tenía un barco, era cómo el más bueno y bonito de todos… abrió sus ojos y me miró, sonrió.
-“No Harry, no follaremos” –imitó mi voz.-
-Cállate. –sonreí.- Lo has conseguido, me has desvirgado.
-Lo sé. –sonrió.- Soy todo un ganador, soy genial. –me guiñó el ojo.-
-No lo eres. –reí.- Tú me das asco, sólo follas bien.
-Oh, claro… -pausó- a pesar de todo, no tienes tan mal cuerpo. –miró por debajo de las sabanas, me ruboricé por completo.-
-Ya no mires. –me tapé.-
-Sí gemiste mi nombre, sí me pediste más… Mis dichos han sido ciertos al fin y al cabo.
-No… no lo hice. –fruncí los labios- ¿Dónde mierda estamos?
-En algún lado de esta ciudad. –fruncí el ceño.-
-Vale, luego de que me vaya, no me vuelvas a hablar… ni a tocar, porque seré otra… -le guiñé el ojo sabiendo lo que significaba mi última frase.-
-¿Qué? –preguntó extrañado.-
-Ya verás Harry…. Ya verás…
[…]
Terminé de vestirme; http://www.polyvore.com/aburrida/set?id=102921083 y me cepillé el cabello, dejé que mis ondas inferiores dieran forma y tapé mis cicatrices con maquillaje, le eché suficiente como para que no se notara, me eché el frasco de base facial en el bolso y me miré en el espejo.
Mi nueva vida comenzaba, ya nadie pasaría por encima de mí, nadie lo haría. Harry tú no interferirías en mis pensamientos, decisiones, etc, él no me traería abajo, él nunca me hará daño otra vez... Me apliqué lápiz labial rojo y delinee mis ojos, eché máscara a mis pestañas y revolví por última vez mi cabello. Sonreí para mí misma, ___________ tú puedes con ellos.
Tomé el autobús y me puse mis audífonos, más de una mirada tenía encima, sólo sonreía para mis adentros, el autobús se detuvo frente al colegio y bajé. Estaba un poco nerviosa, aunque no se me notaba, debía disimular.
-¿_____________? –Sentí una voz muy familiar llamándome desde atrás, me volteé y miré a Samantha—
-Samantha… -sonreí alzando una ceja.-
-No jodas, ¿enserio eres tú? –puse los ojos en blanco.-
-No, es mi clon, es obvio. –dije pesadamente y me voltee, seguí mi ruta a mi aula y sentía la mayoría de la atención masculina.-
Llegué al salón y todo se tornó silencioso, algunas chicas comenzaron a murmurar y los hombres a sonreírme como unos completos idiotas, los gorilas me gritaban un par de barbaridades y yo sólo sonreía y alzaba la infaltable ceja, llegué a mi puesto y Harry sacó la vist de su iPhone, quedó completamente boquiabierto.
-No jodas… -sonrió, no le presté atención y tomé asiento, saqué mi celular.- ¿Qué? ¿Ya me olvidaste? –lo miré, alcé una ceja y nuevamente miré mi celular.- ¿enserio? –preguntó.- ___________.... No juegues con fuego, te quemarás. –solté una risa burlesca.- ¿y qué? ¿ahora te volverás popular y no me dirigirás la palabra? –Seguí sin tomarle atención.- Vale, me cago en la puta, como sí me importara esta mier…
-Ardes de inmediato, cariño. –le dije.-
-Vete dónde tu puta madre, cabrona. –se cruzó de brazos.-
-No, socio. –le guiñé el ojo.-
-Cabrona.
-Hijo de puta. –le respondí.-
-_______________... yo, eh… ¿cómo estás? –escuché a uno de los gorilas del colegio, lo miré y sonreí.-
-Bien. –le contesté, poco me importaba cómo estuviese él.-
-¡Genial! Yo también estoy muy bien… -dijo incómodo.- __________ cambiaste mucho.
-Sí. –sonreí, Harry me miró y rodó los ojos.-
-¿Te… gustaría salir conmigo? –preguntó, fruncí el ceño.-
-Nope. –Harry soltó una risita.-
-Yo…
-No quiero salir con alguno de ustedes, ¿ok? –le interrumpí.- enserio. –él se dio una vuelta, humillado, mientras sus amigos reían frente él, esto era tan molesto.-
[…]
-Así que… empezaste a vestirte cómo zorra para llamar la atención… -dijo fastidiándome Samantha, atrás de ella estaba su hermoso escuadrón de chicas huecas, estábamos en los vestidores.-
-Sí, eres mi ejemplo a seguir, tú con tu ropa ajustada llamas la atención, ¿por qué yo no? –le guiñé un ojo.- Llegué para destronarte, cariño. –soltó una risa burlona.-
-Ay, Rose… -suspiró.- Este es mi reino, no el tuyo.
-Eso veremos… -murmuré arreglando mi cabello.-
-Esta puta quiere guerra, chicas, guerra tendrá. –me miró amenazante, puse los ojos en blanco.-
-Sí quieres armar una guerra contra mí, vale, hazlo. Pero cariño, ¿tanto te importo, para que hagas semejante estupidez? ¿Me temes, acaso? –ella frunció los labios, yo sonreí triunfante.- Lo sabía… -tomé mi bolso y me retiré de ahí.-
[…]
Me tiré en el sofá de mi casa, luego de un agotador día, no sabía que sería todo tan molesto. Tocaron l puerta y me quejé, no quería levantarme.
-________________,¡Mueve el culo y abre la puerta! –escuché a Cassie, hermanita, me levanté del sofá y abrí la puerta, que hay, era el grupito completo.-
-Joder… -Michelle quedó boquiabierta, reí, ¿es que todos reaccionarían así?-
-¿Eres tú? –Preguntó Sid, oh, ¿por qué siempre salía con sus estúpidas preguntas? Era un idiota.-
-No te responderé eso. –dije negando con la cabeza.- Pasen.
-No, no, veníamos a buscarte para ir a ver a Anthony a cantar al coro. –fruncí el ceño, ¿CORO?-
-¿Qué? –pregunté.- ¿Ese canta?
-Sí, sí que lo hace. –dijo Cassie.-
-Vale. –Saqué mi cartera del sofá- Andando…
-Sí.
Tony cantando, no, joder, eso no me lo imaginaba, era tan raro… Él no es el prototipo de chico que te imaginas que canta… y en un coro.
Llegamos al lugar y tomamos asiento, las chicas comenzaron a cantar una canción, cómo de opera… no sé ni mierda de música, pero la cosa es que Tony apareció luego con su magnifica voz en el escenrio, quedé boquiabierta, tenía muchisímo talento.
-
-No jodas. –Dijo Anthony cuando me vio.-
-Sí jodo. –sonreí.-
-Estás guapa… digo, siempre, pero ahora…
-Tony… -regañó Michelle.-
-Michelle. –la miró y sonrió inoscente-
[…]
Traté de subir las escaleras pero no pude, todo me daba vuelta, hasta los unicornios. No debí haber fumado tanto, maldita tentación. Me senté en las escaleras y miré hacía arriba.
Comencé a pensar… quería econstruir mi vida, que ya no me conocieran como la que se corta, la depresiva o mucho menos la “fea”. Ya dejaría los cuchillos, navajas, tijeras y cualquier tipo de elemento cortopunzante. Yo ya no sería esa chica… nadie pasaría por encima de mí.
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Las dedicaciones
Al mejor comentario dedico capítulo ksljfslkajf, ahora le haré así
