El camino hacia la valentía (Divergente)

Capitulo 55

TESS

-Porque tu padre mató a mi padre Teresa.

-¿QUÉ? - no puedo evitar decir.

-Venga vamos Tess, no te hagas la estúpida. - me agarra mas fuerte la cintura - Cuatro, la leyenda osada ha matado a un montón de gente... - me fastidia que tenga razón, otra vez - encima tenía cierto odio a mi padre...

Hago una mueca. ¿Como que odio? Jake se sorprende al ver que es cierto, que no tengo ni la menos idea de lo que me habla.

-Con que no sabes nada ¿eh? - suelta una risa - entonces sera muy interesante que sea el primero en decirte la verdad sobre tus padres. Veras Tess... Mi padre se llamaba Erik. Estuvo en la iniciación junto con tu padre. Él era un trasladado de Erudición. - hace una pausa - Lo irónico es que tu padre quedo primero en la clasificación y mi padre segundo, pero Cuatro rechazó ser líder de Osadía y mi padre cogió el puesto. En la guerra tu padre acabó matando al mío después de haberle capturado...

-Espera, pero eso fue hace más de 18 años... Tu no habías nacido...

-¿Y?

-¡Pues que no puedes estar haciendo esto por alguien que ni siquiera has conocido!

-¡Por eso mismo lo hago Teresa! - empieza a gritar como yo - No he podido conocer a mi padre y todo por culpa del tuyo...

-No digas eso... - noto como mis mejillas empiezan a calentarse y no por vergüenza - Seguramente Erik se lo ganó a pulso.

-Cállate, ¡no sabes nada de mi padre!

-¡Ni tu del mio Jake!

Nos miramos a los ojos y guardamos silencio intentando calmarnos un poco.

-Seguramente Erik no era la mejor pareja. - suelta una corta risa - Vamos, no lo era ni de broma. Pero mi madre estaba enamorada. Loca por amor - aprieta la mandíbula - le daba igual que estuviera con otras si luego volvía a donde ella. Seguramente yo habría sido un accidente estúpido para él, no habría sido el mejor padre tampoco. - cierra por un momento los ojos - pero es que no he podido comprobarlo Tess.

Susurra la última frase, dolido. Siento lástima por él la verdad. Entiendo su dolor pero no entiendo la venganza. Nunca la he entendido y nunca la entenderé. Un trocito de mi tiene la tentación de acariciar su mejilla y consolarlo, decirle que si detiene todo esto ahora, todos juntos lo podemos solucionar, ayudarle. 

Encontrar al Jake verdadero que por unos instante he percibido.

-Un día mi madre me contó toda la verdad, después me dijo que me parecía a él. - sonrie apenado - que me parecía a él... - sigue diciendo- Tome la decisión de un día vengarle. Desde entonces estuve intentando localizar a Cuatro y observándole.

-No tienes por que hacer esto, la venganza y la ira no solucionan nada...

-¿Ahora me vas a soltar un sermón? - dice y entierra profundamente la ilusión que acababa de ver de un Jake real... Pero ¿y si este es el de verdad? "No Teresa, Jake no"

-Jake la ira es como beber veneno y esperar que la otra persona muera. - ignoro su comentario anterior. - puedo y quiero ayudarte Jake. - digo susurrando.

-No Teresa - suspira - la ira y la venganza es lo único a lo que me aferro... 

-¿Y como piensas cumplirlo? ¿Matándonos a todos?

-Para cumplirlo tengo que dañar a Cuatro. Pero hacerle daño físico no serviría de nada. Estuve meses observándole y me dí cuenta de que lo único que realmente le importaba era su familia. Llegar a Tris era totalmente imposible. Tomas era demasiado listo como para acercarme. Pero tú, Teresa, eras demasiado fácil. Una niña deseando encontrar el amor. Me dí cuenta de que ya te había visto muchas veces en el instituto y de como me mirabas. - sonríe de lado - Ya lo he dicho, fue muy fácil. - recuerdo los momentos con Jake, y estoy segura que él también los recuerda - Ahora te haré sufrir - desvía la mirada a Alex - y tu dolor les hará sufrir. Luego acabaré contigo y con cada miembro de tu familia hasta que solo quede Cuatro, entonces sera ahí, cuando se de cuenta de lo solo que he estado. Por fin alguien se sentirá como yo.

Una masacre, eso es lo que pretende.

-¿Y podrás vivir con todo ello Jake? 

Dice Alex. Ha estado callado hasta este momento. Va a morir por mi y no puedo hacer nada por evitarlo.

-Tu cállate, casi estropeas mis planes, aunque luego me viniste muy bien. También fue muy sencillo enseñarte los movimientos para que Tess sospechara de ti. Aunque he de decir que ya que tuvieras un tatuaje fue mucha casualidad. 

-Has evitado mi pregunta Jake.

Sus labios se curvan en una medio sonrisa. Si un extraño pasará ahora mismo por aquí, diría que estos dos podrían ser perfectamente mejores amigos. Son todo lo contrario, y eso les complementa.

-Tu silencio me hace suponer que no podrás... ¿o me equivoco Jake?

-No sabes nada de mí como para suponer...

-En realidad - dice calmado y despacio - se bastante sobre ti y ahora mucho mas. Rubio, ojos verdes, metro ochenta y tres, pronto 19 años, infancia dura, deseo de venganza y por eso hacías maldades a tus compañeros... Me atrevería a decir que incluso mujeriego...

...Y Jake le da un patada para hacerlo callar. Alex solo sonríe. Ha dado de lleno en el blanco. 

-Voy a silencia tu mente erudita Alex. 

Estira su brazo y apunta a Alex con la maldita pistola. Algo dentro de mí despierta sin más al ver los ojos llenos de ira de Jake. "Lo va a hacer Tess" 

-Déjale Jake - grito - ¡él no te ha hecho nada! ¡Por sus venas no hay sangre Eaton! ¡Déjale!

-Hasta siempre Alex.

Todo parece suceder a cámara lenta. Oigo como aprieta el gatillo y como la bala surca el aire. Luego miro los ojos de mi Alex y se que es el fin. Un millón de emociones pasan por mi cuerpo y después desaparecen dejándome una mezcla horrible. Desesperación, ¿Qué voy a hacer ahora?, agobio, ¿Y si no soy capaz de seguir?, frustración, ¿No he podido hacer nada?, rencor, ¿Por qué Alex, Jake? odio, ¡A mi por ser tan tonta! lástima (en el fondo él es el que esta más perdido) y sobre todo amor, ¡Alex, mi Alex...!. Me vienen muchas imágenes de Alex a la vez. Dicen que cuando estás a punto de morir ves tu vida pasar por delante, y a pesar de no ser yo la que va a morir, estoy viendo pasar momentos con Alex, porque mi vida es él, y esta apunto de desvanecerse. Una especie de gemido sale de mi garganta, una mezcla entre un no y un por favor. Pero por mucho que ruegue no sirve de nada. En el último momento pierdo fuerzas y no puedo sostener la mirada. 

Cierro los ojos y aparto la cara enterrándola en el cuello de Jake.