12. Un asunto sin resolver.

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Brooke

-Venga Brooke, déjame los deberes- me dijo mi amiga apurada, esta vez no se los podía dejar.

-Lele tienes toda la noche para hacerlos, si no los haces es porque no quieres, a parte, yo no los he hecho todos así que me voy a poner a hacerlos- mentí. Yo si los había hecho todos, después de que Aaron se fue a su casa.

-Brooky, pero si no te cuesta nada, déjamelos anda- me pedía ella, sin aceptar un no como respuesta.

-Vale Lele te los dejo, pero luego no te quejes de tus malas notas- Lele siempre iba justa en sus notas, o simplemente suspendía, pero no con notas muy bajas.

-Gracias, eres la mejor de todas ¿lo sabías?- después de decir aquello me colgó.

Fui al salón y allí vi a mamá tumbada en el sofá, donde hace unas horas había estado Aaron. Ella estaba durmiendo así que fui a despertarla para que se fuera a la cama.

-Venga mamá- le daba toquecitos en el hombro para que se despertara- despiértate y vete a la cama.

-¿Y papá?- me dio una punzada en el corazón, hacía mucho tiempo que no veía a papá, debería visitarlo más a menudo.

-Mamá, papá no está aquí, esta es nuestra casa, vete a la cama.- contesté yo tranquilamente, no quería hacer daño a mi madre con mis palabras.

-Perdón Brooke, buenas noches- se fue a su cama, después de darme un beso en la mejilla a modo de despedida.

Yo fui a la cocina a beber un vaso de agua y para pensar en si debería o no ir a casa de papá mañana por la tarde, ya que no tenía mucho que estudiar e iba adelantada a los demás con mis deberes. Cuando lo terminé, caminé hacia mi cuarto y me acosté en mi cama dispuesta a dormirme. Cogí mi teléfono que estaba en la mesilla de noche y le mandé un mensaje a Aaron de buenas noches. Al minuto el me contestó y mi sonrisa volvió a surgir a causa de su respuesta. Volví a dejar mi móvil en su sitio y me acurruqué en la cama, su olor seguía allí y eso me volvía loca. Me dormí un poco después, obviamente pensando en él.

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-Bien hecho señorita Thomson- me dijo mi profesora de historia, había sacado un 9. Aaron que estaba a mi lado me guiñó un ojo a ver mi nota- ha sido la más alta de la clase. Tenéis que aprender de ella chicos y por eso vamos a hacer un trabajo en grupo, en realidad no tiene nada que ver con la nota de Brooke, pero tenéis que hacer un trabajo de la revolución industrial.

-¿De la primera o de la segunda?- preguntó un compañero al fondo de la clase.

-De las dos, tenéis que ser elegantes y entregarlo muy limpio y correcto para dentro de tres días. Es en parejas por cierto, la que tenéis al lado.- al escuchar eso me fijé en Aaron que tenía un sonrisa pícara.

-Entonces, ¿quedamos esta tarde para hacer el trabajo?- me susurró Aaron cuando habíamos salido de clase y nadie nos veía.

-¿En tu casa o en la mía?- pregunté yo enroscando mis brazos al rededor de su cuello.

-En la tuya, que en la mía tenemos a mi hermano- dicho esto nos dimos nuestro primer beso del día, ese con el que había soñado la noche anterior. Aún no podía decir que estaba enamorada de Aaron porque no sabía lo que sentía, pero besarle y estar con él era la mejor sensación del mundo.

Nos separamos por falta de aire y después de eso nos fuimos cada uno por su lado. Me reuní con mis amigos en la cafetería, me fijé mucho en Nicholas y en Lele que hablaban animadamente. Nicholas me echó una mirada y yo le sonreí amablemente.

-¿Cómo van chicos?- dije yo sentándome en la silla enfrente de Logan.

-Muy bien, le estaba contando a Nicholas lo que nos obligó a hacer la de historia- comento Lele alegre.

Típico* (Francisco Lachowski & Barbara Palvin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora