Destinadas

7- Urim y Tumin

El sol asomaba por la ventana de aquella pequeña habitación de hotel. El silencio inundaba esas 4 paredes, solo una respiración pausada se dejaba oír desde la cama. Camila dormía plácidamente abrazada a Lauren. De repente, el sonido estridente de una alarma resonó y Camila empezó a moverse lentamente, abriendo poco a poco los ojos. Una sonrisa se dibujo enseguida en su rostro, una sonrisa difícil de borrar...la imagen de Lauren dormida entre sus brazos valía oro...y así se quedo durante largos minutos, en silencio, observando cada detalle del hermoso rostro de aquella chica que le había robado el corazón en tan poco tiempo. En su mente aun rondaba lo ocurrido la noche interior, aun desfilaban las imágenes de aquella extraña confesión, aun resonaban aquellas palabras pronunciadas: "maldita Camila"... pero sobre todo aquel "quiero besarte"...

(Flashback)

-En serio...no puedo...no quiero... - Ya no sabía que decir, los ojos de Camila la tenía hipnotizada y sin saber muy bien porque, su cuerpo se acercaba mas y mas al de ella, Lauren estaba perdiendo el control - dios...quiero...quiero besarte...

Camila se quedo perpleja frente a semejante confesión, su mirada se perdía en los labios de la chica, en sus ojos verdes, en sus palabras que aun bailaban en el aire, pero algo en ella le impedía moverse o actuar...

-¿Tú no quieres besarme? - Preguntó un tanto confundida, mientras intentaba agarrarse a la pared para no caer.

Lauren intento avanzar hacia la morocha, acercándose peligrosamente a sus labios, pero Camila salió de su trance y reacciono.

-Laur - dijo al mismo tiempo que la apartaba ligeramente de ella - No...no puedo...

-Pero... - la morocha le interrumpió

-Me gustas...me gustas mucho...pero...dios...estás borracha y no quiero besarte así, no puedo...y tampoco quiero hacerlo sabiendo que tienes novia...y....es horrible porqué la verdad es que me muero de ganas de besarte - terminó confesando

-Entonces bésame! - volvió a acercarse

-No! - Se negó de nuevo con algo de dificultad, porque realmente le deseaba también

Lauren volvió a agarrarse a la pared, su estado estaba algo alterado por la cantidad de alcohol ingerido. Camila suspiró, no sabía qué hacer, por una parte estaba feliz por todas aquellas palabras, pero también era consciente del estado de la chica y de su anterior pelea con la novia. No le parecía justo aprovecharse de la situación, aunque realmente lo deseaba, realmente deseaba poder disfrutar de aquel beso que Lauren le ofrecía, pero no podía.

-Vamos...te llevo a casa. - Le agarro el brazo a Lauren para ayudarla.

-No...no quiero! Quiero besarte! ¿Porque no quieres? - Los ojos se le cerraban al mismo tiempo que perdía el equilibrio.

-Vamos Laur...no te aguantas ni de pies... - Hizo una pequeña pausa - Te llevo a casa y mañana hablamos, ¿Vale? Y si aun quieres besarme...

-¿Me besaras? - Pregunto entusiasmada intentando abrir los ojos

La morocha no pudo evitar esbozar una pequeña sonrisa.

-Si...te besare...pero ahora vamos...

Camila agarro el brazo de Lauren para ayudarla a salir del baño, pero apenas dieron dos pasos, que Lauren se paró en seco.

-No quiero ir a casa...ni si quiera es mi casa... - Se lamento

Camila se dio cuenta de la situación, Lauren tenía razón, encima sería muy extraño que ella, justamente ella, apareciera con Lauren completamente borracha en el departamento de la novia, sin olvidar que en ese estado la chica era capaz de soltar cualquier barbaridad. Pero si la llevaba al hotel con ella, aquello daría aun más problemas, podrían pensar cualquier cosa. La morocha intento pensar con claridad, pero ninguna de las dos opciones le parecía bien, así que teniendo en cuenta que hiciera lo que hiciera todo podría salir mal, opto por la segunda opción. Sin más salieron del baño y que sea lo que dios quiera.