Capítulo XXI

626 58 18
                                    

Todo es por que te amo. Nunca he estado tan seguro de decir eso, pero contigo todo cambia”.


Me veo al espejo e intento comprender todo ésto. Me duele tanto que mi vida ha sido manejada por Chandler. Aunque... Sé que Jason no era ni es para mi vida, quizás si hubiese seguido intentado que Jason me amará no estaría donde estoy ahora.

Camino por esos enormes pasillos blancos en busca de la nueva sala de neonato, hay nuevos bebés internos y se necesita más personal, no es mi ámbito, pero tengo conocimiento general.

-Vamos campeona, te faltan -veo la tabla de control en mi mano-, dos días para que te marches de aquí.

Veo un poco más allá y está una pequeña niña, demasiado pequeña. Camino y me acerco. Veo esa dulce pequeña, tan serena. Es increíble que en unas horas estés en este mundo y en otras horas te digas que tienes que luchar para vivir.

Siento una mirada, una mirada fija en mí. Por instinto me giro y veo aquel chico dulce que dio todo de si para que me enamorará de nuevo, Ashton. Me giro inmediatamente y él entra. Guarda silencio y se coloca a mi lado.

-Yo atendí ese parto -me giro extrañada, ya que el es neurólogo-, no había personal, solo principiantes y la mamá venía muy grave. Es una niña valiente.
-Sí -respondo.
-Te extraño -murmura.

Siento mis respiraciones ir mil por hora. El me observa con detenimiento, podría decir que contempla mi rostro. Sigo viendo a la bebé y tomo algunas anotaciones, así ignoro lo que dijo, bueno olvido.

-Te necesito -murmura.
-Ashton -llamo su atención-, este no es el lugar ni el momento.
-¿Cuándo lo es? Realmente nunca -se responde-. Quiero que nosot...
-Doctora, se le necesita en la sala cuatro ala dos -interrumpe un enfermero.
-Está bien -respondo.
-Lo siento, Ashton. Hablam... -toma mi mano.
-Te quiero, por favor. Permite que hablemos por lo menos unos minutos en otro lugar. -Por favor -suplica.
-Lo merecemos -dije con sinceridad.

-
La situación con Chandler está fuera de lugar, no quiero verle, pero a la vez sí. Quiero que se aleje, pero que me abrace. Y en ese momento ya sé que pasa: no sé que hacer. Mi vida está en total descontrol, es como su no fuese mía. Como que no pudiera tomar mis propias decisiones.

Llego a casa y coloco los mensajes de mi contestadora.

Usted tiene 106 mensajes de voz.

Mensaje número 1.
1- Buenas madrugadas, habla Chandler; sé que estas durmiendo, o de turno en el hospital. Donde sea que estés te extraño, por favor, permite que hablemos, yo te amo y me niego a perderte otra vez. Por favor, todo lo he hecho por que te amo.

Mensaje número 2.
-Buenos días, si otra vez yo. ¡Dios! Te extraño como no tienes idea, me estas matando. Por favor. Yo te amo, te amo y te amo.

Mensaje número 3.
-Buenas noches...

Corro de inmediato a borrar todos los mensajes, estoy segura que son de él, y eso me lastima, mejor ya no escuchar eso que atormenta tanto. El dolor se marca en mi corazón y de pronto brota por mis ojos, en aquellas gigantescas lágrimas saladas... cada gota cae y cae y mis sollozos aparecen.

-No debiste fallarme tú -digo para mí misma.

El timbre suena y guardo mis sollozos.

-________, sé que estás ahí. Te he ido a buscar al hospital y me mandaron para acá. ¡Por favor!

Dios. Es Chandler. Corro de inmediato a la puerta y escucho su melancólica voz repetir una y otra vez decir: perdón.

-Por favor, yo te amo. Te amo como a nadie.

No pienso ni dos veces y abro la puerta. Y veo a Chandler ahí sentado, como un pequeño niño, con un rostro triste, una mirada perdida... Levanta su vista y me ve con admiración. De inmediato se levanta y arregla su cabello.

-Pensé... Pensé que llamarías a la policía -dice mal.
-No fue así -respondo seca.
-Yo, por donde empiezo. Que te digo. Me conoces muy b....
-No, creía conocerte muy bien -interrumpo.
-Todo, todo es por que te amo. Nunca he estado tan seguro de decir eso, pero contigo todo cambia. Siempre busco cuidarte, protegerte de que nadie te haga mal.
-Gracias, pero puedo hacerlo sola -digo seria.

Sus brazos me rodean en segundos y suelta un gran suspiro de alivio. Mis brazos como por orden de activación rodean su cálida espalda, aunque está sudada. Seguimos así por minutos, pareciera que con el abrazo nos vamos a curar.

Y puedes comprobar como un abrazo de la persona que te construye y destruye puede curarte irónicamente en segundos. Puedo sentir el alivio de nuestras almas susurrar cosas. Sus respiraciones agitadas chocan en mi cabello alborotado. Sus labios Rosan mi frente y planta un gran beso.

-Te amo, te amo -repite y besa mi cabeza-, te amo y no te quiero perder por nada en el mundo.

Guardo silencio y escucho sus disculpas atormentadas por el dolor.

-
No decidimos aclarar las cosas con Chandler, queremos tomarnos algo de tiempo para hacerlo con claridad, pero ya le he perdonado, creo...

Veo con una sonrisa de lado una nota en mi tablero de apuntes, es una nota violeta. Me extraño al ver el detalle.

Me pasa que te miro, y te elegiría mil veces más”.
Siempre, siempre tuyo. Ashton.

Sonrío al ver la hermosa frase, pero al mismo tiempo duele ver que el no me puede sacar de su mente, eso duele, duele porque no le puedo corresponder. Aunque con Ashton la vida era tan fácil, casi nunca discutíamos, solo nos preocupábamos por ser felices.

Con él la vida casi nunca se me complicó, es como si hubiésemos estado destinados a estar juntos. Realmente. Pero siempre buscamos lo que nos hace sufrir, nos aferramos a eso que nos maltrata el alma; seres amantes al dolor.



Gracias por leer. ♡

Sé que me he ausentado alrededor de 30 días -aprox-. Pido disculpas, enserio. :(
Yo estudio de Lunes a sábados. De 7:00- 13:00 y de las 14:00- 18:00. -Esclava por el amor de mi carrera-. Además debo priorizar, ya lo saben. Jamás me olvido de mi wattpad y de ustedes. ¡Espero comprendan!

El amor gana.

Mi Mejor Amigo Es Chandler Riggs (II Temp.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora