Capítulo VIII

1K 138 72
                                    

Él siempre me hace sentir completa.

Chandler me observa detenidamente, siento que hasta conoce mis pecados con esa mirada. Arregla su cabello un poco y me sonríe tan afable que me derrito, me derrito por que lo he extrañado tanto.

-Es -se queda sonriente mirando mi rostro-, increíble -concluye.
-Lo sé -digo sonriente.
-Ahora si creo que el mundo es pequeño -murmura incrédulo.

Me acomodo en la banca color gris del parque. Las enormes luces que decoran el parque no opacan la mirada de él, siempre tan, tan él. Es que es un chico perfecto.

Su brazo rodea mi hombro y acomodo mi cabeza en él. Me siento segura a su lado, así como antes. Hay tanto por hablar, pero prefiero aprovechar este hermoso silencio que dice más que mil palabras.

-Katherine y yo tenemos una semana de ser novios -murmura.
-Ashton y yo cuatro meses.
-¿Te hace feliz? -pregunta y se acomoda para ver mi rostro.
-Sí -digo convencida. Por que sí lo hace. Es un gran amigo y novio-. ¿Y Katherine a ti?
-Pues -guarda silencio y ve los enormes faroles de luz que están en el parque-, eso creo.

No lo hace. Conozco a mi Chandler, y esa respuesta a ¡nadie convence! Me ve y sonríe tenso. Pasa de nuevo su brazo en mi espalda y me encadena a su cuerpo son delicadeza.

Caminamos por las bellas calles de esta gran ciudad. Cargo un café en mi mano derecha mientras camino al lado de mi Chandler.

-Apareció Jason -suelto y tomo rápido un sorbo de café.

Chandler se detiene en seco y se posiciona delante de mí. ¡Oh, diablos! He metido la pata. O mejor, he metido todo. Muerdo mi labio inferior y lo veo nerviosa. Sé que va a...

-¡¿Qué?! No juegues -espeta.
-Yo... yo
-¿Dime qué no has vuelto ha hablar con él? -pregunta furioso.

Me quedo enajenada. Veo mi taza de café y ya no queda nada, ¡ahora con qué me atraganto! ¡¿Con palabras?! Intento decir algo, pero solo salen balbuceos sin sentido. A él no le puedo mentir, no puedo engañarlo; algo me delata cuando le miento a él.

-¡_________! -grita molesto.

Sacudo mi cabeza sorprendida ante su grito.

-¡Sí! -grito sin ser consiente de mi respuesta.

Él me ve con mucho enojo, ve hacía el cielo y respira muy hondo. Agita su rostro un poco y me sonríe. ¿Qué? Me está sonriendo. Oh, es que trata de no ser imprudente. ¿Algo más que no pueda ser él?

Me encojo de hombros y le veo muy compingue. Se acerca y me envuelve en sus brazos.

-Sabés que él te hace daño, ________ -regaña-. No tienes que verlo, ni hablarle.
-No exage...
-__________ -regaña.
-Solo conversamos... Y -me quedo recostada en su pecho-, me dijo aquello que desee escuchar cuando éramos novios.
-Cuentame.

Me abrace a su cuerpo y caminamos así por toda la central. Chandler no decía ni una sola palabra mientras yo le comentaba lo sucedido con Jason. Sé que está un poco decepcionado de mí. Sé que él quiere lo mejor para mí y Jason no lo es.

-Solo te pido que no te dejes llevar por lo que sentiste en el pasado por él -suplica y cierra sus ojos.
-Gracias a ti, conozco lo que valgo y sé lo que merezco -digo sonriente.

Me sonríe satisfecho a lo que he dicho. Y seguimos deambulando por las calles de Atlanta; deseo que la noche sea eterna para quedarme con él. Miro a Chandler y contengo la respiración, tiene la mirada confusa, pero lanza una juvenil sonrisa. Y de un segundo a otro me lanzo a sus brazos, él me rodea con fuerza y besa mi frente. Quiero abrazarlo hasta morir, es mi alma gemela. Me hace tan feliz.

-Quiero que estemos así por siempre -murmuro en su pecho.
-Yo también lo deseo... __________.

Me separa de su pecho y me sonríe. Abre sus labios en busca de soltar miles de palabras, pero duda y los cierra. ¿Porqué?

-¿Qué pasa? -pregunto.
-No, nada -sonríe tenso y me toma por los hombros para seguir caminando.
-Vamos, sé que pasa...
-Todavía te amo -suelta sin medir más.

Me quedo petrificada en mi punto. Agito mi cabeza e inspiro hondo. Siento una punzada de ansiedad en mi estómago. ¿Me sigue amando? Le sonrío con dolor, no merece amarme, merece alguien mejor, yo no lo soy. No soy para nadie.

-Te amo -repite.
-Chandler -increpo-. Tienes a Katherine, mereces ser feliz, sabés que conmigo...
-No hay oportunidades -termina.
-No, solo que no soy para ti. No mereces tener un desastre como yo -digo con un tono triste.

Bajo la mirada y miro la punta de mis convers rojos. Chandler se acerca a mí y levanta mi mentón con su mano derecha. Me ve con amor y besa mi frente.

-Yo te amo, desastre -susurra y una tierna sonrisa se pinta en sus labios.

Él siempre me hace sentir completa. Acuna en sus manos mi rostro y apreta mis mejías. Siento un ardor en ellas y sé que están muy rosadas. Bendito color, pienso.

Las horas trancurren y mi reloj de mano marca las 22:15. Ashton debe estar desesperado y asustado, pienso. En todas estas horas hemos llegado a hablar de apenas un año de nuestras vidas separados. Necesitamos toda la vida para terminar.

-Creo, creo que debo llamar a Ashton, debe estar desesperado -comento.
-Si -duda-. Es lo mejor.

Tomo mi teléfono y llamo a Ashton. Regaño tras regaño escucho en la llamada, si escucharán su tono de voz. Que ya es muy tarde, que con el único que debo estar hasta tarde es con él, y blah. Es un desconfiado del mundo.

-Mañana -murmura inseguro-, ¿podemos salir?
-¡Sí!

La boda, pienso. ¡Oh, no! Quiero salir con Chandler, chillo para mí. No es justo.

-No recordaba, mañana es la boda de Jason y Jasmine -murmuro triste.
-Oh, el tarado ese. -Lanza una larga risa-. Que bueno que se case.
-Chandler -regaño-. El día siguiente si saldremos. Me llamas.

Minutos después está Ashton estacionado frente a nosotros, baja del auto y me espera allí. Veo a Chandler y lo abrazo con ternura.

-Te quiero -susurro a su oído.
-Te amo -susurra al mío.

Gracias por leer. ♡

Mi Mejor Amigo Es Chandler Riggs (II Temp.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora