Mi Mejor Amigo Es Chandler Riggs (II Temp.)

Capítulo XII

Es una persona que entrega todo, y recibe poco. Y aún así, es feliz.

Le veo con nerviosismo. Algún día debía explotar todo ésto, pero esta no era la manera. Sus ojos se abren a su mayor límite y sus fosas nasales aletean. Puedo sentir como el aire comienza a tensarse al igual que nuestros cuerpos.

-¡Ahora mismo haz la maleta que nos vamos! -grita y da un puñetazo a la puerta.

Mis sentidos se ponen en alerta y doy un pequeño brinco de susto. Bufa por lo más alto y sale de cuarto.

-¡No! -grito.

Escucho como Ashton azota las puertas de las habitaciones. Se escuchan sus gritos fuertes.

-¡Maldita sea! -grita.

Me asusto y me siento sin salida. No sé qué decirle. ¿La verdad? ¿Seguir ocultando todo? ¡Por qué tenía que pasar de esta manera, chillo para mí.
Me levanto de la cama es busca de adelgazar la situación. Nunca había visto a Ashton reaccionar de esta manera.

-¿Ashton? -pregunto mientras empujo la puerta de la recámara de Jasmine.
-¿Porqué no me has dicho nada? -pregunta con la voz quebrada.
-Yo... Yo -Busco las palabras en mi cabeza, pero no encuentro las palabras correctas para que él comprenda.
-¡¿Qué?! -grita molesto-. ¿Qué?
-No me suelo abrir con nadie, entiende.
-Yo soy tu novio. Debes confiar en mí -apunta su cuerpo para su defensa-. Chandler es un desgraciado. Y Jason -grita muy alto.
-Ya, solo dame tiempo para...
-Para ¿qué? -pregunta irónico.

Le quedo viendo molesta. Ésto es muy infantil, también debo tener mi privacidad. Es una relación, sí. Debemos tener confianza, sí. Pero no implica que debo contarle todo de mí, después con mis propios secretos me destruyen. Ya no quiero vivirlo.

Salgo de la habitación molesta, y mi enojo se acumula en lágrimas que explotan en llanto. Salgo de casa mientras las lágrimas elaboran mi rostro de furia y tristeza.

-¿Qué pasa _______? -escucho una voz.

Al instante siento esos brazos delgados abrazar mi figura, y me cubren por completo. Mis quejidos se incrementan, me siento tan débil.

-Ya no llores. Cuentame para ayudarte -murmura Chandler mientras aparta un mechón de cabello de mi mejía.
-No lo sé -chillo-. No lo sé.

Me envuelvo con fuerzas en sus brazos. Descanso mi rostro en su pecho, e intento formular una solución a todo. Una solución que no implique más problemas.

-Vaya -gritan-. Vaya, vaya. ¿Qué tenemos aquí?

Mierda, Ashton. Él está fuera de control, es como si los celos lo hubiesen poseído. Chandler me suelta y se gira. Me quedo en su espalda, y él está de frente a Ashton.

-¿Qué le has hecho? -masculla Chandler.
-Tú qué le has hecho -reitera la pregunta.
-Poco hombre. Deberías avergonzarte por hacer llorar a una mujer -masculla con ira Chandler.

Tomo su espalda de los costados, para que sepa que no debe buscar la violencia. Él apreta los puños y puedo sentir como el disgusto recorre sus venas.

-Eres un hipócrita. Vienes a mi casa, te haces mi amigo y ahora resulta -guarda silencio-, que te quieres robar a mi novia.

Me asomo por los hombros de Chandler y Ashton clava su mirada en mí, por un momento siento miedo. Le temo a Ashton. No sé cómo reacciona. Ashton suelta una risa, una risa sardónica. Pasa sus manos por su pequeña barba. Y relame sus labios.

Se acerca a Chandler y posiciona sus manos en su espalda. Siento su enorme mano tomar mi brazo izquierdo.

-¡No, no! -chillo e intento zafarme de su agarre.

Me toma con fuerza y me atrae a su cuerpo. Ve a Chandler y asiente con la cabeza. Los ojos de Chandler arden de enojo.

-Suelta a ________.

Se puede ver como sus hombros se tensan. Su mandíbula marca su molestia.

-Es mía -comenta con una sonrisa. Toma mi brazo con más fuerza y hala de mí.
-De...ja...me -intento decir mientras con mi fuerza trato de quitar su mano de mí. Pero ésta apreta con más fuerza.

De un segundo a otro Chandler está encima de él, dándole fuertes manotadas a su pecho. Y involuntariamente me suelta el brazo. Corro lo más rápido que puedo para alejarme de Ashton.

Veo como ellos discuten, y las groserías no faltan de sus bocas.

-¡Ya! -grito. Ellos me observan.
-Dije que ya nos vamos, ya reserve los dos boletos -dice Ashton y se acerca a mí.
-Ella no se va contigo -responde Chandler.
-Tú debes largarte, ¡ya! -grita Ashton a Chandler.
-Ashton, deja de ser un pedazo de infantil, tenés 26 años. Comportate de tal manera -digo exaltada-. Y Chandler por favor vete, no quiero...
-No te voy a dejar con este patán.

Ashton suelta un puñetazo en la mejía de Chandler y éste cae. Rápidamente Chandler se levanta y se lanza sobre Ashton. Veo que Chandler retiene a Ashton con un puñetazo en la nariz. Y luego toma sus manos para apresarlo.

-Controlate. A golpes no llegaremos a nada -grita Chandler a Ashton.

Éste lo ve con ira y luego me observa. Trato de darle a entender con mi mirada que se calme, que las cosas se pueden arreglar hablando.

-Eres un basura de amigo. Robate a mi chica, vayanse juntos -grita mientras se le quiebra la voz.
-No, no digas eso. Claro que no te haría eso -respondo rauda y corro hacía él.

Me posiciono a su altura. El suelo. Chandler aún mantiene las manos de Ashton separadas e indefenso.

-Sí, estoy enamorado de ella desde hace 7 años. Imagina -dice gracioso-. Y ni una vez me acepto -aclara-. La amo como a nadie, pero siempre he respetado sus relaciones amorosas. Nunca me he entrometido para que ella les sea infiel. La amo y deseo que ella sea feliz.
-Pero...
-Ella es la persona más fiel que podrás conocer. Es una persona que entrega todo, y recibe poco. Y aún así, es feliz.

Veo a Chandler y me sonríe. Ashton me ve con tristeza y arrepentimiento. Es un chico reflexivo.

-La historia con Jason, es muy larga y dolorosa. No es algo que siempre andas comentado a la vida -musito mientras bajo la cabeza-. Solo pido tiempo para poder abrirme.
-Pero, siento que me has traicionado -comenta con aire melancólico.
-No es así -dice Chandler con aire de esperanza de que Ashton cambie.

Chandler se levanta de Ashton y lo suelta, al instante Ashton se sienta, toma mis manos y las apreta. Siento un aire recorrer mi espalda, un escalofrío: me ha asustado la manera de llevar los celos. Pero, todos más de alguna vez perdemos la cabeza por algo.

-Perdón -dice. Puede sentir su arrepentimiento por el aire, se nota por sus poros. Por su mirada-. Soy un estúpido, pero es porque tengo miedo de perderte -concluye.

Veo como Chandler se aleja unos pasos, para dejarnos solos. Toma una posición fresca, coloca su pie detrás de su cuerpo, intentado retener la pared, y se pone cabizbajo. Acaricia su cabello e intenta meditar todo.

-Te quiero. Y te daré más tiempo, pero dime todo de ti, para comprender -musita.

Veo a Chandler alejarse, sin una despedida. Solo una sonrisa de lado, una débil sonrisa. Coloca el gorro de su sudadera azul y se aleja por las calles de luz pálida de los faroles. Él no debía ver todo ésto. Siempre me rescata de los peores momentos.

Gracias por leer. ♡