Invitación a cenar

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Emma subió a casa, dejó la cena sobre la mesa y fue directa a casa de Joong Ki. Llamó al timbre y esperó, pero no hubo respuesta. Volvió a llamar y nada.

Joong Ki subía en ese momento a su casa, había salido a dar una vuelta por el barrio a comprar algunas cosas que necesitaba y se había demorado bastante paseando por los alrededores, aprovechando que al ser ya tarde había menos gente por la calle que pudiera reconocerlo. Llegó a su planta y cuando se abrió el ascensor vio a su vecina igual de mal peinada y desaliñada que la había visto el día anterior, aporreando su puerta. Se extrañó.

- ¡Estoy aquí!- gritó desde la puerta del ascensor- ¿quieres parar? me vas a tirar la puerta abajo ¡¿qué ocurre?!- dijo mientras se acercaba a ella.

- ¿Cómo puedes haberla dejado? ¡Eres increíble!- gritó Emma enfadada.

- ¿De qué hablas? ¿a quién he dejado?- El joven estaba totalmente perdido.

- Encima no sabes ni lo que te estoy diciendo... ¿pues de quién voy a hablar?, ¡del príncipe y la sirvienta, obviamente!- le dijo Emma ya cara a cara, pues él había llegado ya a su altura.

Joong Ki entonces se dio cuenta de que hablaba de su drama. Esa noche se había emitido el capítulo semanal y en él el príncipe abandonaba a la sirvienta de muy malas formas, la verdad, pero era algo muy típico en las series coreanas, mentir y dañar para proteger.

- No sé si eres consciente de que yo no escribo el guión de las series, solo las interpreto ¿sabes? - dijo mientras se quitaba la mascarilla sanitaria que se había puesto para bajar a la calle.

- Ummm...vale...cierto...pero...¡me da igual! ¿Algo podrás decir a los guionistas del drama si no estás de acuerdo?, ¿no?, ¿o solo vas, actúas y te vuelves a casa?

- ¡Pero que es una serie! ¡ficción!, sabes lo que es, ¿no? Pues eso- Joong Ki estaba alucinando, nunca en todos sus años de carrera se había atrevido alguien a reñirle por el rumbo que había tomado la trama de alguno de sus dramas. Estaba acostumbrado a críticas sobre su actuación de todo tipo, buenas y no tan buenas pero esto...

- No es justo, hay gente que ve tus series, las vive y disfruta y cuando pasan estas cosas les afectan y molestan. Sin ir más lejos la dependienta de la tienda 24 horas del barrio lleva dos días hablando del tema y hoy estaba muy enfadada. Hay que cuidar un poco a los seguidores de tu trabajo.- dijo Emma orgullosa de su discurso, aunque en realidad no sabía qué estaba haciendo ahí pidiendo explicaciones a su vecino y supuso que cualquier excusa era buena para meterse con él.

- Pues entonces buscad al guionista y quejaos a él, a mí dejadme en paz. Además, ojos grandes, ¿no se supone que tú no tenías tiempo de ver series porque estabas muy ocupada? Así que ahora te has convertido en una fan loca de mi drama ¿eh? vaya, vaya, qué cosas...- comentó Joong Ki con sorna, poniendo una sonrisa burlona.

- Ten por seguro que me quejaría al guionista si pudiera, y entraré a internet a hablar fatal de tu serie. ¡Y no tengo tiempo de ver series! Solo te comento lo que he oído por ahí, así que no te lo creas tanto- dijo Emma mientras ya iba camino de su casa y mintiendo descaradamente, pues estaba siguiendo su serie casi al día.

Justo antes de abrir la puerta se giró hacia Joong Ki y le gritó - ¡Ah! ¡Y deja de llamarme "ojos grandes".

- Te llamaría de otra forma si supiera cómo te llamas- dijo él mientras se encogía los hombros.

Emma no se había dado cuenta, pero era cierto, nunca le había dicho su nombre a Joong Ki, así que no podía reñirle por dirigirse a ella como "ojos grandes".

-  Me llamo Emma, así que no me vuelvas a llamar "ojos grandes" nunca más - sentenció mientras entraba a casa y cerraba la puerta.

"Así que Emma..., bonito nombre" pensó Joong Ki mientras entraba a la suya.

Más Soju, por favor (Lee Jun Ki)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora