legado

¿Mi vidente?

Llegamos a la habitación. Y mi amiga no aguantó mas.
- No puedo creer que le gustas al vampiro rubio.
- Puedes callarte?- dije cerrando la puerta de la pieza. Lo que me faltaba era que alguien nos escuchase.
- Se se claro. Por lo menos admite que lo traes loco.
- Podrías dejar de decir boludeces. Si me sigues cargando así , luego cuando lo vea me pondré colorada sin ninguna necesidad.
- O sea que......- vacilo un momento poniendo una expresión graciosa - te ruborizarías..
- No cambias mas Vía. Quiero descansar. De verdad que estoy muerta de sueño y además mañana tengo la primera clase. Bueno por decirlo así.
- Ah si, ya se. Estarás con Hugo. Me dijo que estará contigo.
- Bien. Me voy a dormir.
- Esta bien. Yo me voy a ir bañar. Duerme bien y que ningún vampiro te atolondre el sueño. - dijo Vía entrando al baño.
No puede retener una risa. Por dios. Esa chica si que era tremenda. Pero ahora el asunto era que en verdad necesitaba dormir. Quería descansar bien. No solo era mi primera noche en sino que deseaba estar bien despierta para la clase de Jack. Quería devolverle la paliza. Aunque de seguro el me la daría el doble. Antes de acostarme abrí la ventana para que corra algo de viento así no hacia tanta calor. Luego me acosté sobre las delicadas sabanas. Nunca había deseado tanto una cama en mi vida. Mi cuerpo se sentía dolorido. Antes de cerrar los ojos se me vinieron un montón de recuerdos juntos a la mente. Mi madre, mi casa, la iglesia, la primera vez que los había visto los tres chicos misteriosos, la fiesta en donde Chris me mordió, la gran mansión en el medio del bosque. Muchas cosas que procesar. Pero el agotamiento desvaneció mis pensamientos quedando hundida en un cálido y profundo sueño.

