Me encontraba perdida entre sus brazos y caricias hasta que empecé a sentirme nerviosa e incómoda. No me sentía a gusto con lo que estaba pasando, me parecía muy rápido. Decidí soltarme de su agarre saliendo de debajo de su cuerpo. Tomé toda mi ropa y me la puse enseguida. Neizan preguntaba desesperado la razón de mi reacción pero aún no tenía palabras para responderle. Salí avispada sin mirar atrás y me fui por donde había venido.
Al llegar a casa me encontré con Yuseiry dentro, me pareció extraño pero luego recordé que ella tenía una copia de mis llaves.
-Angelaaaaaaaaa! -Exclamó procediendo a echarse sobre mis brazos.
-Cariño donde has estado? -Pregunto sorprendida. -Todos estos días me has dejado olvidada!
-Estaba de viaje en Argentina...
-Al menos hubieses podido avisarme. -Le interrumpo.
-Es que todo fue muy rápido, mis padres habían organizado todo a mis espaldas, querían darme una sorpresa, sabían que quería conocer Argentina ya hace mucho tiempo y la emoción no me dejó ni siquiera tomar el celular para avisarte, además de que allá conocí a alguien que me mantuvo todo el tiempo ocupada! -Contaba con una gran alegría. -Y tú? Que has hecho en todo este tiempo?
-Bueno hay muchas cosas que contar...Por donde empiezo? Las buenas o las malas?
-Las malas!
-Vale! -De ahí nos pasamos el resto de la tardé hablando acerca de todo lo que había ocurrido mientras estaba ausente. Le conté acerca de lo del accidente de mi madre y sobre lo de Neizan, con cada cosa que le decía acerca de él sólo me respondía con un "te lo dije".
-Sabía que entre tu y el chico de los rizos de carbón se estaba cocinando algo, es que olía a kilómetros ese aroma a atracción sazonado con amor!
-De hecho vengo de estar con él, habíamos planeado estar todo el día juntos, pero llegó un momento en el que me sentí digamos que asustada por lo que estaba sucediendo y me marché.
-No me digas que... -Me mira con picardía. -Ya te uniste a mi club? -Pregunta soltando una carcajada.
-No, te he dicho que me marché antes de que sucediera.
-Aaammm que agua fiestas...Pero bien, ya que has decidido dejar a tu galán y quedarte sin nada que hacer...por qué no damos una vuelta por ahí para retomar el tiempo en que no he estado?
-No, mejor prefiero que vayamos a visitar a mi madre, claro si quieres acompañarme. -Digo dirigiéndome a la puerta.
-Pues claro, para que estamos las amigas?
Tomamos rumbo hacía el hospital y nos dirigimos a la habitación donde se encontraba mi madre. Esta vez tenía ojos entreabiertos, pero al menos estaba despierta. Me acerqué a ella y puse mi mano sobre su frente pasando a acariciar su melena.
-Ángela, mi niña cómo has estado? -Preguntó sonriente, al parecer había mejorado.
-Estoy bien Mamá, por lo que veo ha mejorado tu estado de salud!
-Si querida hija, el doctor me comentó que ya pronto podría salir, que quizás sea mañana o pasado.
-Me alegro de eso! -Exclamé con una gran sonrisa pasando a dejar un beso en su mejilla.
-Y tu Papá?, el no ha venido a verme en todos estos días...
-Que raro, -Interrumpo -Varias veces ha salido de casa diciendo que se dirigía hacia acá. -Arrugo mi frente y ella pasa a voltear su cabeza, al parecer lo que le dije no fue mucho de su agrado. -Pensé que el había estado visitandote los últimos días, de hecho no se ha pasado mucho tiempo en casa.
ESTÁS LEYENDO
Detrás de Mí
RomanceMientras la vida sigue su transcurso va dejando huellas en la historia de esta chica nefelibata. Estas huellas a su paso van dejando como resultado que está vaya perdiendo su resiliencia. Debido a la carga que la vida le inyecta esta chica va soltan...