El Diario De Una Puta

Mejor Amiga.

Ya eran las 3 de la tarde y Amy estaba dormida, se le veía muy tranquila, yo tenia hambre de nuevo entonces me levante suavemente para no despertarla y fui a buscar comida.
Habrí la nevera y estaba repleta de comida. En ese momento pensé que las prostitutas viven muy bien, así que me alegró eso.
Saque una lata de atún y me la comí.

- oh, esto esta muy bueno. -estaba hablando sola. Y antes de que siguiera hablando con migo misma, escuche que sonó mi teléfono y estaba en la habitación de Amy, corrí muy rápido me resbale, caí pero me levante al instante y agarre él celular, todo por que enserio no la quería despertar, se veía tan linda y cómoda.

- Hola? -contesté

- Holaaaa, como esta mi amiga favorita?

- Ah, eres tu

- Si, soy yo, estúpida.

Reí.

- Y ese milagro que me llamas? -dije

- Pues, para que veas que si me importas pendeja. - respondió

- Ay, que linda, me haras llorar. 

- Ya, deja tus idioteces ¿como estas? - preguntó

-  Oooh, bien, tengo tanto que contarte Naty -dije con vos chillona.

- Ah si? Pues ven a verme ya estoy de vuelta en la ciudad.

- Enserio? No te creo, seguro me estas jugando una broma y me harás ir hasta tu casa pero de seguro no habrá nadie.

- Tahia, no mames,  es enserio.

- ...De veras? Ay, te adoro, ya salgo para tu casa, no te muevas de ahí. Bye.- colgué

No queria irme sin decirle nada a Amy, pero no la iba a despertar. Así que busque papel y le escribí una nota.

Disculpame por irme sin avisar, pero no quería arruinar tu sueño, fui a la casa de una amiga, nos vemos en la noche, adiós♡

Me vestí rápido y salí. De echo la casa de Naty quedaba a unas 6 cuadras de allí así que me fui caminando, casi corriendo. Llegue a la casa y toque como loca la puerta.

- Que te pasaaa, deja de tocar de esa manera, loca. - Me regaño, y yo solo la abracé.

En verdad era Naty, llevaba mas de un mes sin verla y la extrañaba. Ella sonrio y también me abrazo.

- Estas cada día mas horrenda. -dije

- Gracias, yo también te quiero. -respondió Naty.

Entré y fuimos a su habitación.

- Ahora si, cuéntamelo TO-DO -dijo

- No se por donde empezar

- Pues, por él principio, no crees? - Replico

Le conté desde la pelea que tuve con mi madre él día de mi cumpleaños hasta lo que había pasado con Brad y Amy, ella permaneció en silencio y haciendo caras de todo tipo,  hasta que termine.

- ERES UNA PERRA! - grito

- Una perra? no, una puta, literalmente eso soy ahora.

- No creí que en verdad empezarías a trabajar en ese puteadero. -rió

- Sabias que era enserio, no te hagas.

- Bueno, me tienes que llevar a ese burdel y presentarme al tal Brad, lo quiero conocer.

- Si lo se.

Hablamos hasta que llego la noche, mi teléfono se había quedado sin batería y debía llamar a mamá, pero al rato se me olvido y no la llame. Ya casi debía irme al trabajo, pero primero debía ir a la casa por ropa y para bañarme. Le pedí algo de comer a Naty y me fui. Había sido un placer verla de nuevo.