-16-
Yo me voy a casar contigo.
Es tan difícil entender el significado de esas dos sencillas palabras, es tan difícil creerlo, realmente era feliz, manteniéndome ignorante ante esta carencia de conocimiento, ignorando todo lo que ocurría en mi mente, fingiendo que todo está bien y sabiendo la burla en la cual caí.
-Ahora regreso- Fue lo único que avise al salir de mi casa, sin dar explicación alguna o esperar cualquier pregunta de mi madre.
Transite un par de cuadras hacia un lugar en especifico, ese tranquilo lugar, camine por las calles con la cabeza abajo, no era tan noche como para dar con las solitarias avenidas, llegue a ese punto, ¿Hace cuanto no venia?, ¿Hace cuanto no le prestaba atención? Ese sitio el cual durante el día estaba lleno de risas, ilusiones, pequeñitas personas inocentes e ignorando los problemas del mundo, este lugar que por las noches se convertía en el sitio perfecto para las parejas de novios. Unas cuantas parejas dispersadas por el lugar, algunos simplemente charlando, otros metidos en sus cosas y otros más con exageradas muestras de cariño, besándose y tocándose sin pudor alguno, después de todo así era la vida del parque.
Camine hacia uno de los columpios, me senté en el frío juego escuchando el rechinar de las cadenas al instante, las cual tome entre mis manos y comencé a balancearme con suavidad, ¿Hace cuanto que no subía a un columpio?
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-Ross, más alto- Pedía emocionada al sentir el viento alborotar mis cabellos, chocar contra mi rostro y esa suave adrenalina en mi cuerpo.
Sus manos se posaban sobre el columpio empujando con fuerza al momento en que bajaba, si, lo recuerdo, recuerdo lo divertido que era.
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De una u otra forma la situación me altera, de una u otra forma la confusión que siento es normal, es normal sentirme de esta manera ante lo que ocurre, ninguna persona se conformaría con ser usada, al menos no yo, necesito una razón para poder llamar a esto, una razón a lo que somos, una explicación a lo que él entiende con esto, una razón al hecho de que usara esas palabras ¿Es la clase de personas que las usa sin pensar?, ¿Es tan cobarde para recurrir a eso con tal de obtener su objetivo?
Es común que cada hombre sienta importante el número de chicas con las cual ha estado, eso solo aumenta su ego y los enorgullece, es tan fácil recurrir a las artimañas más bajas y mentiras ante estas situaciones, lograr su objetivo a toda costa y agregar una mujer más a su extensa colección.
Ross Lynch, el galán presumido, experto en mujeres, la persona más complicada, la persona más odiosa, la persona que más detesto, la persona que me hace sentir esto.
Estaba tan sumida en mis pensamientos, mirando a ningún punto en específico al suelo, balanceándome por pura inercia y buscando una solución a esto, escucho el rechinar del columpio de al lado lo que me indicaba que había sido ocupado, lo ignore.
El silencio seguía, los lejanos murmuros, el sonido de los columpios balanceándose irregularmente, ya lo sabía, no quise hablar, no quise decir nada, no quería enfrentarlo.
-Te he estado buscando- Rompió el silencio segundos después.
No respondí.
-Imagine que estarías aquí- Agrego- ¿Estás bien? ¿Por qué me estas evitando?
No es como que quisiera escapar de él, tarde o temprano tendría que verlo, tan solo, no me sentía lista, tan solo, quería pensarlo.
-Ya no quiero, seguir con esto- Agregue pausadamente.
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Asfixia; lynch
FanfictionRoss Lynch es el típico mujeriego que se acuesta con todas. Tú, la chica que está enamorada del hermano del chico mujeriego de la escuela, Riker Lynch. Quizás los sentimientos son equivocados, quizás las cosas se complican, quizás todo da un giro de...