Cuando estaba a punto de caer el último rayo de sol aparecieron los dos rezagados, no pertenecían a la alta nobleza de Silla y sin duda no eran caras conocidos. Se rumoreaba que uno era el hijo de un famoso médico en las zonas bajas de la ciudad, el otro a saber. Llegaron sofocados y rojos, pero a tiempo antes de que se cerrasen las puertas. Soo Ho no sabía qué pintaban ahí, estaba seguro de no haberlos visto en el examen de entrada y mucho menos en la posada de Wang. Lo que si sabía es que en ese dormitorio había dos terrenos, el suyo y el de Ban Ryu, y sin duda los iba a atraer a su campo.
Hizo gesto para que Han Sung, Byung Yeon, Yoon sung y Yeo Wool lo siguiesen, necesitaba integrar a todos los posibles a su grupo. Los recién llegados estaban sentados sin dirigirse la palabra sobre los escalos de piedra de la entrada.
― Hola.― esbozó su mejor sonrisa al acercarse― Vosotros también estáis en Hwarang, ¿no?
Los dos chicos lo miraron desconcertados y asintieron.
― ¡Bienvenidos! ¿Cómo os llamáis? Yo soy Soo Ho, me encantaría que os unieseis, tenemos que unirnos ya que vamos a vivir juntos para unos meses― continuó Soo Ho sin perder aplomo.
Los jóvenes lo miraron dubitativos, pero se alzaron para hacer una breve reverencia.
― Soy Son Woo.― dijo el joven que parecía más tosco.
― Me llamo...― el otro vaciló un breve instante― Ji Dwi.
Soo Ho sonrió con satisfacción.
― Mira al cabeza hueca de Soo Ho. Deberíamos hacer a esos dos nuevos de los nuestros, pero se nos ha adelantado el gilipollas ese.― gruñó Won Young― Que asco me da.
Ban Ryu se preguntó por enésima vez por qué se juntaba con gente así. Se trataba de uno de sus "mejores amigos", pero más bien era uno de los "mejores idiotas de Silla". Claro, su padre había considerado que debía mantenerlo cerca si quería mantener buena relaciones con su familia. Suspiró.
― Estaríamos entrando en su juego. Paso.― sabía de sobra que todo lo que era alterar a Soo Ho era divertido pero prefería dejar a esos dos para él. Ban Ryu no era muy diplomático, era una persona de pocas palabras y solía intimidar a los que no lo conocían. Soo Ho por el contrario era la persona más sociable de Silla, podía caerle bien a cualquiera solo sonriendo. Bueno, no consigue caer bien a todos, pensó.
Apartó la mirada, no tenía ganas de centrarse en él, ya casi había perdido los estribos por su culpa hace un rato. Todo lo que tenía que ver con Soo Ho lo alteraba.
Se apartó un poco de sus compañeros, no tenía ganas de escuchar sus conversaciones superfluas sobres las muchas mujeres con las que se habían acostado. A veces sentía que no estaba cómodo con nadie en su entorno. A fin de cuentas, no has elegido nada.
Escuchó unos pasos acercándose, supuso que sería Won Young para avisarle de que ya tenían permiso para entrar en los dormitorios pero para su sorpresa se trataba de Han Sung.
― Hey.― Ban Ryu lo saludó con una sonrisa. Siempre lo había tenido en alta estima, Han Sung nunca lo juzgó y seguía tratándolo con la misma dulzura. Era sin duda un amigo difícil de no querer.
―Hola.― Han Sung esbozó una gran sonrisa― ¿Qué haces por aquí solo?
Se encogió de hombros.
― Pensar.
― ¿En qué?
― En...― suspiró― qué hago aquí.
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HWARANG: Una historia de caballeros y flores
FanficEn el dormitorio de los Hwarang todo menos bueno pasa. Soo Ho, el más famoso donjuán, se ve obligado a compartir habitación con su archienemigo y ex-mejor amigo Ban Ryu, la tensión entre ambos es palpable y acaba volviendolos a todos locos. Por ot...