El Diario De Una Puta

Mas problemas...

- Hey, Amy ya se fue? -Le pregunté a Jess

- Si, hace como una hora. Pero dejo su motocicleta afuera, para que tu te fueras en ella, ten aquí están las llaves.

Amy me habia dejado su motocicleta a mi? Y ella se había ido en el autobús? Pero que carajos? La motocicleta era lo mas sagrado que Amy tenía.

Salí de mi asombro y fui a buscar la maldita motocicleta. Entonces la encendí.

- Yo no se manejar, como coño voy a llegar a la casa de Amy en esta puta motocicleta si no se conducirla! -hablaba sola como loca mientras pensaba en que hacer.

- Que tan difícil puede ser? - pensé.

Algunas personas me miraban, así que me hice la valiente y arranqué, me moví unos 2 metros, quizá, y luego, me caí. La maldita motocicleta cayó sobre mi, y mi cara sobre el asfalto, me paré como pude, patee la motocicleta como si hubiese tenido ls culpa, al patearla me lastimé el pie.

- MALDITA SEA, MALDITA AMY, PARA QUE ME DEJASTE TU PUTA MOTOCICLETA EH? - yo gritaba en medio de la calle

Las personas que me habian estado observando, ahors se reían, se reían de mi, solo se me ocurrió enseñarles mi hermoso dedo del medio.

Deje ahí la chatarra esa que me habia echo caer y fui a la parada de autobuses, me senté a esperar. Tenía tanta rabia, que se me salían las lágrimas, pero no quería llorar.
Después de unos minutos llegó el autobús, la trayectoria hasta la casa de Amy se me hizo muy corta. Entonces llegué, saque mis llaves para abrir y no tener que tocar la puerta.

- Holaaaa! - me abrazo Amy muy emocionada y me dió un beso.

- Hey quiero preguntarte algo - sonreí, una sonrisa falsa obvio.

- Si, claro, dime.

- Por que me dejaste tu motocicleta?

- Jeje, ay bueno, es que hoy no quería conducir, así que tome el autobús -repondio con una linda sonrisa - Entonces pensé que quizás te gustaría conducir, siempre me dices que te gusta el viento en tu cara  cuando vamos en la motocicleta... Oye, que te pasó en la cara?

- Oh, oh comprendo -ignore su estupida pregunta- gracias por tu maldita amabilidad, pero no la necesitaba, sabías que no se conducir? Quieres saber que me pasó en la cara? Pues me caí intentando conducir tu estupida motocicleta! - grité.

Ella se quedó mirándome y empezó a reírse.

- Crees que estoy bromeando? - dije muy molesta, ella seguía riendo.

- Esto no me hace ninguna gracia maldita bastarda deja de reírte ya DEJA DE REIRTE! - Grite y la empuje muy fuerte, ella cayó al piso.

- Para que intentaste conducir si no sabías?

- Sólo eso vas a decir?

- Ya, esta bien, perdóname, se que nunca te pregunté si sabías conducir o no. En verdad lo lamento, perdóname, ¿si?

Amy nunca pedía perdón por nada... Admito que algo de la culpa era mía.

- Ya, esta bien, perdón por empujarte - la ayude a levantarse y el tema no se mencionó más.

Me fui a dar un baño, depronto recorde lo que Brad me había dicho y me puso triste.

- Será que cumplirá su promesa de ir a verme todos los días al maldito burdel? Y si sus intenciones si son sinceras? Que es lo que me detiene para irme con el? Por que carajos soy una prostituta? Vaya! Pero que grandes aspiraciones tengo en la vida.. soy una basura. - pensé.

Después de un rato de llorar y filosofar sobre la vida, me vestí y salí, fui a buscar algo de comida y me senté a ver la televisión.

- Que ocurre? - preguntó Amy, ah si, estaba sentada a mi lado, tal vez no la noté.

- Brad dice que quiere hacerme su esposa - dije sin preámbulos.

- Ja! Lo que faltaba, ahora las prostitutas se casan con sus clientes, que hermoso cuento de hadas.

- Puedes dejar el sarcasmo por un momento, te estoy hablando enserio Amy.

- Tu le crees a ese idiota? Quien quiere casarse con una puta? Ay por favor! Y tu le crees todo lo que te dice ¿no?

- Pues si, si le creo, el ha sido muy sincero conmigo...

- Como estas segura de que es sincero?
- Solo lo se! Y ya.

- Muy bien, entonces te casarás con ese imbécil?

- Por que hablas así de el? Te hizo algo? Eh?

- Acaso no lo entiendes? Es por que tu me gustas! En verdad me gustas! No me atraes sólo físicamente, lo que siento es más que eso... Como quieres que el tal Brad me caiga bien si te quiere alejar de mi.

No supe que más decir

- Si me vas a dejar, vete ahora mismo, no quiero encariñarme más con una persona que no siente lo mismo por mi. - Y se fue, a dormir.