No Me Dejes. ||Fanfic-Justin Bieber||

Capitulo Treinta y dos.-La perdiste.

Point Of View. Zoe

Entre a la casa echa pedazos, pero con un propósito. Saber la verdad entera.

Mis ojos no dejarán de derramar lágrimas y mi corazón me dolía.

¿Cómo pudo hacerme eso? Ahora entendía por qué mi padre no quería que lo viera. ¿El tuvo algo que ver? Si él sabía quién tenía a mi madre ¿por qué no fue por ella? ¿Ella seguirá viva? ¿Justin trabaja para su padre?

Las dudas en mi cabeza no se detenían, solo quisiera detener todo. Y tener a mi madre aquí conmigo.

Sentía que mi cabeza explotaría en cualquier momento.

Subí corriendo las escaleras y mi padre salió rápido de su habitación.

Su cara mostró preocupación en cuanto me miro.

—¿Por qué jamás fuiste por ella?—Susurre.

Mi padre se mostraba confuso.

—¿De qué estás hablando Zoe?—Pregunto el

—No te hagas el que no sabe—Reí con ironía.—No fuiste por ella... Por mi madre.—

Su cara cambio por completo, estaba estupefacto, es claro que no se esperaba que supiera más de ella.

—Yo no sé dónde está ella.—Dijo serio

Lo mire furiosa.

—Si no querías que viera a Justin fue por qué lo reconociste, por qué sabías que su padre se llevó a mi madre.—Llore

Mi padre negó con la cabeza.

—Yo no sé de qué me hablas.—Susurro

Negué esta vez yo.

—Ya no me mientas papá, por favor.—Llore—Ya no más mentiras, ya no puedo con esto.—Lo mire.—Solo quiero la verdad.

Mis ojos dolían de llorar, y mi cuerpo estaba cansado, yo estaba cansada de todo esto.

—Vas a odiarme, Zoe no quiero que me odies.—Las lágrimas contenidas salieron de sus ojos.

Mi corazón de oprimió. Jamás lo había visto llorar.

—Solo dime la verdad, por favor.—Susurre.

El asintió.

Camino dentro de su habitación, y entre tras el.

Se sentó en la cama y yo solo me quede parada. El me miro. Su mirada mostraba miedo, y dolor.

Le dolía tanto como a mí.

—Perdí una apuesta.—Susurro.

Lo mire confundida. ¿Qué?

—¿Qué?—Pregunte

—Una semana antes, de que tu madre desapareciera. Yo estaba apostando.—Bajo la mirada.—Ya no tenía dinero, pero estaba seguro que la siguiente mano, era mía.—Seco sus lágrimas.—Estaba confiado. Tenía todas las esperanzas de que el juego seria mío. Así que La aposté, dije que ya no tenía más dinero.—Sonrío.—Pero el vicio pudo más conmigo.—Negó con la cabeza.—Jeremy trafica droga, y mata al primero que se le ponga al frente. Su hijo igual, por eso no quería que estuvieras con el. Jeremy me dijo que no importaba el dinero, que podía darle otra cosa, yo no entendía, hasta que mencionó que tenía una esposa muy buena.—Bajo la mirada.—Ahí fue cuando entendí. Él quería que apostará a tu madre. Y fui un estupido por poner todo en mesa, creo que ganaría Zoe, estaba seguro que tenía la mano ganada.—Lloro