Vendido. "Larry"

02

Se había acomodado en un rincón de la habitación.

Tenía la pansa llena, y estaba seguro, había subido algo de peso.

Habían solamente pasado dos semanas, y ya lo creía el infierno sobre el cielo y viceversa.

Tembló al sentir ese asqueroso aroma rondando.

Sabía que estaba cerca.

Se aferró más a sus piernas.

No quería llorar.

Le dolía todo el maldito cuerpo.

Des no se cansaba. Siempre llegaba a la misma hora, exigiéndole al pequeño Louis lo mismo de siempre.

La puerta se abrió estruendosa, dejando ver al alfa con un cigarrillo en la boca y una sonrisa macabra.

"Hola Louis. Ya vino papa..." Odiaba escucharle decir aquello. Odiaba lo que también vendría a continuación.

Se paró difícil mente con las piernas temblándole y a duras penas se acercó a su jefe.

A estas alturas, dueño o amo tampoco sonaban mal.

Empezó su seducción atrayéndolo hasta la cama y restregándosele como siempre había hecho.

"No." Fue detenido por una de sus manos con fuerza en su brazo. El le miro nervioso, pero Des solo sonreía. "Mi esposa ha olido tu chillante olor. Le he dicho que son gajes del oficio pero, supongo que la perra sabe que la engaño. En fin, no quiero otra maldita pelea de nuevo así que, cambiaremos las cosas." Enseguida le soltó yendo inmediato a desabrochar su cinturón, bajándose los pantalones e insitandole  al omega su siguiente movimiento.

Louis era bueno en eso.

Pero la repugnancia.... El sabor jamás se le iba con lavarse los dientes.

Empezó con simples lamidas para luego atragantarse con esta, ya que el mismo alfa le tomaba de la cabeza para que fuera a su ritmo.

"Vamos Louis!!" Ordenó. Se estremeció más aún así siguió con su trabajo. "Carajo..." Chillo cuando fue jalado vilmente por Des y aventado a la cama.

No se quejó. Nunca lo hacía.

Sus lindas bragas fueron destrozadas y de una estocada, el alfa le lleno.

Fingió el mejor sonido de placer, estrujando las sabanas entre sus dedos.

No pudo evitar soltar un sollozo cuando Des tomó sus caderas y las alzó, teniendo así más acceso en profundidad.

Estaba destrozado.

"Joder.... Si.... Estupido omega bonito...." Se mordió los labios mientras trataba de tomar aire, pues el alfa había comenzado con esos extraños movimientos que sabía hacia a la hora de estar a punto de anudarse.

Y si, no pudo resistir soltar otro sollozo cuando lo hizo.

Demasiado incómodo y doloroso.

Louis de nuevo tardaría horas en poder pararse.

"Has comido bien?" Preguntó el alfa una vez haberse salido de su interior y acostado al lado suyo, mientras fumaba un puro.