Acosado (Wolversilver yaoi)

7.

Los días siguientes a la aparición de Víctor me tenían nervioso.

A menudo despertaba a media noche, agitado con miedo de ver a alguien en la oscuridad o de que Peter no estuviese a mi lado.

Le apretaba más a mi para sentir que nunca dejaría mi lado.

Cuando iba a clases mi corazón latía de preocupación aunque no quisiera admitirlo.

Víctor no volvió a aparecer en todo este tiempo, las reparaciones estaban cerca de terminar y estaba más ocupado que nunca con los permisos y hablando con los proveedores.

-estoy muerto...- me senté en el sofá y vi la hora.

Peter salía a las 6:30 los días jueves, eran las 6:32, pronto estaría aquí.

En menos de dos minutos una gran ráfaga de viento atravesó el lugar y lo próximo que sentí fueron unos brazos rodearme.

-Hola- tenía una gran sonrisa y deje un pequeño beso en sus labios.

-Hola, ¿Qué tal tu día?- se acurruco un poco contra mi y pude adivinar sus intenciones.

-aburrido, tuve clases de literatura y vi a Charles- acaricie su cabeza mientras el cerraba los ojos y me contaba su día.

Me pregunto acerca del mío y estuvimos hablando durante algunos minutos hasta que a Peter le dio hambre.

Decidimos llamar por una pizza y Peter no dejó de quejarse porque la entrega se había demorado demasiado.

Cerca de veinte minutos después, llegó nuestra pizza. No me gustaba mucho este tipo de comida pero Peter la amaba.

Vimos una película mientras comíamos, su madre le llamo y yo recogí la basura para ir a darme una ducha.

-¡Sorpresa!- sus manos rodearon mi cintura.

-mocoso pervertido- me voltee y comencé a besarle.

Sus brazos se movieron de mi cuello mientras se pegaba más a mi.

Sus manos acariciaban mi cabello mientras yo comenzaba a deslizar las mías por su espalda.

-más...- susurró antes de unir nuestros labios otra vez.

Solté una pequeña risa mientras acariciaba su retaguardia con suavidad.

Sus piernas se abrazaron a mi y le pegue a la pared.

-tocame... Por favor...- sus pequeños gemidos en mi oído me hacían perder el control.

Lleve una de mis manos a su creciente miembro para comenzar a acariciarlo, lentamente, disfrutando las reacciones de su cuerpo.

-si... así...- llevo una de sus manos a mi creciente erección para unirla a la suya y comenzar a mover su mano.

Los movimientos eran cada vez más rápidos mientras el dejaba besos por mi cuello y mandíbula.

-tocame más... L-Logan...- sabía que era lo que quería que hiciera, por lo que lleven de la dedos a sus labios.

-ya sabes que hacer...- susurré comenzando a dejar besos en toda la piel que mis labios podían alcanzar.

Peter tomó mi mano y comenzó a lamer mis dedos con devoción, ensalivando cada rincón de ellos.

-ya... por favor... aaahhh...- me acomode de manera que su peso quedó recargado en la pared.

Mi mano se acercó lentamente para meter uno de los dedos, a lo que Peter dio un pequeño salto en respuesta.

Sus manos se movían más rápido mientras que sus gemidos comenzaban a perder sentido.

Sus dedos se clavaban en mi espalda, mantenía los ojos fuertemente cerrados, sus caderas comenzaban a moverse a ritmo con sus manos.

Metí el segundo dedo mientras comenzaba a moverlos en su interior.

-Logan... Yo...- sus piernas se apretaron más a mi cuerpo logrando un movimiento más rápido.

-yo también...-susurré en su cuello.

Un par de movimientos más de nuestras manos y cuerpos y ambos habíamos llegado a nuestro orgasmo.

Entre besos, terminamos de ducharnos y nos dedicamos para ir a dormir.

Peter, como siempre, enreda sus piernas y brazos en mi cuerpo, me mira con una sonrisa traviesa como si fuese un niño, para luego dejar un pequeño beso en mis labios y apoyar su cabeza en mi torso.

Secretamente, agradezco que este tan pegado a mi en estos momentos, el miedo aún está presente en mi cuerpo, a pesar de que ha pasado un tiempo, pero por experiencia se que Víctor no deja pasar nada.

Pasa una semana y al fin puedo abrir la cafetería.

La inauguración es una locura, sólo habíamos invitado a los amigos más cercanos y aún así el lugar estaba repleto.

Charles sonreía abrazado a su novio mientras este tenía a David en brazos. Raven estaba junto a ellos con su novio.

Por otro lado estaba Hank sentado con un rubio a su lado que le hacía compañía como un perro guardián, aunque es comprensible, tenía cerca de seis meses y dos esperaba dos bebés. Creo que sería igual o peor.

Estaban casi todos nuestros conocidos presentes, incluso Warren estaba ahí con su azul pareja, que era muy amigo de Peter.

Hablando de mi novio, había llegado puntualmente al lugar, saludo a algunas personas y luego salió diciendo que debía hacer algo.

-Logan- Charles me pidió que me acercara- es grandioso todo, felicidades.

-gracias- su novio también me felicito y el pequeño me dio un abrazo.

Paso cerca de media hora, y Peter aún no aparecía.

Iba a llamarle cuando escuché su melodiosa voz

-Logan, quiero presentarte a esta hermosa mujer- una dama un poco mayor, de pelo liso y castaño, estaba detrás de él y me sonreía- Madre, te presento a Logan, mi novio.

Decir que estaba pálido era poco... sentía la urgencia de salir corriendo y no volver a aparecer pero lo podía hacer eso.

-un gusto conocerle, Peter me ha contado mucho acerca de ti, y puedo entender a que se refería- ella soltó una pequeña risa y Peter la miró negando con la cabeza.

-el gustó es mío, un agrado conocerle señorita- ella soltó una risa mientras yo besaba su mano.

-además es todo un caballero- Peter la separó de mi y me miró con un pequeño puchero.

-madre, por favor.

-bien, es tuyo, lo se.

Estuvimos hablando durante algunos minutos pero luego se apartaron a ver a algunas personas.

La fiesta termino cerca de media noche, Peter fue a dejar a su madre a un hotel y luego volvería para ir a casa juntos.

Estaba esperándole mientras fumaba un puro cuando mi teléfono sonó.

-¿Donde estas?- hablé sin esperar lo que iba a oír.

-lo siento, pero su pequeña cita tendrá que esperar...

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Espero les guste y bueno nos vemos pronto ;D