Samantha es un desastre, su vida entera son fiestas. No toma atención a su vida hasta que un extraño chico comienza a aparecer a donde quiera que ella vaya, junto con el llegan extraños acontecimientos a su vida y muchas situaciones vergonzosas, ¿qu...
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Abrí los ojos, no lo puedo creer, estoy en mi depa encerrada y con todas las luces apagadas, las llaves están en la casa de Amanda, ¿como Mariana pudo traerme hasta aquí?, un ruido sonó a mis espaldas, me levante del suelo corriendo a encender la luz, mire en todas direcciones muy asustada, no había nada,me senté en el sofá algo asustada y comencé a tiritar de la nada, una extraña sombra comenzó a recorrer la muralla, mi transpiración se enfrió y mi vista comenzó a nublarse poco a poco, me levanté para correr hacia mi cuarto pero me tomaron los pies y me arrastraron hasta el baño, trataba de gritar pero mis gritos no sonaban, era como si me hubieran quitado la voz, una vez en el baño me sentaron en el suelo y un hombre completo de negro entro con una daga en la mano, no puedo verle la cara, ya que ocupa un pasamontañas
-Esto es un verdadero desperdicio, enserio que esto no devio haber terminado así -dice poniéndose unos guantes
-Por favor -susurro a duras penas -el me mira sin moverse y luego me golpea con sus nudillos en la cara
-Cállate, te debiste haber alejado de todo esto, tienes un carácter fuerte, pudiste haberlos alejado de tu vida, pero tu curiosidad y tus sentimientos te obligan a estar con ellos -suelta una risa y luego me sigue golpeando
-Paul -susurro débil, el sabor a sangre es insoportable en mi boca
-¿Que dices?
-Paul... -vuelvo a susurrar aturdida en busca de ayuda
-Aaa, estas llamando a tu amor, pero adivina que, el se fue... en este momento debe estar viajando a Portland, sabiendo que te vendría a buscar -ríe de nuevo
-¿Porque a mi? -digo con dificultad
-Por culpa de tu amor y sus amigos, ellos te involucraron en todo esto... este no era tu destino, pero estas cosas pasan... y yo estoy aquí para arreglar los errores como tu
-Yo... no tengo... un amor
-Bueno, esto si que es triste, el único amor de Paul no lo recuerda, pero tranquila, son cosas que pasan, es lo natural, y lo que tiene que seguir pasando, no te culpes, el se enamoro de una simple mundana, bueno no eres tan simple pero llevas la sangre humana en ti mezclada igualmente
-¿De que hablas? -me da otro golpe y ríe
-Disfrutare mucho ver la cara de el cuando se entere que te asesiné y no pudo hacer nada para evitarlo... es tan patético, en cada vida se encargaba de enamorarte... y siempre lo conseguía, pero esta vez no, porque yo te matare antes de que el pueda lograrlo -una carcajada ronca sale de su garganta
-Pero ya basta de preámbulos, ¿ves esta daga? es una daga sagrada y te mandara al cielo o al infierno permanentemente, sin posibilidad de volver a nacer ¿sabes lo que significa eso? que no se volverán a ver Paul y tu, quizás si en el infierno, pero en el cielo es imposible, alguien como Paul no lograra volver a entrar, se congelara el infierno antes de que Paul pueda entrar al cielo -dice riendo fuertemente, en el momento que levantó la daga para clavármela en el pecho alguien le dio un golpe en la cabeza, le arrebató la daga y se la enterró en el pecho, no puedo creer lo que estoy viendo, el cuerpo se esta evaporando hasta desaparecer por completo y antes de que lo haga el tipo de la capucha le dice algo en un idioma que no logro comprender, cuando voltea quedo impactada
-Paul...- susurro
-¿Que te dijo Russel? -dice mientras me toma en brazos y me lleva al sofá
-No entendí casi nada, es todo tan confuso, debo estar soñando -digo convencida mientras comienza a darme un dolor fuerte en las costillas y la cara, Paul me acaricia el pómulo y se levanta para ir a buscar hielo
-Toma, ponte esto en el ojo -dice tendiéndome una bolsa de hielo
-¿Porque volviste?
-Eso no importa -dice cabizbajo
-¿Porque te fuiste? el me dijo que tu sabias que el vendría por mi
-Fui un imbécil... pero eso ya no importa, porque ya estoy aquí
-¿Te importo?
-Tienes que dormir, descansa -dice levantándose para mirar por la terraza
-Quiero que me cuentes todo -digo siguiéndolo con un dolor horrible en la espalda
-¿Con que fin? no hay necesidad -dice cabreado
-Necesito saberlo, muchas personas me han recomendado alejarme de ti -digo mirándolo a la cara, pero el esquiaba mi mirada
-Deberías hacerles caso, no soy alguien de bien, de echo soy el malo de la historia, esta escrito
-Russel dijo que no te dejarían entrar al cielo por nada del mundo... ¿hiciste algo muy malo?
-No fue malo, pero estaba en contra de las reglas, con el tiempo fui mereciendo esto y ahora casi pago mi peor castigo -dice pasándose una mano por el pelo
-¿Que hiciste? -insisto
-¡No te incumbe! -dice alzando la voz
-¿¡Casi me matan diciendo que tu estabas involucrado y no me incumbe!?
-¡Traicione al cielo maldita sea! me obligaron a pasar la eternidad aquí como castigo, masacré a pueblos enteros yo solo buscando una falsa aprobación, robé a gente buena y me aproveche de mujeres inocentes- dice alterado al tiempo que golpea la muralla dejando grietas en la pared
-Pero ya no eres así, ¿cierto? -digo tomando su cara entre mis manos
-No sabia lo que hacia, era un idiota... hasta que conocí a una chica -respiró hondo y luego continuo
- era su primera vida... y yo me enamore incondicionalmente, cada día la veía cantar en el prado, con su vestido englobado y su corset apretado, la obligaron a casarse con un millonario y se suicido, yo cada día la iba a ver a su tumba... hasta que volvió a nacer, espere hasta que creciera y me atreví al fin a acercarme por primera vez, sus ojos me hipnotizaron, supe que la amaría por toda la eternidad, no hay peor dolor que verla morir en cada vida... pero ya no mas, me prometí no volver a acercarme a ella, por el bien de ella y por el mio... pero de nuevo falle
-¿Si la amas demasiado porque te alejas?
-Cuando otro hombre se le acerca no me controlo, me ciego y no se lo que hago.. hasta que las cosas ya están echas -una lagrima se asoma y cae por su cara
-Debes controlarte, los celos son algo normal y...-Paul me interrumpe
-¡La maté!, esta en mi sangre hacer daño, ella se estaba enamorando de otro... y yo no lo pude soportar, maldita sea, no me lo perdonare nunca
-Tu... estas mal, esto debe ser una pesadilla, debemos estar drogados, nada de esto es real -digo tomándome la cabeza y alejándome de el
-Debes entender, que pase lo que pase, seguiré siendo el mismo, por eso me debo ir
-¡No sabes nada!, yo no te amo, te utilicé todo este tiempo, eras parte de mi plan, pero ya falló, se acabo.
-¿De que hablas? -digo destrozada
-Jugué contigo, y ya me aburrí, ahora puedes seguir tu vida de mierda tranquila- dice mientras se dirige a la puerta de entrada, yo lo golpeo pero el me empuja fuerte hacia atrás
-Eres un imbécil -grito a sus espaldas, pero el me ignoró, forcejeo la puerta hasta quebrarla y luego se marchó
