Para siempre

Capítulo 38

- No hay nada imposible - repetimos todos juntos.

Sinceramente odio los días de junta, es solo venir a escuchar decir que nada es imposible, que vamos a lograr vencer el cáncer y bla bla bla.

- Nos vemos el próximo jueves - dijo Joseph.

Me levanté y salí de ahí, creo que me siento con más ganas de hacer las cosas cuando salgo que cuando estoy ahí, estar ahí te deprime más de lo que ya puedes estar.

Decidí ir por un café.

- Un café por favor - dije en la cafetería.

- Lo siento Laila, ya te tomaste el del mes - dijo la cocinera.

- Oh vamos, uno más -

- Lo siento, ordenes de tu doctor, solo uno al mes -

- Y nadie lo sabrá - me acerqué y susurré.

- No - dijo también susurrando.

Solté un suspiro y caminé hacia la puerta.

- Sabes que tengo que seguir las ordenes que me dan - gritó.

Levanté una mano en señal de que lo entendía.

Voy camino a mi cuarto cuando de pronto escucho que alguien me llama.

- ¡Laila! - 

Voltee y era una enfermera.

- ¿Qué pasa? -

- Chica te estoy llamando desde hace dos minutos -

- Lo siento, no escucho muy bien -

- Está bien, necesito que me acompañes, tienes visitas -

- Ah, pues voy a mi cuarto -

- No, es en la sala de visitas -

La sala de visitas era solo para cuando una persona que no era un familiar tuyo o una persona que estuviera registrada por tus padres, viniera a visitarte.

La seguí hasta la sala y cuando entré me encontré con personas llorando, otras abrazándose, y ahí, entre todas las personas, había una mesa con solo una persona. Sí. Era Brandon.

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Sé que el capítulo es corto pero creo que algo es mejor que nada y ahora de verdad juro que actualizaré más seguido aunque sea algo pequeño.

¡Gracias por leer!

-Pretty