BAD DECISIONS; CAMREN

《3. Sorpresas

- POV KARLA -

Después haber recibido una tremenda putiza de León por desaparecer casi veinticuatro horas. Me dio mi buena paga y también mis días de 'descanso';y aquella última parte era lo mejor.

Sólo llegué a mi departamento, me duché y en menos de veinte minutos ya estaba como nueva.

Me acosté en la cama, apreciando mi arma. La única que me ha salvado la vida en diferentes situaciones;mi fiel compañera.

De pronto, recordé a la guapa ojiverde, y sonreí como una boba niña enamorada. Si, creo estoy enamorada. No dejo de pensar en ella, en su sonrisa, en sus ojos, en sus besos, sus caricias, su perfume... en todo lo de ella; eso es estar enamorada ¿No?.

-Lauren, Lauren, Lauren... Serás mi mujer-Aseguré con una sonrisa.
De repente, abrieron la puerta de mi habitación, así que rápidamente apunté,haciendo sobresaltar a mi hermano.

-No Mames!, baja eso güey. Soy yo, tu guapo hermanito - Dijo levantando ambas manos en señal de paz.
Comencé a reír y casi de un salto bajé de la cama para correr a sus brazos- ¡Sorpresa!

-¡Regresaste pronto! ¿Estás bien? - Pregunté agarrando su rostro entre mis manos y observando con detalle.

- Tienes un hermano de acero, no pasa nada, chingao' - Me envolvió en un abrazo, de esos que te hacían sentir protegida, que te hacían sentir que nada malo pasaría y sobre todo, me hacía sentir que le importaba a alguien, que ese alguien era mi hermano, mi sangre, y me amaba. - Ya me enteré que te echaste al González, hiciste un buen trabajo.

-Siempre hago un buen trabajo- Dejé un beso en su mejilla- ¿Todo bien con la mercancía?

- Todo perfecto, morenita. Todo llegó a su dueño - Guiñó un ojo, siempre era tan confiado y seguro de sí.

Mi hermano no es igual que yo, él no es un 'asesino a sueldo' o "sicario". Él se encarga de trasladar la mercancía de León a su destino. Él era el mejor de todos, tan inteligente, un verdadero líder, el segundo de León.

- Eres increíble hermanito. - lo agarré de la mano para llevarlo a la cocina. - ¿Cerveza o Tequila? -ofrecí, mientras el tomaba asiento en en los bancos de la isla de cocina.

-Un Tequila, por favor. - sonrió. Mientras sacaba varias fajas de dólares - Me gusta trabajar más de este lado. Aquí pagan en dólares, morenita. Mira no'más - Asentí entregándole un shot de tequila. - Mira esto es pa' ti, - señaló tres fajas de billetes.

- ¿Para mi? Yo tengo lo mío. León me pagó en la mañana. Ese es tu dinero, no mío - Él rodó los ojos mientras sonreía.

- Ya, no seas rejega, anda, guardalos. Ya te dije que siempre debemos ahorrar y guardarlo en el cofre mágico. Nunca se sabe cuando podemos utilizarlo - dijo antes de beber su tequila de un sólo golpe, y yo también hice lo mismo con el mío al escucharlo.

- Todavía sigues pensando en que algún día vamos a salir libres de esta mierda, ¿Verdad?. - sonrió de nuevo, encogiendo los hombros, mientras señalaba los billetes, haciendo un gesto retador.

Él insistía tanto en que algún día seremos libres de nuestra mierda, por lo tanto habría que guardar tanto dinero y documentos importantes en un "cofre mágico", ya teníamos mucho dinero, pero para él nunca sería suficiente.

- Nunca se sabe. Dime, ¿Qué hiciste estos días sin mi? ¿ah?- preguntó curioso. Él siempre se preocupaba por mí, le daba igual que yo fuera la mejor sicario del mundo, le daba igual que fuera una criminal, una maldita asesina. Él siempre será el hermano mayor preocupado.