Capítulo 23

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Elizabeth.

Daniel, Vanessa y Zamira estaban en mi departamento junto a mí ya que los había invitado a comer. Habíamos pasado toda una tarde juntos en la plaza donde nos divertido a más no poder. Zamira reía y jugaba con los demás nenes y nenas que había en la plaza. Era lindo verla reír y que tenga su inocencia intacta. Cuando el sol fue desapareciendo, subimos al auto de Daniel para llevarme a mi departamento. Les dije si querían ir a comer y los tres aceptaron. Fuimos al mercado para comprar algunas pizzas y gaseosas. Al llegar a mi departamento, Zami fue al living donde prendió la tele y puso los dibujos animados. Mi hermano, Vanessa y yo fuimos a la cocina para hablar.

-¿Ashley está embarazada o no? -preguntó Vanessa con una sonrisa.

-Sí. -dije con una sonrisa.

Mi amiga había quedado embarazada unos días antes de la boda y se enteraron en la luna de miel. Cuando ella me llamó la note muy feliz igual que a Cameron. Estaban muy emocionados y no había palabras para describir eso.

-No lo pueden creer. Ella me llamó y estaba gritando, no entendía nada. -empecé a contar mientras sonreía al recordar ese día. -Me preocupé porque todavía estaban en la luna de miel. Cameron le sacó el celular y me dijo que está embarazada. Él estaba muy feliz, me dijo que ella estaba gritando por la emoción.

-¿Y ahora cómo están?

-Ashley feliz, se está cuidando con su trabajo y Cameron está feliz también. Hablé con él hace unas noches y me dijo que este año había sido un año de mierda por varias cosas que le pasaron pero que con Ashley pudo encontrar la calma y el amor aunque fue difícil para él.

-¿Por qué?

-Hasta donde Ashley me dijo, él estaba enamorado de una chica con la que no podía estar por algún motivo que no me dijo. -conté, Daniel y Vanessa me miraban. -Pero todo cambió después del accidente. Ahora están felices por la llegada de su bebé.

-El amor gana. -sonrió Vanessa.

-No siempre. -dije sin pensar.

-¿Por qué dices eso?

-Vi a Bastian el martes y fue raro haberlo visto. Por eso dije eso. -creo que mentí.

-Tienes que superarlo algún día.

-Lo sé. Por momentos siento que todo acabo pero por otros no.

Lo que realmente quería decir era que cuando estaba con Christian lo había superado pero cuando no estoy con él, siento que Bastian está en mi cabeza todo el día. No debería sentir nada por ninguno pero hay algo en mi corazón y en mi cuerpo que me gritan sus nombres.

-Un día te vas a enamorar del que menos esperas. -dijo mi cuñada. -De esa persona que es un idiota o de esa persona que cruzaste algún día en la calle. No importa, el amor llega y se queda por un largo tiempo.

***

Estábamos cenando las pizzas que mi hermano y mi cuñada hicieron mientras Zamira me contaba cosas del jardín. La puerta se abrió y miré con una sonrisa porque creí que era Charlie pero mi sonrisa desapareció al instante que vi a Christian. Sentí que el aire se me iba y que el piso se movía.

-Llegué justo para la cena.

-Hola. -dijo Zamira con una sonrisa desde su inocencia.

-Ven, Elizabeth. -sentí la voz completamente fría de mi hermano.

Daniel se paró de la silla con odio en su rostro y se fue a mi habitación. Lo seguí luego de mirar a Christian quien seguía con una sonrisa. No sabía qué me iba a decir pero no me iba a decir que me quería.

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