Las casualidades son señales enviadas por el destino, señales que aparecen en nuestro camino incitándonos a tomar una dirección, a veces no sabemos ver aquellas señales…esa es la razón por la cuales se repiten…
-Bueno…aquí está…les presento a Camila! – Dijo con una sonrisa
Carmen y Lauren se quedaron boquiabiertas al ver a la morocha, aquello era ya demasiada casualidad, vale que Roma no sea inmenso, pero solo llevaban algunos días allí y no paraban de encontrarse…
-¿Tú? -Pregunto Carmen -Dios…no puede ser! – Exclamo un tanto malhumorada
-¿Se conocen? – Pregunto confusa
-Euh…si…nos hemos visto unas cuantas veces… - No podía apartar sus ojos de Lauren, recordando al mismo tiempo lo que David le había dicho esa misma mañana "tiene novia y encima no creo que vuelvan a cruzarse…sería demasiada casualidad!", en efecto…demasiadas casualidades ocurrían con aquella chica, demasiadas sensaciones sentía desde el mismo instante en que se encontró con ella en el avión…
-Hola… - Saludo Lauren con una sonrisa – Vaya…que casualidad…
-Si…demasiada! – Susurro de mala gana Carmen
Verónica miraba a su amiga sin entender muy bien porque aquel cambio de humor, pero no quizo decir nada.
-Bueno…ya que se conocen…podemos ir a la mesa… - Atrapo la mano de la morocha tirando de ella, mientras que Lauren las veía desde atrás.
Camila y la morena se acercaron a sus amigos, David levanto la vista al verlas llegar y se quedo sorprendido al ver a Carmen y Lauren llegar justo de tras…
-No me lo puedo creer! – Exclamo en voz alta ganándose una intensa mirada de su amiga
-Hola David! – Sonrió Carmen, ella no tenia problema alguno con el chico
-Hola… -Lauren le sonrio
David se levanto rápidamente de su sitio para saludarlas.
-Es increíble…¿Que hacen aquí?
-Carmen es amiga mía – Interrumpió Veronica
-Vaya…¿Que pequeño es el mundo, no? – lanzo una insinuante mirada hacia Camila que intentaba mirar hacia otro lado.
Carmen miro a su novia que parecía algo incomoda y muy callada.
-¿Quieres tomar algo? -Le pregunto a su novia
-Si…te acompaño! – Dijo rápidamente sintiéndose algo nerviosa
Carmen asintió y las dos se dirigieron hacia la barra.
Mientras tanto, David observaba a su amiga con una sonrisa pero también algo confuso, todo aquello le parecía una locura, el chico no creía en el destino, para él todo aquello de las señales eran absurdidades inventadas por las personas que intentaban simplemente buscar una explicación a las casualidades…pero ahora ya no estaba tan seguro, desde que Camila se encontró con Lauren en el avión, todo había sido extraño, no paraban de encontrarse…primero a la salida del aeropuerto, después en aquel Pub, luego en el restaurante y ahora estaban aquí…¿Quien hubiese imaginado que aquella chica que conocieron la noche anterior era amiga intima de la novia de Lauren? ¿Quien? Nadie! Aquello era alucinante y desconcertante! El chico miro a su amiga que parecía algo ausente, perdida en sus pensamientos…
-Camila…¿Estás bien? – No respondía – ¿Mila?
Finalmente la morocha salió de su mundo y miro al chico con una sonrisa bastante fingida.
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Destinadas
Romansa"Tu lo llamas casualidad, yo lo llamo Destino. De alguna manera Tu y Yo estamos destinadas a estar Juntas"