TE GUSTE O NO.

LA VERDAD

Había pasado ya un mes sin problema alguno yo me había mantenido al margen de toda la situación que había creado, mi día era un caos, por tantas cosas que tenía que hacer: estudiar, hacer deberes, ir donde mi tutor, tener prácticas de bascketball con el equipo y también prácticas atrás de mi patio para poder avanzar más que mis compañeros. Todo lo hacía en un día y en las noches, a las 12 que me iba a acostar, en lo único que pensaba era en que lo estaba logrando. Me había costado un montón acostumbrarme y vencer a la pereza, pero el hecho de saludar a Kyle, de verlo y reír con él, valía la pena. Sabía que la "amistad" que teníamos antes y esa confianza única que solíamos tener jamás volvería intacta, pero quería intentarlo. Recuerdo que Butters, durante el almuerzo, me preguntó
- ¿Qué pasa si no vuelven a ser amigos?
Y esa era una pregunta que siempre había evitado hacerme a mí mismo.
- Sería como tiempo desperdiciado.
- Estudiar y hacer deporte no es desperdiciar tiempo.
- ¡Waakk!
Gritó de asco Token. Para después decirme.
- Ya suenas igual a esos deportistas... de verdad que no vale la pena, es decir, me pareció muy bueno al principio y dejé que me robaras a Clyde en las vacaciones, ¡pero hermano! ¿Te has visto a un espejo? Pareces un zombie.
Y si que lo parecía, incluso mi madre se había preocupado por mi diciéndome que me quería ver en la casa todos los días y no solo en las noches, pero qué se suponía que hiciera.
- He llegado lejos con este asunto, y Kyle y yo ya hablamos, antes ni el saludo.
- Fue tu culpa igual.
Respondió Kenny mientras jugaba con su comida.
- Lo sé, por eso lo estoy remediando.
- Sinceramente me parece mucho trabajo lo qué haces...
Dijo Token renegando nuevamente. Eso se había acostumbrado hacer los últimos días porque suspendía los partidos de videojuegos.
- ¡Solo piénsalo! ¿Tú crees que Kenny lo haría por Butters?
Butters se atoró con su propia bebida, Kenny le dio palmadas en la espalda mientras le preguntaba si estaba mejor. Yo sonreí.
- Kyle era mi mejor amigo. Tú lo harías por Craig.
- Craig no se alejó de mí, sigue yendo a mi casa a jugar, con su novio, pero va.
Yo acabé esa conversación diciéndole que lo haría, que prometía que el sábado iríamos todos a jugar un torneo de videojuegos en su casa, después de las clases extras de tutoría que le estaba pagando a Kyle, aparentemente estaba muy oxidado e ir al ritmo de la profesora de matemática y el maestro de lenguaje era difícil para mí. Prácticamente empecé a ir a solo hacer deberes con él.
Él sábado que le había prometido a Token y a los chicos, llegó. Estaba en el departamento de Mi tutor, en su cuarto, cuando de pronto entró Kyle con un videojuego en sus manos diciendo.
- Se que dijiste que no sabes, pero... ¿Qué haces aquí?
Me preguntó cuando se dio cuenta de mi presencia en el escritorio de su primo. Yo le di una sonrisa sincera recordando que no lo vi en la práctica del viernes y realmente quería verlo.
- Pagó un día extra de estudio.
- Pensé que era una broma, pero ha sido verdad... pagas dos horas el sábado.
El primo de Kyle ofreció bajar a buscar algo de beber y yo acepté, apenas cerró la puerta Kyle y yo nos quedamos en el cuarto solos, Pero apenas Kyle se sentó en la cama de su primo yo le dije.
- Los chicos y yo nos reuniremos a jugar videojuegos en la casa de Token ¿Quieres ir?
Kyle balanceaba el Cd en sus manos mientras decía que ya tenía planes con su primo.
- pero Kyle viene conmigo, quedamos en ir juntos después del almuerzo.
Kyle me quedó viendo extrañado para después preguntarme
- ¿Tú almuerzas aquí?
- Si, tú tía es muy buena persona.
Kyle se dejó caer boca arriba en la cama y se reía bajito.
- ¿Qué pasa, está mal?
Pregunté indignado.
- No. Solo que a veces me pregunto qué carajos estas haciendo aquí.
Se volvió a erguir.
- Tú no eres esto. Ni siquiera para fingirlo eres bueno.
Dicho eso salió del cuarto de su primo dejándome con un enojo en el pecho y mil palabras que quería decirle. Eso realmente me había ofendido demasiado.
Mejor vete, él nunca volverá.
Pensé seriamente. Él solía portarse idiota conmigo o de vez en cuando me daba cuenta que solo me hablaba lo justo y necesario. Solía odiarlo por eso, pero en el fondo sabía que aún estaba mi amigo ahí. Y lo extrañaba. Aparte, el baloncesto no me iba mal.
Kyle entró de nuevo al cuarto con su primo y las bebidas.
- Kyle va a disculparse.
Eso no lo esperaba. Yo vi a Kyle quien estaba totalmente desmotivado por la idea, pero solo por qué su primo lo hizo me pidió disculpas.
- No te preocupes.
Dije cuando me levanté del asiento sonriéndole. Ya con una hora de clase había sido suficiente para mí.
- Iré a comer a mi casa y pasare por ti para ir a donde Token.
Le recordé a mi tutor. Kyle solo estaba callado.
- Mi primo también irá.
Kyle no lo contradijo. Solo me regresó a ver y me dijo con seriedad.
- Quiero saber cómo están los chicos.
Yo me emocioné y salí de ahí estando feliz. Aquella cita en la casa de Token la esperaba con ansias.