Un sonido irritante, parecía un tono molesto especialmente hecho para despertarme. Me revolque en mi cama tapandome la cabeza con la sabana. Hasta que en un momento siento algo estrellarse contra mi cabeza. No fue un golpe duro sino q suave. Me di vuelta y vi una almohada a mi lado. Y parada de brazos cruzados estaba Vía. Con una expresión seria.
- Te levantas o no??- decía mientras juntaba la almohada que se había caído al piso - tienes entrenamiento. Recuerdas? Bañate y preparate.
- Si si- dije somnolienta- ¿Qué hora es?
- Las cinco y media de la mañana.
- Ehh?? ¿Por qué me levantas tan temprano?
- Para que te bañes y desayunes. Estarás hasta las doce  y media ocupada. No seas cómoda Max. Y sale del modo " morsa dormilona". Buscaré algo para comer mientras te bañas.
Y se fue. En serio me había despertado a las cinco y media. En este momento matarla era poco. Me levante a regañadientes. Me dirigí hacia la ducha y deje que el agua me despertará. Al finalizar me puse la típica ropa que usé ayer. Pero a sorpresa mía en el ropero se hallaba un short deportivo. Por lo tanto reemplazo la calza por algo mas fresco. Me cepille el cabello juntándolo en una cola de caballo. Escuché la puerta abrirse desde el baño. Cuando salí vi a Vía con una bolsa llena de churros y café caliente.
- Bueno. Espero que te guste.
- Claro que si. Hace mucho que no como churros. Y el café me vendría bien para despertarme.
- Entonces... Que esperas?? Al ataque.
Nos comimos todo y bajamos hasta la sala. Allí se encontraba Hugo con un libro en su mano.
- Hola chicas - dijo tímidamente
- Buenos días Hugo. Listo para que nos agan mierda.
- Si, lo estoy.
- Yo los veo después. Quedé con Julia para organizar la artillería.
- De acuerdo nos vemos después.
- Suerte. No se rompan nada.
-Eso esperó.
- Vamos o sino Jack nos matara.- dijo Hugo.
Salimos afuera dirigiéndonos hacia el bosque. Hugo dijo que sabia a donde teníamos que ir. Había un lindo viento fuerte que te hacia poner piel de gallina. Excelente para empezar con la mañana.
- No sabía que Jack estaría aquí. Pensé que solo ayudaba con las armas.- no bastaba soportarlo en clases de lucha que ya tenia que volver a verlo en otra.
- Lo hace. Solo que el es bueno en muchas cosas. Para ser mas sincero es el mejor en todas las disciplinas. Siempre se rotan los mas destacados para enseñar a los nuevos. O a los torpes como yo.
- Hugo, no eres torpe.- dije mirándolo. Sabia como se sentía. También era nueva. Pero debía hacer lo mejor posible para volver a casa.
- Lo dices porque eres mi amiga. O te caigo bien de alguna forma. Nunca me has visto pelear o correr. Soy muy malo.
- Soy tu amiga. Y no significa que si no te destacas bien en ciertas cosas te hará mejor o peor persona. La verdad es que no te conozco muy bien. Pero siento que eres buen tipo.
- Gracias Max. Tu también me caes bien.
Estuve ta concentrada en nuestra conversación que al mirar hacia adelante ya habíamos llegado. En frente de nosotros se encontraba Ben junto a Jack. Y mas al costado estaba la chica de pelo oscuro que había peleado con Jack junto a otro chico que era muy alto.
- Dicen que el tiempo es oro. Si lo seria literalmente ustedes dos lo perderían por necios. - dijo Jack mirándonos serio.
- Lo sentimos. Vinimos lo mas rápido posible.
- Le estaba mostrando a Max el camino.- dijo Hugo. Parece que no era la primera vez que llegaba tarde.
- De acuerdo. Hugo tienes suerte al encontraba una nueva compañera. Ya que la anterior sufrió una leve ruptura de hueso por el equipo contrario. Espero que esta vez los jugadores tomen mas precauciones.- dijo Jack fijando su mirada en la chica de ojos negros.
- Vamos Jack. Fue solo un accidente. Además Emma no era lo suficientemente buena. Bueno, creo que el dúo en si no era bueno- dijo la joven mirando a Hugo con cara de despreció. Sentí como se tensaba cerrando los puños. Sin duda a Hugo no le caía bien esa chica.
- Sarah. Aquí estamos para aprender a defendernos de los enemigos. Pero nosotros no podemos formar enemigos con nuestros aliados.- dijo Ben. Hasta ese momento nunca había hablado.
- Bueno. Las reglas son simples. Cada equipo se separará. A unos le toca el lado Oeste y a otros el Este. Cada participante estará armado. El objetivo, simple: desarmar a los oponentes sin ser lastimados. Al concluir los perdedores reciben prendas. Se vale subir a los arboles. No se vale usar pociones mágicas ni nada por el estilo. - Jack hablaba muy rápido y con una expresión de aburrimiento. - Ahora elijan sus armas que están en esa mesa. Todas las armas son las mismas. Espadas, arco y flechas, y dos dagas. Ni mas ni menos.
Hugo tiró de mi remera para indicar de que vayamos y busquemos nuestras cosas. Tome la espada y las dagas. Le dije a Hugo que el se encargara de las flechas. Si era mala con la espada, no me quiero imaginar con eso. Estaba por ir hasta donde estaba Ben, cuando Sarah pasó por delante mío, provocando un empujón.
- Lo siento - dijo con esa típica cara de zorra maldita a la cual no le caes bien. - suerte para ahora.
- Gracias.- dije seca. Ahora Hugo y yo compartíamos el odio hacia una misma persona.
- Mm- dijo estudiando me. Me miró de arriba a bajo.- para ganarme necesitaras toda la suerte posible linda.  Espero que no te pase lo mismo que a Emma. Suerte, Max.
Pronunció mi nombre con asco y se fue. Me dirigí hacia Hugo que ya estaba reunido con los otros. Al llegar Sarah me dedico una fría mirada con esos espeluznantes ojos negros que te penetraban. Sabia lo que quería: buscaba de acobardarme. Antes de separarnos me sonrió enseñándome sus colmillos. Pero yo también era un vampiro, no era mucho menos que ella. Gracias a su increíble falta de cerebro yo me había enojado. Y eso era lo peor que podían hacerme. Sin duda buscaría la forma de hacerla trizas.
- Bien. Por lo general me quedo en este gran árbol. Sin duda sabrán que estamos aquí porque, Mmm, bueno, siempre me escondo aquí. Y dejo que me atrapen.
- Hoy no nos esconderemos Hugo - dije sosteniendo mejor la espada de bronce - idearemos un plan.
- Tendrá que ser un plan rápido e improvisado. Porque en cuanto Ben toque el silbato el juego comenzará.
-Bien. Entonces nos apuraremos. Yo me subiré a este árbol. Que no es tan alto. Y tu al que esta mas allá. Desde ahí nos podremos ver y desde luego ver mejor el panorama. Tienen muchas hojas y eso nos ayudará a escondernos mas fácil de ellos.
- Bien Max. Pero deberemos luchar contra ellos en algún momento. No son las escondidas y Jack dará como fraude el entrenamiento. O sea, que los perdedores seremos nosotros.
- Entonces. Lucharemos.