Acosado (Wolversilver yaoi)

11.

Como eran vacaciones, Peter decidió ir unas semanas a ver a su madre.

No quería dejarle ir, pero me prometió que no se separaria de mi al volver.

Hace un poco más de un habíamos comenzado a tener relacione y Peter ya se acostumbraba más a mi.

Era agradable cuando el iniciaba las cosas, le veía decidido, buscando su propio placer mientras me provocaba para obtener el mío.

Sin duda un mocoso calenturiento.

Pero era perfecto para mi... y yo esperaba ser perfecto para él.

Los días pasaban y Peter me llamaba cada noche, me dijo que llegaría dos semanas tarde y que me traería una sorpresa.

Apenas habían pasado dos semanas y le extrañaba demasiado.

El me dijo que si era paciente me daría me llevaría una gran sorpresa.

Los días se me hacían más largos, eternos sin tenerle pegado a mi, Charles venía algunos días para reírse de mi soledad.

Raven y su novio no dejaban de burlarse de mi cuando me veían suspirar y mirar la puerta con la esperanza de verle pasar corriendo por la puerta y lanzarse a mis brazos, pero eso no pasó en aquella semana, ni la siguiente.

Tres semanas y cuatro días habían pasado exactamente desde que se había ido cuando el teléfono sonó a eso de las tres de la tarde, aún estaba en la cafetería, por suerte no habían muchas personas.

-¿Amor?- su voz me saco una sonrisa sin que pudiese evitarlo.

-aquí estoy.

-¿Como estas?- sabía que él sonreía al igual que yo.

-aquí un poco aburrido...- por un momento la conexión entre mi cerebro y mi boca se esfumó y aquella frase abandonó mis labios sin que pudiese hacer nada- te extraño mucho.

-...- el silencio detrás de la línea me dio un poco de miedo, pero pronto su voz me trajo calma- ¿Quién eres y qué has hecho con mi Logan gruñón?

Una risa fue lo que escuché y no pude evitar sonreír.

-te amo, mucho, demasiado, y apenas llegue te llenarme de besos por todos los que no me has dado en estos días.

Ahora fui yo quien soltó una pequeña risa.

Estuvimos hablando unos minutos más hasta que el debió irse. Antes de cortar, le dije que lo amaba y hubiese dado lo que fuese por ver el pequeño sonrojo en su rostro que de seguro habían formado mis palabras.

Esa noche imaginaba sus pequeños labios dejar un camino de besos en mi rostro hasta mi entre pierna, sin duda no le dejaría salir de la habitación durante mucho apenas llegara.

Los días restantes pasaron aun más lento que antes, estaba ansioso por verle en casa o llegar a la cafetería y lanzarse a mis brazos.

Apenas llegue a casa recibí una llamada de Peter.

-Logan...- dijo mientras yo abría la puerta.

-Peter, ¿Llegaste?- note que nadie estaba en cada y me sentí un poco decepcionado.

-si, bueno, de eso te quería hablar- eso no se escuchaba bien- quizás me quede unos días más....

-ya veo....- hace tiempo que no veía a su madre así que era de esperar que quisiera pasar tiempo con ella, la última vez sólo la vio un día- ¿Cuando... Cuando regresaras?

El silencio fue mi respuesta y me puso un poco ansioso.

-no lo sé...- Peter soltó un gran suspiro- ¿Me extrañas?- preguntó con duda y quise tenerle al frente para responder.

-claro que te extraño, extraño tu olor flotando por todos lados, extraño ver tu rostro en la mañana, extraño tus besos de buenos días y buenas noches, no debes ni preguntar si te extraño porque lo hago mucho, demasiado.

Nuevamente se quedó callado y luego escuché un gran ruido desde el teléfono.

-¿Peter?- el no me respondía y escuché como alguien golpeaba la puerta- no me cortes, iré a abrir la puerta.

Al abrir la puerta sentí unos brazos rodear mi cuerpo mientras yo me iba de espalda al suelo.

-te amo, mucho, mucho- dijo mientras se aferraba fuertemente a mi.

-Peter... yo... pensé que no llegarías hoy...- el negó con la cabeza pegada a mi torso.

-quería saber que harías si no volvía...- tenía el rostro escondido en mi torso, sus manos se aferraban a mi cuerpo sin darme la oportunidad de alejarme.

Pasaba mis manos por su espalda mientras su olor me embriagaba.

-te extrañé mucho- dije intentando ver su rostro pero el no me dejaba- Peter, mirame.

El negó aún con el rostro metido en mi torso.

-hey, mirame, quiero ver tus ojos para luego besarte para recuperar todos estos días que no te tuve a mi lado- tímidamente y evitando mi mirada, Peter levantó el rostro para unir nuestros labios.

El movimiento era lento, disfrutando todo aquello que no pudimos disfrutar cuando estuvimos separados.

Sus brazos se abrazaron a mi cuello mientras intentaba separar mis labios con la lengua.

-te extrañé- hablo al fin con una sonrisa mientras yo me sentaba y le tomaba entre mis brazos.

-me dejaste solo por mucho tiempo- dije y el me sonrió.

-lo sé y pienso recuperar todo el tiempo perdido, pero debemos hablar de algo antes- levanté una ceja para mirarle y él miraba sus manos.

-bien, pero primero- le tomé por los muslos y lo cargue para llevarlo hasta el sofá, Peter estaba en mi regazo mientras yo acariciaba su espalda- te escucho.

-bueno...- el estaba muy nervioso- ha pasado un tiempo... tu sabes... y bueno... yo creo... y mi madre me ayudó a estar más seguro... yo... bueno, tu y yo...

-hey, mirame- levanté su mentón y le obligue a mirarme- lo que sea que tengas que decir, dilo de una vez, me pones inquieto.

El soltó un gran suspiro y paso sus manos por su rostro para ''darse animos''

-bien, espero que no te sorprenda mucho, aunque yo lo hice bastante cuando lo vi y bueno- le tomé el mentón y deje un pequeño beso en sus labios para que se calmara- creo que estarás feliz pero...- nuevamente soltó un suspiro- vamos a ser padres, bien lo dije.

Estuve en blanco mirando a Peter... hasta que sentí una lágrima correr por mi mejilla.