Vendido. "Larry"

23

Su cuerpo estaba pulcramente acomodado de manera fetal, en esa gran cama espaciosa, que solo le pertenecía a él.

Y antes, hubiera estado feliz así, solo...

Pero ahora, y después de haber compartido un celo con Harry, sentía tan grande aquel sitio... Aquella cama, fría.

Que estupido.

Cerró sus ojos con fuerza deseando caer dormido pronto, fallando en el intento, inflando las mejillas y subiendo mas sus piernas a su pecho, tapándose entero.

No supo cuanto tiempo estuvo perdido en la nada oscuridad del lugar, solo, cuando oyó levemente como la puerta se abría delicadamente, oyendo después como era cerrada y luego unos pisos muy finos; su cama hundiéndose tras suyo, y unos brazos que le rodearon con firmeza.

Su aroma... Su nariz lo agradeció.

"Qué haces aquí?" Trato de sonar irritado, incluso indignado, pero una boba sonrisa apareció en su rostro, jurándole volver a aparecerse más seguido.

"Quería verte... Olerte..." La sensación de sentir la punta de la nariz de Harry en su cuello, lo desbordó en cierto punto que él mismo se inclinaba lo posible, amoldando su cuerpo de manera que encajara perfecto con el rizado.

"Aquí me tienes..." Con sus manos recorrerle por debajo de su fina pijama, jugando su vientre plano, haciendo formas con sus dedos.

"Que sucede, Lou?" Preguntó cuándo el castaño entonces recordó la hora que era, notando que básicamente el alfa de había escabullido para llegar a su lado. Soltó sus feromonas oliendo a malvavisco quemado, dejándole claro a Harry su molestia.

"Estabas con ella." Dió por hecho.

Un suspiro le hizo gruñir ante la posible afirmación.

"No." Pero la respuesta fue totalmente diferente. "Estaba en mi despacho. Asuntos que arreglar. Contabilidades, manejo de traspasos... La cocaina y las armas... Ahora que Fitzgerald está aquí, trajo consigo a un nuevo cartel aliado. Italianos." Louis le escucho atento asintiendo levemente, pero sin voltearse a verle aún.

Aunque se moría de ganas por hacerlo.

Quería ver esos ojos verdes mirarle con cariño... Con ternura... Con amor.

Así como su alfa le veía, su alfa.

Maldición.

"Te irás a dormir con ella?" Preguntó.

Rogaba por qué la respuesta fuera si. Así tendría una razón para enojarse con el rizado y sacarlo de una vez de su cama y su habitación.

No quería involucrarse aún más a fondo con el, en un contexto que incluyera a su corazón cayendo por completo a eso llamado amor.

Aunque su omega le miraba sumamente indignado pues... Vaya Louis, que estupidez. Has estado en su celo y él se te ha confesado, incluso. Y tú hablas de no caer en el amor?... Enserio!!?

"Tontito." Rió el rizado. Su nariz se arrugo, con el pecho punzando de indignación. "Por qué estaría aquí entonces?" Louis suspiro en alivio cuando las caricias de Harry se intensificaron, empezando a adormecerle de una manera eficaz.

Maldito Harry y sus manos que son como... Dioses!...

"Lou?... Te has dormido?" Le escuchó vagamente decir. Negó perceptible tratando de mantener entrecerrados los ojos apenas. "Mañana es la fiesta...
Ya sabes, donde se anunciará el embarazo de Rebecca." Hizo una mueca de fastidio viendo el rumbo que estaba llevando el asunto.