Al despertarme me encontraba en mi habitación, la ventana se encontraba abierta y por ella entraba la cálida luz del sol. Mi cabeza no paraba de dar vueltas. Anoche si que fue una noche, "diferente" . Me levante media somnolienta aun. Camine con pereza hasta el baño y tome una ducha. No era normal en mi bañarme de mañana, pero hoy lo necesitaba. Afuera hacia un día hermoso, el sol brillaba, y unas pocas nubes adornaban el cielo, y por el surcaba los pájaros. Que volaban su libertad. A veces me gustaría ser como ellos. Volar. Respirar. Y vivir. Sin darte cuenta de nada, nada de problemas o dolores de cabeza. Como era un día muy tranquilo decidí por ir un rato a caminar. Decidí ponerme unos jeans, con una remera mangas corta de color azul y mis zapatillas negras.Fui hasta la cocina y sobre la mesa descubrí un papel. En realidad era una nota de mi madre que decía que vendría por la tarde ya que tenia que hacer tiempo extra en e trabajo. "Excelente" pensé entre mi, sola por un rato. Salí afuera y emprendí el camino, que luego de unos minutos me llevo hasta el parque. Para mi sorpresa esa mañana no había nadie. Así que me senté en uno de los columpios. Este ahí me hacia recordar cuando iba al parque con mi madre cuándo era pequeña. Luego de unos momentos me llamo la atención algo que me sacó de mi profunda nostalgia. Los chicos que había visto el otro día estaban bajo el árbol que estaba junto a la iglesia. Pero esta vez solo estaban dos de los tres. La chica de cabello castaño y el chico alto. En ese momento mi estomago dio un vuelco y mi cabeza comenzó a girar. Haciendo aparecer una imagen, de la fiesta. Me encontraba en el jardín sola con un extraño chico, y este me sujetaba duramente por los hombros. Sentí un fuerte mareo y estuve a punto de caerme al suelo cuando unas manos me tomaron de las mías.
- Te encuentras bien?- pregunto un chico. Me tomo solo un momento e darme cuenta que era uno de loa tres misteriosos. Me di cuenta que no era castaño sino que rubio oscuro con unos lindos ojos color café claro.
-Si- respondí algo débil aun.
- No lo creó dijo la chica. Que no había reparado que se encontraba detrás mío -Ben se ve muy pálida aun. No fue un desmayo común.- dijo la chica dirigiéndose al muchacho que estaba al lado mio. Con que su nombre era Ben.
- Llevemos la a la iglesia.
- De acuerdo- respondió de inmediato la chica
- Esperen un momento -dije algo molesta- no iré con ustedes a ningún lado, no los conozco.
- Pero nosotros si Max -dijo la chica con dulzura.
- Acompañanos, debemos decirte algo.
No dije nada y simplemente los seguí hasta el interior de la iglesia.- Bien aquí podremos hablar tranquilamente dijo la chica cerrando la puerta mientras que el chico me decía que tomara asiento en una de las sillas.
- Se que en este momento no entiendes nada, por eso comenzaré diciéndote nuestros nombres, de acuerdo?- acenti lentamente- yo soy Julia y el es mi amigo Ben- dijo señalando al chico y este me sonrió. Tenia los dientes perfectos y no es necesidad de admitir la bonita sonrisa que tenia. Pero aun así había algo extraño en ella.
- Pues yo soy Max, aunque supongo que ya lo sabían.
- No te equivocas- dijo Julia- te hemos estado vigilando.
- Disculpa?
- El día anterior cuando estabas debajo el árbol, nos viste a nosotros con un chico mas. Con el que acabas de recordar y por eso te desmayaste.- dijo Ben acercándose a mi.
- No lo recuerda, aun esta algo débil
- Solo recuerda bien la imagen que se te vino a la cabeza hace un momento.- cuando el chico dijo esto comencé a transpirar y mi cabeza comenzó a girar nuevamente. La imagen volvió hacia mi, esos ojos grises tan fríos. Como olvidarlos. Me sentía mal. Me estaba asfixiando cuando Julia me tomo de los hombros.
- No te desmayes. Sigue recordando, falta algo mas aun, por favor Max.
Entonces ahí fue cuando me acorde. De sus colmillos penetrando en mi piel haciéndome sentir un intenso ardor. Involuntariamente lleve me mano hasta mi cuello y cuando mis dedos tocaron una pequeña marca, me di cuenta de que no había sido un sueño. Todo había pasado de verdad. Me caí al piso, sintiendo el frío de este. Mire en dirección a Julia y le pregunte:
- Que me ha pasado?
- Te has convertido en una adolescente fuera de lo normal.
- Mi vida no es normal. Por supuesto. Ningún loco decide morderte el cuello.
- Esto va mas allá- dijo Ben- mirate y comprueba lo tu misma- dijo entregándome un pequeño espejo. Al acercar mi rostro, no me veía con claridad, solo podía ver un débil reflejo de mi. Pero eso no fue lo que mas me llamo la atención, sino que mis dientes, mejor dicho, mis colmillos estaban mas grandes y relucientes que de costumbre. Y mis ojos verdes tenían un brillo diferente,. Había cambiada y me sentía.. " distinta"
- ¿En que me he convertido?- dije. Y no pude aguantar mas, mis lágrimas comenzaron a salir.
- En una de nosotros. - dijo Julia- caminante de la noche y el día, , defensor de los inocentes y cazador de los traidores. Eres un vampiro Max.
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legado
VampireMáxima Sparcle, una chica común y corriente, estudia saca buenas notas, siempre tuvo un gran desempeñó para superar lo que se propusiera, hasta que un día descubre que tendrá que superar algo mas que malas elecciones o amistades rotas, para eso su...