Acosado (Wolversilver yaoi)

1.

Entre a la cafetería en la cual me vería con el resto y les vi de inmediato.

-Logan, al fin- Raven fue la primera en saludarme, seguido de Hank y Charles.

-¿Por qué la cara larga?- hablo el castaño mientras tomaba asiento.

-sólo estoy pensando en lo desastroso que es vivir- hablé pensando en lo que había hecho la noche anterior

-supongo que algo malo... ¿Quizá con el pequeño Peter?- dijo riendo mientras el resto hacía lo mismo.

Gruñí en respuesta, no caería en sus juegos.

Tenía suficiente en que pensar como para estar prestandome a los juegos de ellos por lo que sin responder a lo anterior me dediqué a conversar de algo más importante.

-entonces, ¿Qué era lo tan grave que tenías que decirnos?- hablé mirando a Charles.

-bueno... hable con Trask... Y me contó algo que sinceramente me tiene bastante acomplejado- Charles se veía bastante incómodo algo raro en él- me pidió que les informará acerca de una nueva regla en el club.

-¿Una nueva regla? No es algo muy común que digamos- hablo Hank mientras miraba a Charles con un poco de miedo.

-y ¿Qué es lo que quiere el ''gran'' señor Trask ahora?- Raven hablo con burla haciendo énfasis en la palabra ''gran''

-quiere que entren no mutantes y que tengan los mismos derechos que el resto.

El silencio reinó en la mesa mientras que todos nos mirábamos unos a otros.

-es una mierda- dije finalmente al ver que nadie reaccionaba- el bar trabaja bien y funciona al ser sólo mutantes, el día que un no mutante entre, será el día que la paz del lugar va a terminar.

Todos asintieron a lo que dije mientras la molestia que sentíamos subía a cada segundo.

Al final, decidimos hablar con Trask, ninguno de nosotros estaba dispuesto a trabajar con no mutantes y al hablar con el resto, todos respondieron lo mismo.

Sin duda, el final de nuestro rentable trabajo estaba cerca.

Y no podía llegar en peor momento.

Charles nos hablo acerca de su próximo retiro, estaba por terminar la universidad y le habían ofrecido un gran empleo como profesor, irónicamente, a lo que pronto saldría del lugar.

Estaba seguro que si el se retiraba no era sólo por eso, hace algún tiempo que sentía otro aroma en él, un hombre sin duda, al igual que Raven y Hank, era algo leve pero perceptible para mi.

Si Charles se iba, Raven también lo haría y era probable que Hank también.

Quizás lo mejor era buscar algo más.

-Wolverine- aquella voz que, para mi mala suerte, conocía bastante bien me hizo voltear antes de entrar a mi hogar.

-¿Ahora eres un acosador, mocoso?- lo vi soltar una pequeña sonrisa mientras bajaba la mirada.

Algo no andaba bien.

-yo...- podía oler su nerviosismo desde la distancia en la que me encontraba.

-entra, te haré un café.

Espere que se me tirara encima pero nada pasó, sólo asintió para pasar a mi hogar.

Era extraño, algo le pasaba al mocoso y me tenía bastante intrigado con ello.

-dilo de una maldita vez o de verdad te echaré de aquí- dije ya harto de ver como el mocoso soltaba suspiros tras suspiros.

-tengo un problema... pero no sé que hacer...- el chico no me miraba.

-¿Qué puede ser tan grave como para que vengas a decírmelo a mi, precisamente?

Se que se oía rudo la forma en la que lo había dicho pero era lo que estaba pensando en realidad.

-yo sólo quería hablar con alguien y cuando pude notarlo ya me encontraba aquí- soltó una pequeña risa pero no era para nada alegre- si soy una molestia me iré, lo siento por venir así.

-esta bien, sólo habla- dije mientras le miraba seriamente- odio a las personas que me hacen perder el tiempo.

El dio un gran salto al por mis palabras.

-yo... es sólo una tontería... pero... no se que hacer.

-¿Por qué no le preguntas a tu amigo azul? -él dio un salto al escuchar del chico- entonces eso sucedió, te pelearse con tu amigo, esas cosas pasan, eres joven, impulsivo, cometes errores.

-no fue así... yo... no me gusta que el idiota de Warren se le pegue, y cuando le dije el se molesto y yo le grite de vuelta...- el mocoso miraba la taza en sus manos comí su fuese lo mejor del mundo- yo sólo no quiero que sufra...

Le vi y pensé que lloraría por lo que sin más me acerqué a él para acariciar su cabeza.

-hey, como su amigo, debes cuidarlo, y está bien, pero no puedes reprimirlo- el me miró con los ojos un poco llorosos- si algo pasa, como su amigo debes apoyarlo en todo, ¿De acuerdo?

-¡Si!- se puso de pie rápidamente y se colgó de mi cuello.

Se escondía en mi cuello mientras sus piernas rodeaban mi cintura.

Había vuelto a ser el mismo chico revoltoso de antes.

-¡Gracias!- acercó su rostro al mío y pude adivinar sus intenciones por lo que desvíe el rostro, aunque no sirvió de nada, ya que, sus manos me hicieron voltear mientras el pegaba sus labios a los míos.

El beso era sólo la unión de sus labios a los míos por lo que sin duda, saque mi lengua para deslizarla por su labio.

Él se separó de mi mientras me miraba sorprendido y sonrojado.

-¿Piensas seguir besando como mocoso, mocoso?- le miré sonriendo y el pareció dudar.

Puse mi mano en su nuca y comencé a besarlo con intensidad, metí mi lengua en su boca y la movía furiosamente mientras el intentaba seguirme el ritmo.

-más...- susurró cuando nos separamos a lo que solté una risa mientras volví a unir nuestros labios.

El paso nuevamente ss labios por mi cuello para hacer aún más profundo el beso, comenzó a frotar su cuerpo junto al mío y la posición en la que nos encontrábamos no era la más favorable para mi.

Me separe de él y al ver como un pequeño camino de saliva corría por la comisura de su labio sentí un escalofrío recorrer mi cuerpo.

-no sigas, mocoso...- separe su cuerpo del mío y el me miró avergonzado.

-G-Gracias otra vez- me dio un pequeño beso y se fue de mi hogar.

Cuando escuché el sonido de la puerta cerrarse no pude evitar sonreir.

¿Qué es lo que me haces, mocoso?

*************

Como dije antes, es mi primera vez escribiendo acerca de ellos así que si pudiesen decirme si les gusta, si no, si les parece la idea o no, se los agradecería.

Saludos!!